La Villana Cambiará Su Destino.

Tras un par de investigaciones, Emma logró obtener información suficiente sobre George, tal como imaginaba, sus propuestas de negocios nunca salían bien, hacía que sus socios inviertan y el negocio propuesto se iba a la quiebra porque George no sabe como administrarlos, pues él y su esposa suelen gastar más dinero de lo que realmente les correspondía del negocio, por eso, en el reino donde ellos viven, ya nadie se atreve a invertir en sus propuestas y aunque algunas son buenas y rentables, el mal manejo de esto, lo llevaba a la ruina.

Como George cometió el error de presumir con quienes planeaba hacer negocios, Emma se encargó de reunirse con las esposas de estas y fingía estar afligida, pues se preocupaba ahora que su cuñado estaba en la mansión y en que insistía en pedirle dinero a Gilbert, porque en el reino donde esta establecido, ha comedido demasiados fraudes y ahora se ha venido a refugiar al ducado.

— propone negocios exitosos, pero después se queda con todo el dinero y sus socios pierden todo. Escuche que intento hacer negocios con el Marqués Frizz, por suerte se negó, porque las pieles no son buena inversión en este temporada.— menciona preocupada.

Las mujeres estaban preocupadas por Emma, todo lo que decía parecía un gran problema. Emma también habla que le preocupa que quiera deshacerse de ellos para tomar el ducado, pues si hace eso, lo enviará a la ruina y quienes viven en él serán quienes sufran las consecuencias. Una de ellas dice que George Astley visito a su esposo el día anterior y su esposo hablaba de un negocio exitoso.

— debe prevenirlo, si tiene dudas debe hablar con mi esposo. Aunque lord George sea su hermano, mi esposo no confía en él y no acepta las estafas que ha hecho.— menciona Emma.

Y así, ha sembrado la duda en todas esas mujeres, quienes no dudarán en ir con sus esposo ha platicar lo que han escuchado y por supuesto, Gilbert la ayudará corroborando lo que ella ha dicho a los esposos de esas mujeres.

Mientras tanto, George estaba seguro de que los nobles con los que hablo, estarán invirtiendo en él muy pronto, así que ha decidido pasar a un bar a beber y celebrar por su éxito, pero al bajar de carruaje, ve a Emma entrando a una boutique, pero solo se acerca para ver, notando que Emma habla con las mujeres que han entrado y otras van de salida.

"Sin duda los diseños de la duquesa son los mejores, ha valido la pena venir desde la capital."

"Se lo dije madre, la duquesa tiene diseños muy novedosos y de la mejor calidad."

Las mujeres suben a su carruaje mientras que las doncellas de estas van cargando varias cajas las cuales suben a otro carruaje. George solo se aleja de ese lugar molesto.

— en pocos días esa tienda se irá a la quiebra y nadie la recordará.— se dice así mismo.

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Emma estaba en la habitación de Gilbert, contando como le hizo saber a las esposas de los supuestos socios de George, sobre la mala fama que ha acumulado el hombre, así que tan pronto estas le cuenten a sus esposos, seguramente vendrán a preguntarle a Gilbert si es verdad ese rumor.

— así que debes de decir que si, que tu hermano solo es un estafador, aunque claramente eso no es mentira.— Emma se sienta en la orilla de la cama para quitarse los zapatos.

Después se pone de pie para sacar del closet un camisón, ante esto, Gilbert se sorprende, esas ropas no estaban ahí en la mañana que él se cambio.

— E-Emma...¿que haces?, ¿por qué esa ropa...—

— yo las traje, estamos juntos, así que no tiene caso que yo duerma en otra habitación, ¿no?—

Emma se quita el vestido y se coloca el camisón para después ir a la cama, antes la mirada confundida de Gilbert.

— ¿que pasa?, ¿ya vistes todo y aún así te avergüenzas?— le da golpecitos con el codo al costado de Gilbert, quien ya estaba en la cama.

— ¿que?, no, no es eso...pero, no es común algo así, las parejas no suelen compartir habitación excepto por esa ocasión, ya sabes.— explica Gilbert.

— ¡bah!, eso no importa, además no se debe poner una fecha para tener sexo, solo se hace cuando se tiene ganas y ya. Por ejemplo, podríamos estar en tu oficina, te dan ganas y si yo estoy dispuesta, a darle duro contra sobre el escritorio.—

Gilbert escucha a Emma sintiéndose un poco apenado, mientras que Emma no parecía tener pena alguna con sus palabras tan directas. Al final solo deja escapar un suspiro.

— no se de donde sacas esas ideas tan descabelladas, pero, esta bien, me gusta la idea de despertar a tu lado.— Gilbert sostiene la mano de Emma dejando un beso en el dorso de esta.

Emma sintió un cosquilleo en el estómago ante esa gesto, ¿Será que es de nuevo ese día del mes?, no, eso se fue hace poco, quizás solo fue un espasmo porque le cayó pesada la cena. Que los dioses lo libren de que ese día del mes llegue, de nuevo, la primera vez, fue horrible.

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Los siguientes días George estaba furioso, todos los prospectos a socios de negocios, le habían rechazado, alegando que no estaban interesados o que ese negocio ya lo habían hecho con otro socio. Tan pronto pudo, fue a reclamarle a Gilbert, asegurando que fue Emma quien ha estado bloqueando sus posibilidades de conseguir apoyo.

— hermano, ¿como podría Emma hacer eso?, tú mismo has dicho que una mujer no tiene vocación para eso.— y así, voltea sus propias palabras contra él.

— ella es la princesa, debe de estar usando sus influencias para frenar mis posibilidades. ¿Sabes por qué?— le grita.

— no lo sé, pero ella no tiene influencias en este reino, solo la estás haciendo tu enemiga porque ella no agacha la cabeza ante ti.— le reclama Gilbert.

— como sea, pero lo sabrás, tu esposa vino a ofrecerse a mí, quería que meterse a mi cama y como no acepte, ahora quiere vengarse.— asegura.

Gilbert deja salir un risa ante las palabras de su hermano, quien solo se muestra más furioso, aunque antes de poder reclamar, Gilbert salta del escritorio y sostiene a George del cuello de ropa, estampando la espalda de este contra la pared.

— cuida tu boca hermano, puedo permitir que digas algo malo de mi, pero de Emma, ahí si te cortaría la lengua.— Gilbert tenía una expresión de malicia.

Esa expresión, le hizo sentir escalofríos a George, nisiquiera con su padre había sentido tanto miedo.

— ¿d-defiendes a esa mujerzuela en lugar de creerle a tu hermano?— reclama.

— Emma es incapaz de meterse con otro, menos con alguien que le da asco, ¿crees que no lo sé hermano?, se lo que has intentado con ella y por eso, pagarás muy caro.— Gilbert lo lanza contra el suelo tras darle un puñetazo en la cara.

George queda sorprendido por las palabras de Gilbert y siente como la sangre brota de su nariz debido al golpe, al levantar la vista, ve como la puerta de abre y era Emma quien entraba sentándose en la orilla del escritorio.

— que lamentable, pero en algo tenías razón, si he sido yo quien ha bloqueado todas tus posibilidades de negocios, bueno, solo he salvado a esos inocentes de caer en tus estafas.— se encoge de hombros.

Gilbert le tira a George los papeles donde se muestra a detalle la investigación de sus fraudes.

— con un poco de dinero y las personas correctas, se puede saber todo, hermano.—

George estaba furioso y su mirada de odio se dirigía a Emma, ella era sin duda la causante de todo, incluso de poner a su hermano Gilbert en su contra.

— no puedo creer que te pongas de lado de esa perra, soy hermano, tu sangre, y la prefieres a ella.— grita furioso.

— un hermano que quiso estafarme y lo peor, que intento abusar de mi esposa, ¿eso es algo que los hermanos hacen?, no lo creo.—

George ya no sabía que más decir, pero se sale de la oficina, donde Ralph lo esperaba con un par de maletas.

— su excelencia ha dicho que usted de marcha del ducado.— menciona con calma el mayordomo.

George solo toma sus malestas y se apresura a salir de la mansión, pero, no piensa dejar las cosas así, Emma, será quien pague por arruinarle sus planes.

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