OBLIGADA A CASARME CON EL DEMONIO RUSO

 (YERIK )

Después de unos días tan lindos con mi mujer me tocó volver a la realidad, necesitaba unos papeles muy importantes, los busqué por toda la oficina y no los encontré, seguramente se los había llevado mi padre, por más que se había retirado seguía manejando algun que otro negocio, molesto tomé las llaves de mi auto deportivo y maneje a toda velocidad hasta llegar a su mansión, no tenía pensado tener que venir aquí hoy, entre y me encontré con un escenario bastante feo, mamá estaba recostada en el sillón de la sala llorando mientras mi hermano Iván quién es médico, la estaba atendiendo y mi padre puteaba a más no poder por lo bajo, me lleve la mano a la cabeza a la vez que me arrimaba a hablar con mi padre

- Papá que ha Pasado? Porque mamá está así? - pregunte mientras el soltaba un suspiro y me pidió que fuéramos a hablar a su despacho

Lo seguí en silencio, entramos y él estalló

- Maldita sea quiero matarlo, juro que voy a matarlo - dijo mi padre arrojando todo lo que tenía sobre su escritorio

- Tranquilízate y explícame que está sucediendo con mamá

- Tu hermano que va a suceder... - dijo sirviendo dos copas de whisky tomando de un solo saqué la de el

- Jonás? Que hizo ahora el imbécil ese - pregunte probando mi bebida

- Que no hizo, el muy idiota ensucio el apellido de la manera más vil que existe, mordió la mano de quién le dio de comer - dijo sirviéndose otra copa de whisky y lo frene

- Papá es muy temprano para que te emborraches no crees? Piensa en mamá - dije y soltó un suspiro

- Tienes razón hijo.. - dejo la copa en su lugar y camino hasta el sillón - Como te decía el maldito de tu hermano se asoció con los latinos y está traficando mujeres, ay niñas de doce años, maldita sea!! - grito dando un puño a la pared - nosotros no somos trigo limpio, muchas veces nos hemos manchado las manos con sangre pero jamás hemos lastimado mujeres inocentes mucho menos niñas... Eso va encontrá de nuestra ley

- Es un maldito infeliz pero de el ya no me sorprende nada, después que se metió con las perras de mis ex esposas, ya puedo esperar cualquier cosa de el, además que sabes que estaba molesto porque me nombraste tu sucesor es por eso que mamá se puso así? Tu se lo dijistes?

- Estábamos en el jardín con tu madre tomando un té cuando vino mi informante y por desgracia ella lo escucho, pero eso no es todo

- Que más hizo ? Pregunte apretando el puente de mi nariz

- Ademas de que se dedique al tráfico de mujeres, sabes que ha hecho? - pregunto desatando el nudo de su corbata, negué con mi cabeza

- Te has enterado del violador serial, el que ha salido en todos los canales de televisión, el responsable de que hayan encontrado a esas chicas violadas y asesinadas.. Es tú hermano, perdió la cabeza por completo

Lo primero que se me vino a la mente era mi mujer, Calina hoy salió temprano quería visitar a sus padres y luego iría a almorzar con su amiga, si bien llevo seguridad se lo inteligente que puede ser este cerdo miserable, tomé mi teléfono y marque casi desesperado por saber que estaba bien

Sentí que me enloqueceria en cualquier momento al no tener respuesta de su parte, estaba a punto de salir corriendo a buscarla a dónde fuera cuando al fin atendió

- Hola cariño que sucede? - pregunto con su dulce voz

- Dios mío Calina porque demonios tardas tanto en responder - dije casi gritando cosa que me regañe mentalmente luego

- Yerik Sokolov no me levantes la voz - sonó seca y tajante

- Lo siento amor mío es que me asusté, porque mejor no vuelves a casa

- No, ya te dije que tenía planes, además recién pedimos el almuerzo, no jodas Yerik

- Bien solo no te alejes de tu seguridad está bien?

- si papá lo haré adiós - dicho esto corto

Le envié un mensaje a mis hombres encargados de cuidar de ella que no se le despegaran ni cuando fuera al baño, no iba a poder respirar con tranquilidad hasta que ella no estuviera en la mansión a mi lado

Seguí hablando con mi padre y luego fuimos a ver cómo seguía mi madre la cuál ya se encontraba en su habitación dormida, mi hermano le había inyectado un sedante por lo cuál dormiría el resto del día, me despedí de ellos y sin ganas me fui a la reunión que tenía con un socio en un bar a las afueras de la ciudad, después de la noticia de mi hermano no tengo cabeza para el trabajo, pero haré el intento al menos.

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( LARISSA )

Siento que me volveré loca en cualquier momento, este lugar es un bodrio, quiero llorar de aburrimiento, no puedo volver a casa ni irme a ningún lado ya que mi padre me quito el pasaporte, además que dejó dos gorilas que vigilan todos mis pasos

Extraño mi vida de antes, extraño levantarme y que me sirvan el desayuno, que me preparen el baño y la ropa, extraño salir de compras, mis amigas, mi hermoso auto, pero sobre todo extraño a Ruya la sirvienta que tenemos en casa, aquí me toca hacer las cosas a mi, este es el peor castigo que mis padres pudieran darme

- Larissa!! - grita mi tía Susan desde la cocina

- Si tía? - pregunto aguantando las ganas de salir corriendo de esta casucha en la que vive

- Pero ven rápido niña apúrate

- Aquí estoy que sucede? - me tenso al ver que tiene un balde en sus manos y ya se que me va a decir

- Vamos niña, hoy te enseñaré a ordeñar una vaca - me paralice al escucharla decir eso creí que ya era suficiente con tener que acompañarla todas las mañanas y ver cómo le sacaba la leche a esos animales y ahora pretende que yo lo haga?

- Tía por favor no me pidas eso porque no lo haré, es asqueroso - dije haciendo una mueca de asco

- Aquí no estás en la ciudad, sino en mi pueblo en mi casa por lo tanto debes de hacer lo que yo te ordenó, a menos que quieras que llame y me quejé con tus padres - no si digo yo que es una bruja.

- Bien vamos - respondí de mala manera, no me queda de otra que hacer tripa y corazón y ordeñar la vaca solo espero que no me vaya a morder

No estoy en condiciones de hacer enojar a mi querida día - Nótese el sarcasmo - sino llamará a mis padres y me alargarán la estadía en este horrible lugar

- Bien siéntate en el banquito y ya sabes debes de apretar el pezón de la vaca pero con cuidado - me senté y con todo el asco del mundo comencé a ordeñar pero de repente el chorro apunto a mi cara por lo que me levanté de inmediato a punto de vomitar del asco que me dió

- Ay tía esto es asqueroso no quiero hacerlo

- Tendrás que hacerlo o no nos iremos de aquí

Tres horas después volvimos a la pequeña cabaña mi tía feliz y yo más molesta que nunca estaba toda sucia, tenía el pelo pegajoso debido a los chorro de leche que me habían saltado por todo el cuerpo, mi campera blanca literalmente ya no serviría más por lo que tendría que tirarla y ni hablar de mis botas nuevas que estaban totales cubiertas de la suciedad de las vacas, pegue un grito ensordecedor cuando una mosca gigante y verde no paraba de revolotear en mi cabeza

Fui a la habitación y me di una larga ducha, pensé que tendría un momento para mí, pero mi tía parece odiarme con toda su alma

- Larissa querida ve a limpiar el establo

Que acaba de decir? Ahora sí que se volvió loca, eso sí que no puedo hacerlo

- No tía, no lo haré no puedes obligarme yo no nací para limpiar, soy la hija de un uno de los hombres más ricos de Rusia

- Eso era antes de que tú padre se fuera a la quiebra, niña no seas altanera y ve a limpiar el establo no te lo repito

- Ya dije que no - dije cruzándome de brazos

Ella tomo el único teléfono que hay en la casa y comenzó a marcar el número de mi padre

- Bien lo haré - tomé el balde y la escoba y caminé a paso de tortuga hasta el establo el cuál su olor realmente era nauseabundo

Me quedé parada en medio del establo sin saber que hacer, mis lágrimas comenzaron a caer, me sentía tan mal, me puse los guantes y comencé a juntar el estiércol, era tan repugnante hacer esto, luego tuve que rastrillar, cambiarles el agua a los animales y entonces me di cuenta que esto era trabajo para Calina, no para mí, no entiendo cómo le pueden gustar los animales si son tan sucios

Terminé tres horas después, el en proceso de limpieza tuve que detenerme varias veces a vomitar, esto era un infierno, un verdadero infierno, juro que estos momentos sería capaz de hasta pedirle perdón de rodillas a mi hermana, con tal que mi padre me deje volver a casa

Estaba cansada, nuevamente me iba a tener que duchar, ya que había quedado totalmente embarrada, mi cabello era un desastre, realmente estaba echa un asco, entre a la casa y casi me desmayo de la vergüenza cuando al entrar me choque con un hombre preciosísimo que me miró de arriba abajo como si fuera un extraterrestre y no era para menos si realmente me veía y olía fatal

- Oh querida que has hecho para ensuciarte de esa forma? - pregunto mi tía la cuál s veces creo que me odia

Agache la cabeza de la vergüenza y subí rápido las escaleras entrando directo al baño, fregue mi piel con fuerza con la esponja para sacarme el olor, salí de la ducha me coloque un jogging negro y un buzo blanco no se porque uso ropa blanca si desde que llegué aquí la ropa no me dura limpia ni medio día, baje las escaleras, veremos qué tarea me encontró ahora mi tía Susan

- Ya se fue tu invitado? - pregunte sentandome en la cocina con ella

- Oh sí Mark solo vino a encargarme unos postes de miel

- Ah ya veo, necesitas que te ayude en algo? - pregunte y ella me miró rarísimo y fue en ese momento que me di cuenta de que me había ofrecido yo sola ayudarla en los quehaceres domésticos que me está pasando? ¿Será que tanto trabajo me dio fiebre?

- No querida ya has trabajado suficiente por hoy

Cenamos y luego me fui a la cama a leer un libro, mañana mi tía me dijo que debo de acompañarla a la pequeña plazita del pueblo en dónde una vez a la semana vende sus quesos, dulces y pote de miel que ella misma hace, con esa idea me fui quedando profundamente dormida, hoy si que había Sido un día agotador.