LA ESPOSA DEL MAGNATE

Alicia no quería levantar la cabeza, sus manos estaban temblando.

— ¡¡mira a esta niña despreciable!! por favor no se enoje presidente, solo una despreciable persona.

El gerente le habló a Enzo con sumo respeto, al no escuchar a Enzo decir nada, miró de nuevo a Alicia y rugió.

—¡¡que estás haciendo, no te disculpas con el presidente o eres muda, aún aprecias tu vida!!

Alicia no levantó la cabeza, su cabello era un desastre y este cubría gran parte de su rostro y su ropa se había mojado.

"Cómo es que este hombre está aquí, además por la forma en que el gerente le habla debe ser muy importante, me reconocerá"

Ella estaba muy preocupada se había lanzado prácticamente al hombre, y era muy vergonzoso, además el hombre fue muy brusco y aunque pasaron dos semanas desde el 'accidente' aún quedaba algunas huellas en su cuerpo.

Ella levantó un poco su cabeza y vio al hermoso hombre, podría decir que el hombre salió de una pintura y nadie la refutaría.

Los ojos de Alicia se encontraron con los de Enzo, ella recorrió su hermoso rostro, cabello negro sedoso, cejas pobladas, sus ojos que al fin pudo ver era de un azul oscuro atractivo y atrayente, su nariz era muy bien definida y sus labios eran aún más atractivos, el hombre era bastante alto era de 1.89 metros.

"Como fue que estuve sobre este hermoso gigante"

Alicia recordó cuando probó esos hermosos labios y ese esbelto cuerpo y rápidamente volvió a bajar la cabeza con vergüenza.

"Cuando me volví tan pervertida"

El gerente seguía disculpandosé, cuando la voz de vitale resonó en el pasillo interrumpiendo el gerente y sacando a Alicia de sus pensamientos.

— Los zapatos de cuero de Enzo están sucios.

El gerente miró los zapatos de Enzo y vio que el agua había caído en sus zapatos, se secó el sudor que caía por su rostro y miró a Alicia, al ver que ella se había dado la vuelta para escapar le grito enojado.

— ¡¡A DÓNDE VAS!!

"Esta maldita mujer piensa en escapar y dejarme en este problema que causó"

Alicia miró al gerente, sus ojos estaban muy fríos, el gerente al mirar sus ojos sintió un poco de peligro, cuando volvió a mirar los ojos de la chica se había desvanecido cualquier frialdad, el gerente pensó que había visto mal y volvió a gritar.

— que esperas para limpiarlo, esperas que lo haga por ti, mujer despreciable.

"Este estúpido gerente si tan solo me hubiera dejado ir, que mala suerte tengo"

Pensó, miró a su alrededor y vio el trapo con el que limpiaba las ventanas sobre su hombre y sonríe para sus adentros.

"Espera y si este hombre me reconoce, no lo creó estaba dormido y como borracho, no creo que me reconozca, además no creo que reconozca mi voz si no hablo, que inteligente soy je, je, je"

Con el trapo en sus manos, se acercó y limpio los zapatos, pero estos solo se ensuciaron más.

Ella retuerce el trapo y vuelve a limpiar, pero esto no limpia el zapato, el gerente miró a Enzo y empezó sudar aún más, está personas era conocido por ser despiadado, dio un pazo hacia Alicia y grito

— que estás haciendo

"quién no sabe qué este presidente es un obsesivo por la limpieza, está estúpida mujer va ahacer que los entierren a los dos"

Alicia miró al gerente y frunció el ceño

"no dijo que limpiará los zapatos, que más estoy haciendo, además no es mi culpa que el trapo esté sucio jum"

Enzo miró la mano de la mujer y el trapo que ensuciaba cada vez más su pie, dos cosas que lo irritaban lo estaban tocando, Enzo patio el trapo lastimando así la mano de Alicia.

Ella lo miró y bajo la cabeza, sus ojos estaban helados

"Este maldito hombre, no tiene un poco de consideración por los demás, bastardo loco."

Alicia mordió su labio para soportar su ira y la injusticia.

La voz helada y sin emoción de Enzo sonó en el pasillo

— trae un par nuevo

Enzo miró al gerente, su mirada era tan aterradora que las piernas del gerente se debilitaron y casi se cae, ella sintió el peligro que se avecinaba y se dio de cuenta que había ofendido a alguien muy poderoso.