LA HEREDERA.

Rosario volvió a su casa, sin haber logrado ver a Federico, Renata la esperaba con la esperanza que tuviera buenas noticias, Pero ver la expresión en el rostro de su madre supo que no lo había conseguido. _ hola madre. - Renata, la saludo. _ hola mi niña, como te has sentido hoy.- pregunto rosario sentándose.

_ bien madre, y a ti como te fue.

_ no pude conseguir ver al joven Federico, el señor Emilio no está dispuesto a permitir a que me acerque.

_ no te preocupes mama, buscaré la manera, o quizás sea mejor así.- Renata se sentó cerca de su madre, tomo sus manos._ he causado muchos problemas y no quiero que esto empeoré la situación de Federico.

_ alguna vez te he contado como te tuve.- Renata negó con la cabeza.

_ mi historia es similar a lo que te está pasando, la única diferencia es que en ese momento era la hija consentida de mis padres, tenía todo lo que una persona podía desear. - rosario sintió tristeza al recordar como era su vida, no se arrepentía de haber decidido tener a su hija, le entristecía recordar la forma en que su familia la rechazo.

_ me estás diciendo que no siempre viviste en estas condiciones.

_ exacto.- rosario se paró, entró a la habitación y buscó debajo de la cama un pedazo de periódico y luego volvio se sentó junto a su hija.- esta es mi familia.- rosario le entregó el periódico a Renata._ Eugenia y José Larrea mis padres, este que aquí es Román mi hermano mayor.- rosario señaló con sus dedos a cada uno de ellos. Renata estaba sorprendida y más al escuchar cada detalle de la vida de su madre, ella nunca le había preguntado nada de su pasado y mucho menos que tuviera que ver con su padre.

_ lo siento mucho mama, me puedo imaginar lo duro que fue para ti.- Renata miraba a su madre con admiración._ gracias por luchar por mí.

_ tú eres mi fortaleza.- rosario se quedó en silencio por un momento._ quieres que te cuente sobre tu padre.- Renata asintió con la cabeza._ su nombre es Rodrigo Slim él al igual que yo, es hijo de una familia adinerada, es hijo único, era una persona maravillosa, la verdad hay muchas cosas que desconozco aún, como el porqué me traicionó, según yo nos amábamos, no último que supe fue que se comprometió el día que mi padre me corrió y a los pocos días se fue del país, trate de ubicarlo para contarle sobre tu existencia, Pero no pude le envíe algunas cartas que nunca fueron respondidas.

_ tienes alguna foto de él.- pregunto Renata.

Rosario negó con la cabeza, cuando su padre la corrió no tuvo oportunidad de sacar su pertenencia, y ni eso tenía una foto para que su hija conociera a su padre.

_ tu padre era muy guapo, tienes el color de sus ojos.- Renata sonrió, era la primera vez que escuchaba algo como eso.

Después de platicar por un largo rato cenaron en compañía de Carmen, quien había llegado de trabajar.

...

RENATA.

Escuchar la historia de mi madre, me motivo, ahora sé que debo luchar por mi hijo, are el intento de hablar con Federico, así que mañana iré con mi madre a su casa, buscaré la manera de llegar a su habitación sin ser vista. Son muchas cosas las que tenemos que aclarar, espero tener suerte.

...

Al día siguiente Renata se levantó temprano, se organizó y salió junto con su madre.

_ estás segura de hacer esto.- pregunto rosario a su hija, ya iban en el camión.

_ totalmente, madre, are el intento, independientemente de lo que pase hoy, lucharé por mi hijo.- se podía ver lo decidida que estaba Renata.

_ bien, yo distraeré a Gerardo para que puedas entrar, por favor ten mucho cuidado.- Renata sonrió dándole tranquilidad a su madre.

Una hora después estaban llegando a su destino, rosario hizo las cosas tal cual lo habían planeado. Renata aprovechó que Gerardo estaba conversando alegremente con rosario y se escabullo dentro de la mansión, la ventaja que tenía era que conocía a la perfección cada rincón de la mansión, lo había hecho gracias a los juegos que tenía de niña con Federico.

...

FEDERICO.

No he abandonado mi habitación desde que volví, la verdad no sé que hacer, me siento tan inútil, mi padre está haciendo lo que se le venga en gana con mi vida.

Sé que sigue en pie lo del compromiso, ya que es de lo que hablan los empleados de la casa, debo aprovechar ese día para escapar, por suerte tengo algunos ahorros, con eso podre vivir con Renata uno o dos meses en lo que consigo que hacer, el plan era otro, Pero ya no tengo tiempo para eso.

...

Renata logró ingresar a la mansión sin ser vista, ya hacía unos cuatro años que no iba, la mayoría de las casas seguían igual, o eso pensaba ella, subió con rapidez las escaleras, sabía que Emilio y teresa bajarían a las 6 solo tenía media hora para hablar con Federico, así que no tenía tiempo que perder. Corrió a la que según ella era la habitación de Federico, Pero se llevó la sorpresa de que la habitación estaba totalmente vacía.

...

emilio se vestía, para bajar a desayunar, Pero una notificación en su computadora llamo su atención, al abrirla le llegaron las imágenes de seguridad de la mansión.

_ que hace esa maldita en mi casa.- grito emilio saliendo de la habitación.

Teresa no entendía lo que ocurría, Pero lo siguió hasta una de todas las habitaciones. al entrar pudo ver a su esposo sujetando con fuerza a Renata.

_ que haces suéltala.- le grito Teresa a emilio.

_ cariño, no te metas en esto.

_ te he dicho que la sueltes.- le volvió a gritar pero con más enojo.

emilio lo dudo por un momento, y luego la soltó. Teresa se acercó rápidamente a Renata.

_ estás bien mi niña.- estaba preocupada.

_ si señora, siento mucho haber entrado de esta manera.- se disculpo Renata.

_ no te preocupes, Pero dime qué haces aquí.

_ que crees que está haciendo aquí, no vez que está buscando la manera de seguir entrenando a nuestro hijo.- hablo emilio.