Ese Duque Es Mio

Mi nombre es John Riss, soy un plebeyo de nacimiento.

Tenía 11 años cuando mis padres me vendieron a unos comerciantes como esclavo, por 2 monedas de plata, pueden creerlo?

¿Tampoco valía yo para ellos?

Un año estuvimos caminando de un lado para otro, en el trayecto conocí a David que como yo había sido vendido por sus padres, al igual que muchos otros chicos, algunos si fueron robados de sus aldeas.

Ahí me hice de una muy buena amistad con David.

Comíamos una vez al día, apenas, nos golpeábamos por si emitíamos algún sonido durante la venta.

Un año

Un año estuve sufriendo asta que...

- No te preocupes, hemos venido a rescatarlos, mi nombre es Alessia.

Un ángel de hermosa cabellera rubia y ojos de zafiro nos sacó de ese sufrimiento.

Ella era la princesa Alessia

- Tienes familia a la cual volver, si es así te ayudaremos a llegar con ellos.

Pregunto un chico que al igual que la princesa, eran la viva belleza representada, ambos eran idénticos, con un aura de nobles, humildes, y hermosos.

Él era el príncipe Maximiliano

John: no, no quiero regresar con mi familia

Max: quieres quedarte? Los más pequeños irán a un orfanato, pero tú quieres pertenecer al séquito de los príncipes Mondragón, jurarás lealtad a nosotros y solo a nosotros?

John: les debo lealtad a mis salvadores, daría mi vida por ellos o por su familia

Max: no queremos tu vida únicamente tu lealtad.

Desde ese día me convertí en un miembro de su séquito. Al igual que ami, nos enseñaron modales, nos enseñaron defensa con espada, política, algunos querían ser parte de los caballeros de la princesa o del príncipe y ellos los aceptaron, nos dieron techo, comida y ropa, un año después estaba listo.

Max: David tú estás capacitado para ser la mano derecha de mi padre su majestad el emperador Emiliano, elige a los chicos de confianza porque a partir de hoy, aras limpieza en el castillo.

Alessia: debo de recordar, que su lealtad es asía nosotros, o mi padre, no a mi madre

Max: menos a la mía.

Fui uno de los elegidos por David, así pase trabajando como jefe de mayordomos en el palacio, estaba realmente feliz y solamente pensaba que podía ser mejor?

David: el emperador, quiere personal para su cabaña, pero requiere gente discreta, recuerda lo que dijeron los príncipes, su padre es a la única persona que más aman, si nosotros fallamos no dudaran en blandir su espada en nuestro cuello.

John: atenderé al emperador en persona?

Pregunte sorprendido

El río con burla

David: no, no únicamente entenderás a un emperador, a tenderas a dos emperadores en persona, el emperador Emiliano y el emperador Uriel, debes de saber que ellos son amantes, por tal motivo quiero que todo el personal que vaya sea enteramente de confianza.

Estaba un poco aturdido por la información recibida, pero después me emocioné

Yo seria parte del secreto de dos amantes enamorados

Siii

Emperador Emiliano: John, te irás con el emperador Uriel, serás su asistente, mano derecha, mayordomo, confidente

John: seré David?

Emiliano: exacto ya nos entendemos

Por un lado, estaba triste me despediría de mi amigo, casi hermano, pero, por otro lado, estaba realmente feliz con ello, ya que eso quería decir que era digno de un puesto mayor

Emiliano: lo atenderás a él y le serás leal como lo eres conmigo, quiero que lo cuides bien, oíste, lleva a algunos de tu entera confianza, para que al igual que David te aras responsables de todo el castillo.

Y bajo las órdenes de mi emperador inicié una nueva vida en Diamantino, con una edad de 14 años, me convertí en la mano derecha del emperador Uriel.

Al llegar al palacio me fui ganando la confianza de todos y así poco a poco me fui dando cuenta quien era leal a su emperador, y quien no, así que bajo las órdenes de emperador Uriel, fui limpiando el palacio de los espías de la emperatriz y las concubinas, así como también, me gane el permiso de entrar a las reuniones de la corte, con ello muchos nobles empezaron a acercarse a mí con muchos fines, con eso les hacía creer que colaboraría con ellos y luego iba a hablar con el emperador, Zet era un caballero que había venido conmigo del país de Golden era muy bueno rastreando información y con su ayuda buscábamos pruebas para limpiar la corte de corruptos y malhechores

Un año después ocurrió lo impensable, los emperadores rompieron su promesa de amor y me toco ver sufrir y llorar de dolor al emperador, David y yo nos mandábamos cartas, siempre, él me contaba lo que el emperador Emiliano sufría por culpa del mío y yo le contaba lo que el emperador Uriel sufría por culpa del suyo.

En fin, la orden que se me fue dada por mis benefactores y salvadores es siempre ser leales a ellos y a su padre, y su padre me había encomendado la seguridad y bienestar del emperador Uriel y eso es lo que haría, de todas maneras cuidar de él para mí ya no era un trabajo, mi cariño empezó a crecer por él, lo veía como un padre para mí, me apoyaba y yo a él, y jure protegerlo con mi vida a él y a su familia.

Ya con 15 años me hice cargo de todo el palacio, nadie movía un solo dedo sin que yo lo autorizara, la emperatriz seguido desafiaba mis órdenes y aquel que intentaba pasar por altos estás solo por tener el respaldo de la emperatriz era despedido.

No, no era por creerme más que los demás, únicamente era cuestión de orden, no podía bajar la guardia y que algo pusiera en riesgo la vida y seguridad de alguno de los príncipes o de su majestad.

Como lea decía con su corazón roto el emperador debía mantenerse firme, a demás de que la hermosa princesa Tea estaba embarazada, si, la princesa siempre me pareció hermosa, ella era muy inteligente humilde y siempre veía la bondad entre as personas, cuando El príncipe Maximiano llegó a este palacio, podía sentir un ambiente algo asido.

Podía darme cuenta claramente de las miradas que el príncipe Leonardo le daba a su cuñado y a pesar de este también mirarlo en algunas ocasiones siempre se mantenía firme cuidando de su esposa, siendo leal a ella, tal y como a él le gustaba ser respetado y honrado