VIRGEN A LOS 23

▪︎Lía: Terminamos de comer, volteo a ver a Matteo y le digo: mañana saldré un poco más temprano, ya que tengo que ir a casa de Dana a buscar mi ropa y mis libros. Sabes que no puedo ir sin ellos a la universidad, así que, si no te molesta, iré.

▪︎ Matteo: No tienes que ir a recoger nada en ese lugar ahora mismo. Dime qué es lo que necesitas y lo mando a traer. Sé que consideras a Dana una amiga, pero créeme cuando te digo que ella no es amiga de nadie, así que no la mencionemos más, ¿ok? Voy a hacer una llamada para que te compren todo lo que necesitas. En un momento estoy contigo, está bien.

▪︎ Lía: está bien, pero no vayas a comprar muchas cosas, ¿está bien? Matteo se despide de mí y sale. Ya sé que él no confía en ella, pero es mi amiga, a pesar de todo; yo la quiero mucho. Me doy una ducha para acostarme; estoy muy emocionada por ir mañana a la universidad. Matteo se está demorando mucho en regresar, así que me acuesto y me quedo dormida.

▪︎ Matteo: Termino de ordenar que le compren todo a Lía. Cuando me entra una llamada, es mi madre. Le respondo: 'Hola, madre, ¿cómo has estado?', y eso que me llamas a esta hora, ¿pasó algo?.

▪︎Laura: Por Dios, tengo un hijo tan desconsiderado que no se toma la molestia de llamar a su madre para saber cómo está. Pero, ¿qué puedo hacer si así mismo lo crié yo?

▪︎Matteo: Ay, madre, no seas así; sabes lo mucho que te quiero. Simplemente he estado un poco ocupado, como está mi padre y hermano. Espero que todo esté marchando muy bien en casa.

▪︎Laura: Sí, gracias a Dios, todo va marchando muy bien. Te llamo por un motivo muy importante; no podrás creerlo cuando te cuente: tu hermano se va a casar en 2 meses. Te estoy avisando con anticipación para que después no le quedes mal a tu hermano.

▪︎Matteo: ¿De qué estás hablando, mamá? ¿Estás segura de que Matías se casará? Eso es sorprendente. ¿Dónde encontró a esa pobre mujer que lo aguantará de por vida? Bueno, mañana le marco para felicitarlo. ¿Y mi padre, dónde anda?

▪︎ Laura: no hables así de tu hermano; él solo es un poco complicado. Aunque no lo creas, se comporta de manera muy diferente cuando está con Ana; es otra persona. Me gusta lo mucho que Ana lo está cambiando. Tu padre está en el despacho arreglando unos problemas que tiene con la empresa, pero no te preocupes, no son graves; él los resolverá muy rápido, sabes cómo es tu padre.

▪︎Matteo: Eso lo tengo que ver con mis propios ojos, madre. Bueno, mañana aprovecharé y hablaré con mi papá. Cuídate mucho, madre, y descansa. nos veremos pronto. Te amo. Terminé de hablar y voy a la habitación de Lía, y la encuentro dormida. No quiero despertarla, así que me acuesto a su lado y también duermo.

▪︎Lía: Suena mi alarma, me despierto, veo a Matteo a mi lado, le doy un beso en la frente y voy a darme un baño. Me cambio, salgo a desayunar, saludo, un poco apenada, a Eva. Ella me regala una sonrisa y me dice:

▪︎ Eva: Buen día, señorita. ¿Cómo amaneció? Y eso que se despierta tan temprano hoy. ¿Necesita algo? Dígame, ¿qué quiere desayunar? ¿El joven amo ya se despertó?

▪︎Lía: No, él sigue dormido. No quise despertarlo, creo que está algo cansado. ¿Por qué lo necesitas para algo? Si quieres, lo despierto. Hoy regreso a la universidad y estoy muy contenta.

▪︎Eva: No, ¿cómo se le ocurre, señorita? Es que el joven amo, siempre que se despierta, se toma una taza de café. Solo preguntaba por eso. Entonces, venga y desayune para que no se le haga tarde. ¡Buen provecho!

▪︎Lía: Muchas gracias, Eva. Comeré, y gracias por la comida. Empiezo a comer y escucho una voz fuerte pero sexy detrás de mí. Me volteo y le digo: '¿Desde cuándo estás allí? ¿Por qué no tomaste asiento a mi lado?'

▪︎Matteo: solo estaba viendo lo entretenida que estabas hablando con Eva. Me alegra que te lleves bien con ella, ya que ha estado conmigo desde que era joven; es mi nana y la aprecio mucho. ¿Ya terminaste de comer? Anoche llegué algo tarde a la habitación porque estaba hablando con mi madre.

▪Lía: Me agrada mucho. Desde que llegué, ella se ha portado muy bien conmigo. No sabía que tenías tanto tiempo con ella; se ve que es una gran mujer y que te quiere mucho. No te preocupes; al poco rato que te fuiste, me bañé y quedé profundamente dormida. Bueno, basta de tanta charla, tengo que irme, ya que se me hace tarde. Le doy un beso en la boca y me marcho.

▪︎ Eva: No puedo creer cómo mi niño está con una mujer como la señorita Lía. Creo que tu madre se pondrá contenta cuando vea la clase de mujer que tienes; nada que ver con la otra, que se le veía por encima y que estaba contigo solo por lo que le podías dar. Me gusta verte tan contento, mi niño.

▪︎ Matteo: Gracias, Nana. Tú sabes que lo que tenía con Dana no era amor, solo estábamos juntos para pasar el rato. Mira, si no hubiera sido por ella, nunca habría conocido a Lía, y eso se lo agradeceré toda la vida. Bueno, Nana, voy a darme una ducha porque tengo que ir al trabajo. Ah, y antes que se me olvide, Matías se casará dentro de dos meses. Ya estás avisada; viajaremos a su boda, ¿ok?

▪︎Eva: No puedo creer lo que estoy escuchando, mi niño. ¿Usted me está hablando en serio? Es increíble, pero me alegra por el joven Matías; ya era hora de que encontrara a alguien que le diera mucho amor. ¿Y usted piensa en casarse algún día?

▪︎Matteo: Nana, tú sabes que eso no va conmigo, pero quién sabe si algún día lo considere y me case. La vida da muchas vueltas. Bueno, chao, te dejo; voy a darme un baño para salir.