La Simple Omega Rechazada.

Cada latigazo era insoportable, cada vez era peor al llegar al latigazo número cien, no sentía tanto dolor, era soportable, no estaba desmayada, estaba consciente, no sabía qué sucedía, será que se apiadaron de mí y empezaron a darme más suave me pregunté pero una voz en mi cabeza me sacó de la duda.

X: De ninguna manera querida, eso lo estoy haciendo yo tu loba, mucho gusto me llamo Kendra.

Gema: Tengo loba, o sea, no soy una loba defectuosa.

Kendra: Ey no nos ofendas, tú no sabes de lo que eres capaz, te explico, soy una loba demonio...

Ella me explico que era una loba poderosa demonio pero que por su gran maldad estaba atrapada hasta que alguien de corazón puro pudiera ser merecedora de portarla y yo al hacer tal acto heroico lo había ganado pero no solo eso resulta que soy mitad demonio y mitad Ángel y mi loba, es una, demonio por eso no huelo mucho a Omega ella me dijo que luego me seguía diciendo pero que me voy a llevar una gran sorpresa, también me dijo que hablara lo que tuviese que hablar rápido por qué ella me iba a sumergir en un profundo sueño para poder ayudarme a sanar.

Salgo del trance y escucho el último latigazo listo luna me dijo el del consejo. Mario se acerca para ayudarme pero el solo roce de la bata me molesta, él agarra mis manos y me dice que todo estará bien.

La Luna y el alfa se acercan y les digo que me voy que ya cumplí, ellos aceptan pero al voltearme un exquisito aroma a chocolate y menta inunda mi olfato Kendra me dice Mate pero es un idiota así que ignóralo, sigo caminando y su voz me detiene.

Alekséi: Gema hablemos por favor no te puedes ir te convertirás en una renegada sin manada.

Rey Alfa: No, no lo hará, vámonos Gema.

Alekséi trató de acercarse y le dije que no, que se alejara.

Alekséi: Tú me amas.

Gema: Y no lo niego, te amo con toda mis fuerzas pero haré todo lo posible para que ese sentimiento se desvanezca, eso te lo prometo y debes saber que jamás rompo mis promesas. 

Él me quiso agarrar y fue entonces cuando perdí la conciencia.

Me despierto desorientada y abro mis ojos lentamente y allí lo veo y no entiendo por qué se me acelera el corazón, no debería siento lo mismo que sentí la primera vez que lo vi, él se da cuenta de que desperté y se me acerca rápidamente en su rostro hay sincera preocupación se ve como cansado y ojeroso acaso no ha dormido pobrecito me da tanta ternura verlo.

Rey Alfa: Despertaste... cómo te sientes estás bien.

Gema: Si su majestad que pena que usted se haya molestado en cargar conmigo.

Rey Alfa: Ninguna pena para mí es un placer, ya ordeno que te traigan de comer, necesitas fuerzas.

Gema: muchas gracias, majestad, una pregunta cuántos días dormí.

Rey Alfa: una semana debemos hablar, come y luego vengo.

Lo primero que hice fue darme un baño y luego me.dispuse a desayunar, pues, me llevaron la comida a la cama, después de comer me iba a levantar para ir a buscar al rey pero este entro me sonrío y se sentó en el sofá frente a mi cama.

Rey Alfa: Gema como sabrás, cuando un lobo se va de una manada queda como renegado al menos que sea acogido por esta pero tu caso es especial, eres Omega.

Suspiró y se sentó esta vez en la cama a mi lado, luego continuo diciendo.

Rey Alfa: Si fueses de otro rango no habría problema pero tranquila hay una solución, no sé si te guste.

Gema: Seré una sirvienta, rey o esclava, no importa lo acepto.

Rey Alfa: No como crees Gema, al contrario, tendrás sirvientes, la única forma es volverte mi reina y por supuesto mi esposa.

Quedé fría cuando dijo eso, ¿yo reina? pero como, no,como le haré pasar esa vergüenza.

Gema: No su majestad no quiero que sea la burla de todos por tener de reina a alguien como yo solo por lástima.

Él se acercó a mí y puso su mano en mi mejilla para luego decir.

Rey Alfa: Yo no te tengo lástima y sería un honor para mí tenerte como reina.

Gema:Pero usted sabe lo que se dice de mí, que dirá su manada 

Rey Alfa: Sabes lo que dicen, que quieren a una mujer como tú cómo su reina, demostraste mucho ímpetu, aunque ya te quería igual sin esa demostración.

Al escucharlo me sonrojé y él sonrió.

Gema:¿Pero... Y si aparece su mate?

Rey Alfa: Ya tuve mis dos mates una creyó en los rumores que se hablan de mi y la otra me engaño.

Gema: Pero que tontas son, Rey yo ya no soy pura, fui del Alfa supremo.

Rey Alfa: Y está bien, pues, eres su mate y además yo tampoco lo soy, eso no te define pequeña lobita.

Me vio con una mirada tierna y dulce y pregunto.

Rey Alfa: Y bien aceptas ser mi Reina o me arrodillo por qué lo puedo hacer.

Dijo levantándose de la cama para arrodillarse y lo detuve no.

Gema: No lo haga, Acepto.

El Rey sonrió como nunca lo había visto, es más, creo que él no sonríe solo cuando me saludo aquella vez.

Gema: Rey debe saber algo sobre mí, si vamos a ser pareja no quiero ocultarle nada para que así usted pueda decidir si quiere seguir o no.

Le comenté que no tenía loba hasta el día del castigo y también lo que me dijo mi loba, le dije que había más y también le dije que no había rechazado a Alekséi para esperar a que la competencia pase y así no tener ventaja sobre ellos.

Rey Alfa: Está bien mi Reina, yo también tengo mis secretos oscuros, ya te los diré aunque los habrás escuchado.

De inmediato me, sonrojé,  no sé por qué me pasa eso con él.

Gema: Lo he escuchado y puedo ver que es mentira y... Todavía no soy su reina.

Sonríe coqueto y me contesta.

Lo eres desde el día que estabas en la feria y te caíste del carrusel.

Gema: us... Usted es el hombre guapo que me ayudó.

Dije y me tapé la boca al momento y me puse más roja que un tomate.

Rey Alfa: Así que hombre guapo hee. No te sonrojes si mi Reina en dos días serán las competencias, yo iré y participaré pero tú irás conmigo como la futura reina.

Desde ese día ya no me sentía triste y extrañamente no extrañaba a Alekséi y es raro por qué era mi primer pensamiento y el último.