Para Alana el día de su matrimonio iba a ser el día más feliz de su vida, allí con su vestido de novio se fue a encontrar con su prometido antes de la ceremonia, pero lo que no espera era encontrarlo con su hermana, algo que hirió profundamente su corazón.
Ella huyó de su boda y se fue a un bar, donde conoció a Ricardo, quien escucho atentamente la desgracia por la que ella había pasado. Él le propone una manera curiosa de vengarse de su exprometido, Ricardo también necesita una esposa, para eso él le pide que se casen, así que Alana acepta.
¿Podrá ambos llevarse bien en un matrimonio que fue concertado por intereses propios?
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capítulo 4
Benjamín los observa sin decir una palabra, después Alana sube a su habitación donde arma una valija con ropa y pertenencias personales.
Una vez todo en orden sube al auto junto a Ricardo y van a su penthouse.
Al llegar al lujoso edificio Ricardo, llama al jefe de seguridad.
Ricardo: señor Guzmán, le presento a mi esposa
Señor Guzmán: es un honor conocerla señora Montes de Oca, soy el jefe de seguridad.
Alana: un placer Alana
La pareja sube al último piso donde queda el penthouse de Ricardo, al entrar es lindo, lujoso, pero muy masculino.
Ricardo lleva la valija de Alana: te mostraré el lugar, esta es nuestra habitación.
Alana entra: es linda
Ricardo: puedes cambiar lo que quieras
Alana: no quiero hacer algo que te moleste, lo veremos más adelante.
Alana acomoda sus pertenencias en el vestidor, mientras Ricardo pide la cena.
Ricardo nota la demora de la chica así que va hasta la habitación, siente el ruido de la ducha, una sonrisa traviesa se cruza por su cabeza, pero esos pensamientos se desvanecen con el sonido del timbre.
Recibe la cena había pedido comida china, llega Alana con un cómodo conjunto, un pantalón corto y una remera, ella cuando se viste su ropa de dormir tiene la costumbre de no usar sostén.
Ricardo la mira: pedí comida china
Alana: me gusta o una pregunta la contraseña de la puerta
Ricardo: oh perdón, es xx xx
Ambos cenan mientras hablan sobre sus gustos, una vez terminan Alana limpia todo, revisa la nevera y en su mente tengo que hacer compras.
Ricardo se está bañando y como es su costumbre va a la habitación solo envuelto en una toalla, Alana lo mira, el cuerpo que tiene su esposo es de infarto, inconsciente se muerde el labio, acción que no pasa desapercibida para Ricardo.
Ricardo : te gusta
El se pensó que ella tendría vergüenza, pero todo lo contrario se acerca a él y cuando está a centímetros, se pone de puntas de pie besando sus labios y le saca la toalla dejándolo completamente desnudo, ella empieza besando su tonificado cuerpo, mientras baja una vez que llega donde quiere lo mira a los ojos.
Alana: jamás hice esto, espero me ayudes
Los ojos de Ricardo son de completa lujuria mientras ve como Alana introduce su miembro a su boca y juega, en volviéndolo en un completo frenesí de éxtasis.
Una vez que se corre en su boca la toma en sus brazos, besando sus labios mientras la deposita en la cama le quita sus prendas, esta completamente excitado la penetra de una sola estocada la habitación se llena de sus gemidos que no cesan hasta entrada la madrugada donde ambos caen rendidos.
Ricardo: eres traviesa
Alana: tú me pones así
Ricardo sonríe su esposa lo sorprende todo el tiempo y como se está volviendo costumbre, ambos se abrazan para dormir.
Amanece, Ricardo despierta con el delicioso aroma a café mira a su costado y está solo va al baño se ducha y se viste con un traje a medida color negro, se sorprende al ver a Alana tenía puesto un vestido negro encima de la rodilla, con un blaizer rosa manga tres cuartos y tacón haciendo juego, un leve maquillaje y su cabello suelto.
Ricardo: estás hermosa
Alana: buenos días, gracias tu también estas guapo
Ricardo: se puede saber que harás?
Alana: ir a trabajar
Ricardo pensó que trabaja en la empresa de su familia, Alana se acerca y le da un beso.
Alana: Ricardo tienes algún tipo de alimento que no te guste?
Ricardo:no, como de todo
Alana: genial
Ricardo: porque la pregunta?
Alana señala la alacena: iré de compras, me gusta cocinar.
Ambos bajan en el estacionamiento el chófer entrega las llaves del auto de Alana, cuando va a subir Ricardo la llama.
Ricardo: Alana ten
Alana: y eso?
Ricardo: una tarjeta, dijiste que iras de compras
Alana sonríe: puedo pagar mis gastos
Así sin más parte en su auto dejándolo muy desconcertado es la primera vez que le rechazan una tarjeta, su chófer lo mira y solo ríe.
Al llegar a la empresa su secretaria, Hana Sims lo está esperando: señor tiene hoy la cita con la empresa. A . N Y D
En la empresa A . N Y D, entra Alana donde se encuentra con su amiga y socia Nelly y su amigo y socio David Montreal.
David: amiga como te sientes linda
Alana: de maravilla
Nelly: esa sonrisa, cuenta
Alana les cuenta con quien se había casado sus amigos la miran con sorpresa, les pide que sean discretos.
David: hermosa. Serás la envidia de todas, ese hombre es un bombom
Alana: lo sé y ni te cuento lo apasionado
Nelly: donde está Alana
David: bueno hermosas vamos se nos hace tarde.
Los tres parten a la cita de trabajo es una empresa en expansión y solicitan una línea de perfume exclusivo.
Ricardo tenía una empresa que se dedica a cosmética y quiere incluir perfumes, pero no les ha ido bien, se enteró del gran éxito de la nueva empresa A. N Y D en ese rubro y en el diseño de modas, así que los cito para una colaboración.
Los tres amigos y socios van a la sala de juntas donde esperan al representante de la empresa lins , entra un hombre joven que mira a Alana y le sonríe, a los minutos una figura conocida entra a su lado una mujer con ropa muy justa y escotada.
Ricardo mira a Alana en medio de las otras dos personas: me presento soy Ricardo Montes de Oca presidente de lins.
Alana: Alana Santos presidenta de A.N Y D, ellos son mis socios, Nelly Cortés y David Johnson. Ustedes dirán.
Horacio: señorita soy Horacio Ferré vicepresidente de lins y seré con quien van a tratar.
Alana lo mira fría sin expresión: bien, nos explican.
Horacio expone como sería la colaboración entre ambas empresas, el tema las ganancias son pocas para A.N Y D…
Alana: nosotros nos encargamos de todo el trabajo y las ganancias son mínimas?
Hana quiere sobresalir así que decide hablar: señorita Santos les estamos haciendo un favor.
Alana con un semblante aun más frío: favor, usted quien es?
Hana: la secretaria del señor Montes de Oca
Alana: ahora entiendo, esa es su propuesta no vamos aceptar, las ganancias son mínimas y no nos trae ningún beneficio extra, somos una nueva empresa, pero nuestros perfumes son exclusivos y tienen un gran éxito en el mercado actualmente.
seguramente la amante está al tanto de la herencia