La Venganza Perfecta

5 días después.

Decir que estaba mas ligera que una pluma era quedarse corto. Los días habían transcurrido bastante rápido desde lo acontecido pero  la verdad era como si huera cortado un hilo que me atara a James, y se que suena un poco ilógico.

Habia tenido muchos sentimientos hacia el pero hasta cierto  punto si habia sido una consecuencia rotunda cuando el tomo la decisión de aceptar su oferta laboral. Lo mas sensato fue que el trabajo, el problema  con mi familia me fueran consumiendo hasta el punto de que mis sentimientos hacia James se fuera desvaneciendo hasta el punto de que no sintiera mucho por el, ¿Saben?

Fueron de esas realidades  que en vez de arruinarte te liberan de lo que  nos llevan agarrando en mucho tiempo.

A decir verdad de estos días que habían transcurrido; el primer día la pantalla de mi teléfono se habia bombardeado de llamadas y mensajes por parte de James, mismas  que con mucho orgullo y satisfacción mande por un tubo y después bloquee su numero, dándome  mucho mas satisfacción y libertad.

En conclusión, James habia sido un intento fallido de una relación sana, además de que habia sacado su verdadera  hombría,  un maldito infiel era lo que lo representaba, además eso siempre se puede esperar de un hombre. Nunca puedes confiarte, incluso si es la persona con la podrías pasar el resto de tu vida.

Termine de redactar un informa, que mi padre me solicito de emergencia ya que Elena se habia tomado unos días, y se lo mande mientras me recargaba en mi silla negra y tomaba un descanso ya que mi mano derecha me dolía con facilidad cuando pasaba mucho tiempo en la computadora. Justo hoy, habia pasado toda mi mañana acelerando mi pendientes para viajar lo  mas pronto posible primero a Nueva York y avanzar todo y poder ver lo que necesitábamos solucionar.

Rápidamente habían  dado la una de la tarde, pero antes de seguir,  solo una hora mas antes de tomar mi comida,  la puerta e  mi ofician se abrió, dejándome ver a Kate en la  entrada de la misma, bastante alegre, pero para mi algo extraño. No pensé que pudiera venir a visitarme porque su tiempo era limitado como el padre y dos porque a veces no sabia como tenia que responder ante ella cuando estaba  cerca de mama.

—¿Se puede señorita West Miller? —Kate entro  solo con su cartera en mano y rápidamente se sentó frente a mi. Justo  hoy parecía mas contenta.

—Ya estas adentro— me sentía mas relajada de ver a mi hermana así. Por lo general Kate siempre estaba seria y eran pocos los momentos de cuando la veía así de alegre.

Kate sonrió, acomodándose mas en la  silla,  dejando en mi mesa su cartera. — ¿Muy ocupada?

—Solo un poco.  Papa me  pidió ayuda de emergencia y tuve que hacerlo porque parecía que iba a explotar.

Kate frunció su ceño—¿Ayuda a ti? Que raro— movió su cabeza de un lado a otro— siempre acude a mi, pero me es raro que no me haya comentado nada.

—Déjalo pasar Kate— y no era mentira— mi padre te ha visto muy abrumada de trabajo, no creas que no se da cuenta. Lo conozco muy bien y por  una vez decidió no molestarte. Además, no era algo que requiriera  mucho tiempo así que fue fácil.

—Aun así, siempre acude a mi. Me siento traicionada— Kate sonrió un poco mas mientras yo negaba con mi cabeza. Papa siempre la vio como la guía para mi, por lo que entendía su sentir. — Pero no importa; venia a ver como estabas y tu nueva oficina— rápidamente le dio un vistazo y se enfoco de nuevo en mi— Tiene mucho tu estilo, bien hecho hermana.

—¿De verdad? Mama no estaba muy contenta en cuanto lo supo.

Kate hizo un movimiento con su mano, restándole importancia—Déjala Katy, créeme que yo a veces no la entiendo. Al contrario, ya debería de estar mas contenta porque estas ayudando a papa, pero ya vez como  es, no  olvida los errores, nunca.

—Lo se— me quede pensando en un puno fijo,  pero volví mi mirada a mi hermana—incluso me dio  a entender que a ti te habia costado tu puesto y que yo…

—No la escuches Katy— Kate me observaba fijamente, su rostro estaba serio— solo lo dice por como es contigo, pero ella  no mejora. Si,  me costo que mi padre me aceptara dar un puesto y ayudarlo pero ¿Recuerdas como era? Las fiestas, gastar dinero que papa  habia ganado con tanto esfuerzo…  Todo eso hizo que me costara mucho llegar hasta donde estoy. Y no digo lo mismo  de ti— Su rostro volvió a relajarse— A pesar de que desafiaste a mis padres, incluso a mis lo hiciste sola  además recuerda que desde pequeña fuiste inteligente, recta en lo que hacías.  Seguiste tu instinto y sin importar que no hayas hecho lo que ellos dijeron estas saliendo por tu propia cuenta, así que mucho menos mama  debería  de estar enojada ya.

—Yo lo se, pero creo que no puede dejarlo pasar. He buscado el  momento  de arreglar todo  pero parece que para ella no existo.

—Lo haces. Ni por un segundo  digas eso— tienes su sangre, eres su copia en vivo y todo color y eres demasiado buena como ella… solo deja que ella vea la realidad. Mas vale tarde  que nunca, ¿No crees?

Asentí y sonreí con ganas. Hacia mucho tiempo que Kate me  guiaba de este modo, pero la comprendía. Kate era cambiante a cuando estaba con mama y papa y que tenia mayor responsabilidad porque era la hermana mayor. Ella  era mi guía, por lo que mas que aparentar tenia que hacer perfectamente bien las cosas.

—Pero bueno ya que se que estas perfectamente bien ubicada,  creo que puedes explicarme algo.

No sabia a lo que realmente se refería, por lo que me dio mucha duda

—¿Qué es? — Kate saco su teléfono se su caso beige, que hoy traía. Buscaba algo en su celular y parecía haberlo encontrado en cuanto  me lo  paso. — Ay mierda.

Este imbécil, ¿Qué demonios hacia molestando a mi hermana?

—Pensé que estaba jugando, pero por su insistencia  veo que no— En las  capturas de pantalla  habia mensajes de James suplicando que mi hermana lo ayudara a contactarme con el, ¡Pero que bajo  habia caído! Eso era se un sínico a la altura de la palabra.

—¡Vaya! Pero, ¿Cómo consiguió tu teléfono?

—Recuerda que lo conocí en un evento— le regrese el teléfono. La verdad es que la vergüenza me inundaba por completo. ¿Por qué fue tan sínico? — Pero la pregunta del millón es, ¿Por qué termino contigo?

—¡Mas bien porque yo lo termine! Porque fue lo que hice Kate, yo lo termine.

Kate abrió su ojos con asombro, pero  al ver mi rostro empezó a reírse. ¿Ven? Es lo  malo de tener runa hermana que te conoce la cien por ciento.

—¿Pero por que? ¿Te hizo algo?

—¿Crees que te parecería algo que el  imbécil tenia a alguien que me vigilaba y le mandaba fotos sobre donde estaba y a donde iba? —Kate abrió su boca y sus ojos pero seguí— y no solo eso, el  maldito traía un chupetón en el cuello, así que ya te imaginaras…

—Vaya, ¡Pero que menudo imbécil! ¿Cómo se atreve a acosarte así? ¡Que bueno que no conteste a ninguno de sus mensajes— cuando a Kate algo no le parecía, sus mejillas  tomaban un tono rosado,  y justo se veía así— pero— volvió a su rostro preocupado— No pareces sufrirlo.

—No lo hago.  Sinceramente— coloque mis brazos sobre la  carpeta que estaba cerrada— creo que ya no  me gustaba. Entre el trabajo, los problemas con mama sinceramente creo que deje a un lado  mis sentimientos. Además era una relación a distancia. Habia riesgos.

—¡Pero fueron muchos años Katy!

—Lo  se— sonrei un poco mientras la observaba— pero a pesar de lo que me hizo, muy dentro guardo  todos los buenos momentos que tuvimos, eso no  se niega.

—Vaya, sigues siendo demasiado blanda con algunas personas que no lo  merecen— Kate tomo su cartera entre sus manos.

—Me conoces. La gente me puede tirar la piedra pero no  la regreso para lastimar.  No soy así de mala.

—Si,  pero debes de ser mas  consciente.  No puedes dejar que te hagan y hagan y no hacer nada— Kate se levanto  de la  silla y se alisó su pantalón. —Tenlo  en cuenta Katy, en serio. Si te  arrojan la piedra, ya no dudes en dejarla ¡Tírala! Con fuerza.

Sin duda me hacia muy feliz ver a mi hermana así de contenta. — Lo hare la próxima vez que alguien sea un imbécil.

—¡Así! — Kate sonrió, mostrando su perfecta dentadura y se despidió de mi, dejándome  mas relajada después de por fin tener una platica sincera de hermana a hermana, dejando a lado nuestras diferencias.

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—Perfecto Katy, entonces, ¿A mas tardar la próxima semana estarías  llegando  a Nueva York? — Marcus estaba en línea,  por  lo que era  justo  el momento para comentarle el pequeño avance que tenia y lo que seguía.

—Si. He adelantado un poco mas de trabajo  y poder tener el enfoque en lo que mas nos urge.

—Perfecto.  Entonces, en ese caso en cuanto tengas los datos contáctame. Puede que este viaje tarde un poco mas— por su tono de voz parecía estar cansado, y me odiaba por molestarlo ya pasada la hora de trabajo, pero considere importante informarle sobre el asunto, además  no se por  que pero quería escuchar su voz.

Por teléfono se escuchaba mucho mas grave.

—¿Muy pesado?

—Cosas de imprevisto— yo aun estaba en la oficina.  Eran las seis de la tarde por lo que podía ver ya como el sol comenzaba a ocultarse. Era una hermosa vista— ya sabes. Los viajes de negocio no  siempre pueden ser perfectos, pero  es algo  con solución.

—Bueno en ese caso, espero  de todo corazón que se solucione.

Su risa fue lo que escuche del otro lado de la línea— Se solucionara Katy, además tengo que regresar pronto. No puedo dejar que hagas todo. Oliver me  matara.

—Papa  te idolatra mucho además ya lo habia dicho,  puedo llevar esto perfectamente.

—Y por eso  mismo no puedo dejar con cargues con todo. No es de  mi  persona ser así con una dama.

La línea se quedo brevemente en silencio  mientras sus palabras me absorbían. Aun habia hombres así.

— Entonces en ese caso— con la otra mano libre, empecé a guardar mis cosas en mi bolso para salir de mi oficina— esperare con ansias tu regreso. De todas maneras avanzare y te mantendré al tanto, ¿Esta bien?

—Perfecto— con eso me levante de mi silla, acomodándola y poniéndome mi saco sin soltar el teléfono. — esperare en unos días tu reporte y en cuento regrese te informare para comenzar.

—Esta bien. Pasa  una buena noche, Marcus.

—Lo hare. Buenas noches Katy— termine la llamada guardando mi teléfono en mi bolsa,  tome mi termo y camine hasta la  puerta, pero esa se abrió antes de que yo lo hiciera.

Mi madre estaba tomando la manija  de la puerta y no pude avanzar mas porque entro y cerro la puerta delicadamente. Era la primera vez que estábamos totalmente solas.

—¿Tienes tiempo? — paso  de largo y se sentó en el pequeño sofá que tenia adjunto en mi oficina— veo que si.

Con todo el  porte que siempre tenia me observo, de arriba hacia abajo.

—Iba de salida, pero tengo  tiempo— me puse en el otro sofá,  sentándome y quedando frente a ella. Ahora que la tenia frente a frente podía ver como seguía conservándose muy bien. Su piel pálida  pero perfectamente maquillada la hacia ver mas joven que su edad, además de que seguía usando sus trajes color vino que hacían que resaltara mas.

—En ese caso— coloco su bolso negreo sobre la  mesa del centro y cruzo sus piernas— Tu padre esta dejando mucha confianza en ti, ¿No crees? —  la mirada de mi madre siempre haba sido  muy fuerte y era justo como  me veía. — Siempre tomándote a ti…

—No se a lo que te refieres mama…

—Lo sabes perfectamente— movió su cabeza aun lado, sin dejar de mirarme— tu padre esta dejándote muchas cosas que no creo que puedas hacerlo, ¿Por qué mejor  no se lo dejas a Kate? Ella  sabrá como llevarlo, además tiene experiencia con Marcus, así que lo harán perfectamente bien.

Sabia que mi madre tenia diferencias conmigo,  ¿Pero era tan alto su diferencia para atreverse a decirme eso? ¡Por dios soy su hija!

—Con todo respeto mama, no puedes decir eso— creo que no esperaba mis palabras porque abrió sus ojos pero como era característico en ella, aparentaba que estaba bien, que tenia el control de todo— mucho menos decir que se lo pase a Kate, no es su area.

—¿Y entonces que? ¿Serás capaz de hacerlo todo tu sola?

—Lo  soy— sentía que la  adrenalina en mi  cuerpo. Me  enojaba, pero me decepcionaba mas que no confiara en mi. — además, no puedes ponerte así cunado fuiste tu quien lo sugirió.

Esta bien. No era así la manera correcta de hablarle,  pero aun siendo mi madre  no tenia porque denigrar así mi trabajo.

—Siempre llevando la  contraria Katy— su mirada era la misma, simulando el  control de esto— pensé que en este tiempo que estuve en España cambiaras… pero no lo has hecho, ni un poco.

—No puedo cambiar mi manera de ser solo por complacerte mama. — esto se sentía como vomito verbal. Mi cerebro articulaba las palabras que no quería decir pero mi boca hacia lo contrario— y se que sigues resentida conmigo por lo de mi carrera, pero no me arrepiento— pretendía no quitar mi mirada de la de ella. — Estudie lo que quería pero estoy ayudándolos y pretendo hacerlo si mi padre y Kate me necesitan.

—¿Y yo? ¿Crees que puedes saltarme como si nada?

—No lo haría; jamás, pero ¿Cómo considerarte si ni siquiera vez mis esfuerzos? Además  me dices una cosa, la tomo y ahora quieres de deserte?

—Era una prueba— se cómodo mejor y cruzo su otra pierna— necesitaba ver que tan lista estabas, pero de verdad que tienes agallas…  Aun así— se levanto y tomo su  bolso— considera declinar, es la mejor opción— se  dio la vuelta caminando hacia la puerta, dejándome en mi sofá, pero no iba a dejarla irse. ¡No podía ser así conmigo!

—¿Por qué eres así conmigo mama? ¿ Tanto odias mis decisiones? ¿Odias que no sea como Kate? — al mención de mi hermana se giro hasta tenerme de frente. ¿Por qué eres así mama? Me he esforzado para arreglar esto, ser mejor…

—No es suficiente Katy— mama se coloco con elegancia su bolso, como si mis palabras no le  afectaran— por eso deberías  desertar.

—¡Tal vez no sea suficiente para ti! Pero para papa lo es.

—¡No  lo  es! — mi  madre habia levantado su voz,  pero no tanto como lo estaba haciendo— Tu padre en vez de hacerte un bien te hizo un mal  dándote todo tan fácil, cuando tu hermana lucho por ello.

—¡Por dios mama! ¿Por un momento puedes dejar a Kate fuera de esto?

—¿Por qué? ¿Te molesta que tu  hermana sea tu jefa también?

No podía creer sus palabras…¿Qué diablos pensaba tanto mi mama  para tener ideas  como esas? Era otra mujer,  ¡Esta no era mi  madre!

—¡No mama! Por su puesto que no. Kate es mi  ejemplo, mi mejor amiga, ¿Porque tendria que pensar eso?

—Puede pasar entre hermanas; la  envidia siempre puede estar presente— parecía que ella también estaba frustrada porque movió su melena hacia atrás.

—¡Pero no es mi caso! ¡Es simplemente porque siempre la quieres comparar conmigo! ¡Y no tiene por que ser así! — di unos pasos hasta que estuve mas cerca de ella— ¿Por qué lo haces mama?

Mi madre ya no me veía mas. Su visita estaba en un punto ciego mientras que yo  solo apretaba mis puños sobre mi pantalón. ¡Mierda! Tenia tantas cosas por decirle, por reclamar, pero estaba conteniéndome por que el hilo que sujetaba nuestra relación estaba rompiéndose, y no iba a durar mucho

—No soy Kate mama, soy Katy, tu hija menor. No soy ella.

—Lo se— mi madre por fin volvió a verme— por eso  mismo lo hago, porque hubiera preferido tener otra Kate… alguien que fuera la hija perfecta  para la familia.

Giro y salió de la oficina, dejándome sola.

Hubiera preferido otra Kate… alguien que fuera la hija  perfecta para la  familia.

El silencio se hizo, pero el impacto de sus palabras era mayor porque me descontrolaron al grado de que mis lagrimas mojaran mi cara…

Ella no me quería como hija… Y eso me habia matado.

Porque ella no me consideraba su hija, solo a Kate, como siempre; solo ella, su  hija perfecta…