ATRAPADA POR EL CEO QUE CAYÓ DEL CIELO
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Una noche de tormenta, la cabaña solitaria de Aiyana Tsosie en las montañas de Arizona, territorio ancestral Navajo, se convierte en el lugar de un accidente inimaginable. Un jet privado explota en el aire, cayendo un hombre herido y amnésico en un paracaídas dañando su cabaña. Lo que Aiyana no sabe es que ha rescatado a Cristopher Livingston, un CEO multimillonario que intentaron asesinar.
Aiyana, una mujer Diné en armonía con el bosque, se ve obligada a sanar al poderoso hombre de la ciudad. En la paz del aislamiento, el contraste de sus mundos desata una pasión ineludible. Pero cuando Cristopher recupera su memoria ve su vida de imperio y lujo en peligro, huye sin mirar atrás, dejando a Aiyana con un secreto que solo pertenece al linaje de su pueblo.
Tres años después, la aparición inesperada de Cristopher creara en Aiyana miedo a que le quiten su mas grande tesoro
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Capítulo 5: CELINE Y PETER JOHNSON
Ambos sin poder dormir y con la cabaña solo alumbrada por la luna Cristopher se paró al baño y ya de regreso se topó con un mueble y tropezó torpemente, Aiyana salió rápido y encendió la luz de la lamparita encontrandolo en el suelo.
Aiyana: "¿No te lastimaste?, ven te ayudo a pararte".
Cristopher: "No me fije en el mueble veía la luna por la ventana, pero ¿por que lloras princesa?".
Aiyana: "No puedo dormir y tú no puedes estar parado más tiempo, vamos te ayudo a llegar a la cama, dime la verdad, ¿te lastimaste?".
Cristopher: "Me golpeé el dedo pequeño del pie y duele un poco eso es todo, ven aquí conmigo, y cuéntame que te hace llorar".
Aiyana: "Tengo miedo, no soy de fierro, me da miedo Hania y hasta donde puede llegar con su insistencia, él les hizo creer a sus padres y mis abuelos que estábamos enamorados, que yo lo quería. Cuando me negué no me creyeron, le creyeron a él, dijeron que seguro quería hacer lo mismo que mi madre, deshonrar a los ancestros de la Familia Tsosie".
Cristopher: "Que se supone que hizo tu madre".
Aiyana: "Leí el diario de mamá, donde duermo fue su habitación allí lo encontré, su pecado fue creer en el amor supongo, cuando hicieron las obras del desagüe y agua vinieron unos gringos por aquí a trabajar y llegó el dueño de esa empresa contratista, el señor Johnson un joven según narra mi madre, rubio de ojos color verde esmeralda, y él la cortejaba, quiso llevársela con él, pero aquí mis abuelos se opusieron y ella ya había perdido su pureza con él, el se fue y nunca más volvió sin enterarse que ella estaba embarazada, mi abuela contaba que ella no comía nada de la pena, que solo lloraba y que no se levantaba de la cama, que de milagro nací, la obligaron a vivir por casi dos años después que nací, al parecer mi existencia no llenaba el vacío del amor del señor Johnson, murió y me criaron mis abuelos, eran amorosos, pero siempre recordaban que su hija murió por meterse con un gringo que no la supo respetar".
Cristopher: "Y tú que crees de lo que has leído en el diario y lo que te contaron que le reclamarías a tu madre".
Aiyana: "Un hijo no debe juzgar a los padres, pero creo que debió luchar por vivir no por ella, por el fruto de ese amor que soy yo, sé que en el pueblo serían crueles con ella y han sido crueles conmigo porque soy la hija del gringo, la hija de la que no se dejó respetar, bola de hipócritas aquí suelen casarse en la ceremonia sagrada con las vestimentas anchas para tapar la barriga del embarazo, el gringo ese fue el cobarde que no lucho lo suficiente por ella".
Cristopher: "Y sabes el nombre de tu padre".
Aiyana: "Peter Johnson, jamás lo busqué, pero si vi su fotografía en una revista como el empresario del año, posaba con su esposa y su hija ambas rubias de blancos rostros".
Cristopher: "Sabes, yo tampoco podía dormir, me preocupan tu seguridad y la mía, que será de mí cuando recupere la memoria, sin acordarme de mi hermano ya le guardo un gran odió, el hombre que recuerdo se le veía un hombre bueno no merecía morir, ahora Hania buscándome, no se si este bien admitirlo, pero también tengo miedo".
Aiyana: "Juntos nos cuidaremos de ellos, tu hermano es pedante, engreído, mandón y se cree que todas están muertas por él, derrepente sí es verdad, pero yo soy la excepción a la regla, o es porque yo sí vi su personalidad real, sus robos sus interminables llamadas por las mañanas a esa tal Celine y como planeaban el cómo eliminarte, no tenía ni miedo de hablar delante mío, a ella le decía que te eche veneno para quedarse juntos con todo, en fin oí más de lo que quisiera y no quisiera que él me encuentre tampoco porque puede matarme, o terminar lo que empezó, aunque creo que después de cómo lo deje a todos les quedo claro que la guerrera Diné soy yo".
Cristopher: "Ven acomódate aquí a mi costado, yo no soy Harol lo juro, cuéntame como lo dejaste".
Aiyana: "Al ver que la policía no me pensaba hacer caso alguno me presente al día siguiente así sin maquillaje a su oficina, pero con Jeans y un top con tacones altos, dispuesta a todo, él tenía un brazo fracturado el labio partido, un ojo morado y mis uñas marcaron su rostro, Hania me quiso agarrar a la fuerza diciendo que se podían divertir los dos conmigo y allí le corté la barbilla con mis uñas, en ese tiempo usaba hasta uñas acrílicas, ¿me imaginas?. Bueno la cosa es que ordenó que me paguen la indemnización por mi tiempo de servicio y me retire después que él salió huyendo con los hombres de su seguridad".
Cristopher reía de saber que una mujer lastimo a Harold, y aquella noche de insomnio para ambos se transformó en una noche de conocerse más el uno al otro, Aiyana sabía que no sabía nada de su pasado, pero sí conocía su verdadera personalidad.
Aiyana al sentirse junto a Cristopher se sentía protegida, él no tenía la mirada de su hermano Harold, siguieron hablando de cosas de la granja hasta que el sueño venció a ambos.
Los rayos de luz de la mañana se asomaron y Aiyana despertaba, se sintió extraña al sentir una mano en la cintura y ella vio que tenía una mano en el pecho de Cristopher, despertó bien y despacio se trataba de safar del agarre de Cristopher y al levantarse Cristopher despertó.
Cristopher: "Aiyana, princesa buenos días, nos quedamos dormidos, fue bonito poder conversar contigo, cuentas las vivencia de la granja y del bosque con mucho entusiasmo y pasión".
Aiyana: "Perdón por quedarme dormida aquí".
Cristopher: "No paso nada malo, tranquila solo nos conocimos mejor, Sabes no quiero olvidar el nombre de esa mujer su cómplice".
Aiyana: "Es Celine ella en los tres meses que trabaje para el vino a verlo dos veces, le cayó literalmente de sorpresa y él me hizo alojarla en el Hotel Palace Blue, ella le hizo el mega berrinche, pero él le dijo que el iría a quedarse con ella que sería mucho escándalo si se enteraban de su relación que eso solo debía salir como una relación que nacería después de tu muerte, pero en realidad Harold tenía a una modelo en su departamento".
Cristopher trataba de no olvidar el nombre de aquella mujer misteriosa que lo quería muerto.