El Renacer De Una Tirana.

Giovanni se había ido molesto jurando que acabaría con Roxane, mientras que el lugar ha quedado vacío debido a que la mayoría se ha asustado. Mientras que Misha había hecho que Roxane le siguiera a una habitación, donde las gemelas y Andrei esperan fuera.

— que bello espécimen, ¿tienes pareja?— Aura se cuelga de su brazo izquierdo.

— es perfecto, los humanos si que son lindos.— Gaia se cuelga de su brazo.

— disculpen señoritas, pero, agradecería si respetan mi espacio personal.— les pide Andrei.

— el humano es tímido.— menciona Gaia.

— que adorable.— responde Aura.

Las dos toquetean sus mejillas y pecho, incluso una de ellas le agarra el trasero, causando que Andrei se sobresalte y las intente alejar.

Dentro de la habitación, Misha estaba sentado en el sofá con Roxane frente a él. Misha se veía muy enojado y que lo que Roxane hizo no fue nada favorable para ella, en especial porque el hombre al que molesto, es bastante peligroso.

—¿tienes idea en el problema en el que te has metido?— pregunta molesto.

—¿preocupado, tigrillo? — le mira fijamente.

—no es momento de tu sarcasmo, ese hombre no es como Smith.— le advierte.— entiendo que seas fuerte, tienes buena puntería, pero, con Giovanni no se juega...

—eso es lo que menos me importa, él me desafío, y si quiere seguir, con gusto le daré el golpe final.— responde tranquila.

Misha deja escapar pensado suspiro, no había forma de hacer razonar a la chica frente a él, todo parece verlo como un juego.

— tiene casi la misma influencia que yo, no es solo organización pequeña.—

—tranquilo tigrillo, pequeña o no, su organización no es nada, he librado batallas de verdad y esta, no lo es.— asegura.

— una vez más confirmo tu locura.— expresa molesto. No puede creer que no este ni un poco preocupada por lo que hizo y por las consecuencias.

Roxane solo muestra una sonrisa ante las palabras de Misha, no era la primera vez que la llamaban loca, en su anterior vida también escucho muchas veces esa palabra por parte de sus enemigos y aliados, cuando la veían ir a la batalla sin importarle las consecuencias.

— puede que lo este...así que tu socio debe cuidarse de esta loca.— ríe.

La castaña se despide y al salir, Andrei estaba acorralado contra la pared por las gemelas, pero al ver a Roxane rápidamente se alejaron del asistente, para seguir a su ama. Andrei respiro profundo, sintiendo alivió, ese par de chicas si que le pusieron incómodo. Entro a la habitación y vio a Misha sentado en el sofá sirviéndose un vodka.

— vigila a Giovanni, estoy seguro que irá tras de ella.— ordena Misha.

— ahora si se metió en verdaderos problemas...si la ayudas, Giovanni no estará nada feliz.— advierte Andrei.

— lo sé, pero...— se inclina contra el respaldo del sofá.— sería una pena que ella cayera en manos de ese depravado.

Andrei solo desvía la mirada, es más que obvió que Misha esta preocupado por Roxane. Sin más que decir, hizo algunas llamadas para mantener vigilado a los hombres de Giovanni.

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Al día siguiente, Roxane había llegado a un club que se encontraba casi a las afueras de la ciudad, era un lugar donde se puede hacer toda clase de actividades, desde nadar, jugar golf, tenis, había un casino, fiestas de té para las mujeres, pero lo que a Roxane le llamo la atención, es la equitación y es que lleva tiempo sin montar a caballo. Subir a uno le hacía recordar sus momentos de gloria sobre el lomo de su fiel corcel, nocturno, un precioso caballo de pelaje oscuro, fuerte y listo para acompañarla en sus batallas.

Aunque ahora no eran caballos de batalla, le gustaba montar y hacerlo correr a alta velocidad por el campo, para disfrutar la emoción de sentir el aire chocando en su rostro mientras va a gran velocidad.

Después de un largo paseo, Roxane lleva a su caballo al establo, pero mientras camina de regreso al edificio del club, dos hombres se cruzan en su camino y le advierten que debe seguirlos, mostrando que llevaban armas. Roxane no dijo nada, pero sigue ese par de hombres, quienes la guían al estacionamiento y la hacen subir a un auto.

—No debiste hacer enojar al jefe, solo debiste abrir las piernas para disfrutar.— Se burla el que va a su lado.

—¿es lo que haces tú?, perrita.— se burla Roxane.

El hombre levanto la mano para golpearla, pero su compañero lo detuvo, saben que si llega con un rasguño el jefe se enojara. El viaje duro cerca de media hora hasta que entraron por un camino en medio de la nada; el auto siguió hasta detenerse en una lujosa cabaña en medio de aquel bosque.

— baja y ni intentes huir, solo te perderás.— le advierten.

— es perfecto, nadie los escuchara gritar...— responde Roxane.

Los hombres se miran entre si, pues la chica se veía bastante calmada comparada a otras que le han traído a su jefe. Al entrar a la cabaña, Giovanni estaba en la sala bebiendo y tan pronto vio a Roxane llegar, sonríe de manera cínica. Mientras que los hombres se retiran dejándolos solos.

— si me complaces bien, puede que te deje ir.— advierte Giovanni.

Roxane da un par de pasos hacía el hombre, quien mantiene una sonrisa llena de malicia, mientras miraba a Roxane como si se tratará de un jugoso filete.

Roxane se detuvo a escasos centímetros, pero cuando Giovanni levanto la mano queriendo tocarla, Roxane le detiene apretando con fuerza, tanta que aunque Giovanni trata de apartar la mano, no puede moverse.

— ¿sabes lo que me ha gustado de este lugar?— pregunta Roxane.

Giovanni incluso usa la otra mano tratando de safarse del agarre, nunca antes había visto que una mujer llegará a tener tanta fuerza. Levanto la vista ante la pregunta de Roxane y pudo ver su mirada frivola y una sonrisa casi maníaca se formo en sus labios.

— la respuesta es...que nadie escuchara sus gritos.—

Roxane doblo con fuerza el brazo de Giovanni hasta que se escucho el crujido de sus huesos y un grito desgarrador salió de la boca del hombre, lo más extraño era que nadie ha entrado a ver que ocurre. Giovanni cayó al suelo, sosteniendo su brazo fracturado, mientras llamaba a sus hombres, pero nadie venía.

— ellos ya deben de estar muertos.— mantiene su sonrisa.

—¿q-que?...¿quien eres?...esto...— no comprendía que estaba pasando, ¿quien era esa mujer con una fuerza tan monstruosa y esa presencia que le estaba dando escalofríos.

— ¿yo?, soy la mujer hiciste enojar.— ríe.

La risa de Roxane hizo eco en aquella cabaña solitaria. Fuera de la cabaña un auto llega a toda velocidad y se detiene repentinamente que hasta se escucha el rechinar de las llantas, del auto baja Misha quien corre hacía la cabaña, pero ve a los guardaespaldas de Giovanni tirados en el piso en un charco de sangre y aquellas gemelas de pie cerca de los cuerpos con las manos goteando de sangre, estas al ver a Misha se quedan quietas, mientras que este, aunque vio extraño aquella escena, solo corre dentro de la cabaña.

— ¡Roxane!— grita.

Misha de tiene al ver a la chica de pie, ante el cuerpo moribundo de Giovanni y Roxane llevaba en la mano una especie de pinza que goteaba de sangre.

— a...yu...d...— apenas logro pronunciar Giovanni. Sus ojos se estaban apagando y de su boca goteaba la sangre.

— ¿que carajos...?— para Misha la escena parecía digna de una película Slash.

En el piso vio pequeños coágulos de sangre con algo blanco y después se fijo mejor en las pinzas que llevaba Roxane y entonces lo dedujo, Roxane le había arrancado los dientes.

— tigrillo, llegas en el momento justo, ya estaba por quitarle la lengua a este hablador.— sonríe.

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Perdonen que suba tan tarde, imagino que en sus países ya es mucho más tarde que aquí (11:44pm)

Tuve un día ocupado, pero logré terminar este capitulo. Espero poder subir otro en la tarde, descansen ❤️