AHORA SOY ISABELL La Fría Y Olvidada Emperatriz

Caminé hasta quedar enmedio de el salor el emperador se encontraba sentado en su trono y en el trono del lado una señora que me imagino es la Emperatriz madre.

*a pesar de tener sus años se conserva muy bien, le pedire la crema que usa su piel se ve muy suave y casi ni tiene arrugas,ahh habia olvidado que en esta epoca se casan desde miy jovenes eso debe ser un factor importante*

Por estar sumergida en mis pensamientos no me percate cuando la emperatriz madre se había acercado ami hasta que tomo mis manos mientras me decia en un tono triste.

-Emperatriz madre- oh mi pequeña Isabell lamento mucho lo que el bruto de mi hijo te hizo pasar no estaba enterada de nada de el asunto si no me hubiera regresado de mi retiro a jalarle de la oreja para que se comportara.

No entendía lo que estaba pasando pues en la historia apenas se menciona poco de ella solo que quedo viuda cuando su hijo tenia 4 años y que aun así pudo con todo ella sola hasta que le dio el cargo a su hijo después de casarse conmigo y después desapareció para su retiró, trate de recordar algo en las memorias de La antigua Isabell cuando algo me vino a la mente.

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Me encontraba caminado por un pasillo hacia un jardín donde estaba la reina madre esperándome para tomar el té no más noto mi presencia se levantó para saludarme.

-Reina madre- oh Isabell ya llegaste toma asiento mandé a preparar tú postre favorito.

-Isabell- Muchas gracias reina madre espero qué no lleve mucho tiempo esperándome.

Decía Isabell mientras hacía una reverencia.

-Reina madre- te he dicho que dejes las formalidades conmigo sabes que puedes decirme Gloria o solo madre recuerda que pronto seras oficialmente mi nuera, bueno hay que apresurarnos si no se nos enfría el té.

Decía Gloria sentándose con entusiasmo mientras las sirvientaelnos servían el té.

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-Isabell- No debe de preocuparse madre nada de esto fue su culpa.

-Gloria- aún recuerdo la primera vez que llegaste al palacio junto a él Duque saliste corriendo por todos lados desde entonces el palacio se llenó de alegría y risas ,cuando se pactó el compromiso estaba muy feliz para mi no había nadie más quien pudiera ser mi sucesora que tu me puso demasiado triste la noticia de saber de que mi hijo y tu se divorciaron, pero cuando supe la razón retome el cargo de emperatriz y le quite su cargo hasta que no se muestre digno de la corona no regresará a su puesto asi tenga que buscar otro candidato para el puesto.

Estaba muy sorprendida, pero a la vez feliz y aliviada de que si me iba el imperio quedaría en buenas manos, estuve un rato más hablando con la emperatriz madre y uno que otro ministro con sus esposas salí un rato a el balcón me sentía ofuscada entre tanta gente me quede mirando el atardecer se veía tan hermoso recuerdo que en mi anterior vida siempre llevaba conmigo a uno de mis pacientes a observar el atardecer cuando se sentia oprimidos de estar tanto tiempo encerrado en una sola habitación era reconfortante ver sus caras de tranquila al ver el atardecer, no se cuanto tiempo lo estuve observando pero el sol ya se había ocultado me gire cuando sentí la presencia de alguien a mis espaldas.