Mi Esposo No Es Para Mí

"¿Su madre?" Arga se sorprendió.

Porque, que Arga supiera, Dika era el hermano de Ara. Eso significaba que la mujer frente a él era la madre de Ara.

"Sí, su madre, ¡Neng Risa es la madre de Ara!"

Duar.....

"¿De dónde sacaste este muñeco?"

"De mamá. ¡Mamá dijo que este es el primer regalo de papá para Ara antes de que papá se fuera a trabajar muuuuy lejos!"

"¿Tu papá trabaja?"

"Sí, el papá de Ara trabaja muuuuy lejos, ¡tanto que Ara nunca ha conocido a papá!"

"¿Cuál es tu nombre otra vez? ¿Ara?"

"Sí, tío, mi nombre es Ara. ¡Mutiara!"

Ese muñeco de conejo, un nombre tan hermoso como el que Arga quería, y una cara tan familiar, ahora atacaban el cerebro de Arga, que tardó en darse cuenta de todo.

"¿¡Resulta que Ara es mi propia hija!?" Murmuró Arga con lágrimas llenando sus ojos.

"¡Sen! ¡Resulta que todo este tiempo tengo una hija, Sen! ¡Resulta que Risa ha estado ocultando a mi hija durante seis años, Sen!" Arga agarró el cuello de la camisa de Seno como una expresión de sus sentimientos confusos en ese momento.

Arga recién supo que todo este tiempo tenía una hija de Risa. No hay duda de que Ara es su hija.

Risa le dio a esa niña el nombre que Arga siempre había querido. Risa también le dio ese muñeco de conejo como un regalo suyo para Ara. Eso significa que Ara es realmente su hija que Risa escondió a propósito.

"Lo siento, señor, no fui lo suficientemente cuidadoso, no sabía que la señora Risa tenía una hija" Seno realmente obtuvo esa dirección de alguien que había pedido comida a Risa.

Esa persona reconoció inmediatamente a Risa tan pronto como Seno mostró el rostro de Risa en su teléfono.

"Resulta que abandoné a Risa cuando estaba embarazada de mi hija, Sen. ¡Qué bastardo soy, Sen!" Arga siguió maldiciéndose a sí mismo.

"Cálmese primero, señor, ¡deberíamos buscar a la señora Risa primero!"

"¡Tienes razón! ¿Dónde está el hospital, señora? ¿A dónde llevó Risa a Ara para recibir tratamiento?" Preguntó Arga con pánico después de darse cuenta de que Ara estaba enferma y la habían llevado al hospital.

"¡En el hospital Catra, señor!" Respondió Wak Umi en voz baja porque todavía estaba sorprendida por lo que acababa de escuchar.

"¡Vamos allá ahora, Sen!" Arga inmediatamente corrió lejos de allí para volver a su coche.

"¡Con permiso, señora!" Seno, que quería perseguir a su jefe, se despidió primero de Wak Umi.

"Sí, adelante"

Wak Umi luego miró la partida de los dos hombres que de repente vinieron buscando a Risa.

"¿Así que ese es el papá de Ara? No es de extrañar que Ara sea hermosa, su papá es guapo a más no poder" Wak Umi todavía miraba a Arga que ya se había alejado.

"¡Pero ser guapo no es suficiente si abandonas a tu hijo!" Continuó Wak Umi con cinismo.

Arga corrió a toda prisa hacia la habitación que había conocido por la recepcionista.

Resultó que la habitación de Ara no estaba lejos de la de Keysha. La diferencia es que Keysha estaba en una habitación VVIP, mientras que Ara estaba en una habitación de segunda clase.

Sreekkk....

Risa y Fatir, que estaban esperando que Ara se despertara, se sorprendieron por alguien que de repente abrió las cortinas de la habitación.

Deg...

Risa no podía creer lo que estaba viendo frente a ella en ese momento. Un hombre que había evitado tanto todo este tiempo. El hombre con el que se había cruzado en la sala de emergencias hace un rato.

Verlo parado allí mirándola a ella y a Ara, hizo que el corazón de Risa latiera con fuerza. El miedo la invadió de inmediato.

Risa realmente extrañaba a Arga, pero después de enfrentarlo así, Risa se sintió tan asustada.

"Finalmente llegaste, Ga. Esta es Ara, la paciente de la que te hablé. Ella necesita ayuda..."

"¡¿Qué significa esto, Risa?!" Gritó Arga, ahora mirando fijamente a Risa.

Arga también se sorprendió aún más al saber que Ara era la niña de la que Fatir hablaba a menudo. Ella es una niña pequeña con una enfermedad mortal como Andita.

Mientras que Fatir parecía sorprendido porque resultó que Arga conocía a Risa.

"¿Ara es mi hija, verdad Sa? ¡¿La has estado ocultando de mí durante seis años Sa?!" Arga acosó a Risa, que todavía estaba en silencio, e incluso ahora no podía mirar a Arga. Risa tampoco sabía cómo Arga podía saber sobre Ara.

"¡Responde, Risa!" Arga, molesto, comenzó a enfurecerse.

"Espera, ¿qué significa esto? ¿Por qué dices que Ara es tu hija Ga?!" Fatir todavía estaba confundido.

"Te explicaré más tarde, ¡cuidaré de Ara por un momento!" Le pidió a Fatir, luego se volvió hacia Risa.

"¡Tenemos que hablar!" Arga tomó la mano de Risa así sin más. Llevándola fuera de la habitación de Ara.

Arga necesitaba una explicación de Risa y, por supuesto, no quería molestar a Ara, que estaba profundamente dormida.

Mientras tanto, Risa simplemente se rindió cuando Arga continuó agarrando su muñeca lejos de la habitación de Ara. Ella ya se había rendido en este momento, no podría negarlo ni evitarlo más de Arga. Tal vez también era su destino reunirse.

"¡Explica todo, Clarisa Putri!" Arga soltó la mano de Risa cuando llegaron al techo del hospital.

Arga llevó a Risa allí a propósito porque pensó que era el lugar más adecuado para que hablaran porque no había nadie allí arriba.

"¡No te quedes callada, Risa! ¡RESPONDE!" Arga gritó hasta hacer que Risa cerrara los ojos.

"Sí, ¡Ara es tu hija, Mas!"

Duar...

Aunque Arga ya lo sabía, todavía se sorprendió al escucharlo de la propia boca de Risa.

Arga se frotó la cara con rudeza. Se sentía loco al saber algo que le habían ocultado durante seis años.

Todo este tiempo, resultó que tenía una hija. Su propia carne y sangre de la que nunca había sabido desde el embarazo. Resultó que sus sueños todo este tiempo eran una guía para él. Arga también se dio cuenta de que la niña de sus sueños con el pelo largo era Ara.

Resultó que él era el papá de Ara que se fue a trabajar tan lejos que no pudo volver a ver a Ara.

"¿Por qué no me dijiste que estabas embarazada?"

"¡Lo supe un mes después de que nos divorciamos oficialmente!" Risa trató de mantener la calma aunque su corazón estaba rugiendo.

Ella nunca tuvo la intención de decírselo a Arga. Ella tampoco imaginó que Arga podría averiguarlo por sí mismo. Así que Risa no sabía qué hacer. Todo lo que podía hacer en este momento era mantener la calma para enfrentarse a Arga.

"Pero ¿por qué lo ocultaste de mí? Ara es mi propia sangre, Sa, ¡ella es mi hija!"

Risa miró a Arga con un millón de dolores en sus ojos.

"¿Entonces qué debo hacer cuando voy a tu casa pero te estás casando con otra mujer? ¿Debo destruir su felicidad con la noticia de mi embarazo?"

Deg...