En su época Abigail fue una emperatriz conocida por gobernar con rudeza, al punto de ser considerada una tirana por los nobles. Ella conquisto reinos enteros unificando el continente y goberno con firmeza hasta el final de sus días.
Pero algo increíble ha pasado, Abigail ha despertado en mundo totalmente distinto y en un cuerpo que no es suyo, pero cuya dueña fue víctima de las maldades de quienes ella confiaba, pero ahora, con la tirana ocupando ese cuerpo, aquellos que buscan destruirla, pagarán con creces, porque la tirana, no perdona.
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Capítulo 18.
Un estruendo se hizo escuchar en la mansión Caruso, todos los escoltas corrieron hacia el sitio de la explosión y la familia Caruso no fue la excepción, incluso las mujeres de la familia, quienes estaban asustadas. La puerta traerá había volado en pedazos y un gran agujero era evidente. Todo ven como la bella castaña entra a la casa acompañada de las gemelas.
— escuchen plebeyos inútiles, están ante la nueva jefa de la organización, rindan reverencia y lealtad a la emperatriz.— anuncia Gaia.
Todos estaban confundidos por las palabras de la joven escolta, pero los hombres de la familia dejaron salir un breve carcajada llena de burla, algo que les duro poco al ver como sus guardaespaldas caían al suelo con un agujero en la frente, todos porque las gemelas dispararon sin compasión. El más viejo de los Caruso dio un paso hacía adelante exigiendo saber lo que estaba pasando.
— Giovanni Caruso busco esta guerra en contra de nuestra señora, ahora, nuestra señora reclama su territorio, dinero y propiedades.— explica Aura.
— y juren lealtad a su majestad o mueran.— agrega Gaia.
—¿que estupidez dicen niñas?, aquí solo han venido a perder sus vidas.— responde el viejo Caruso.
— lo mismo creyeron los hijos de Giovanni Caruso y ahora, se han reunido con su padre.— Roxane sonríe con burla.
Uno de los guardias llega corriendo avisando al viejo que George y Flavio están muertos, y todos en la bodega. Misha llega también al sitio, siendo visto por el viejo.
— Kovalev, ¿que significa esto?, ¿que esta pasando?— insiste en preguntar.
— viejo, pues verás, tu hijo, Giovanni molesto a la señorita.— señala a Roxane.— ella lo mató, tus nietos buscarán venganza y ahora son comida de gusanos también.
El viejo no puede creer lo que escuchaba, en especial cuando Misha le explico que todo ese alboroto en la mansión se debía a un lío de faldas de su hijo. El viejo Caruso miro a Roxane y ordenó a sus guardaespaldas acabar con ella, pero, estos fueron abatidos rápidamente por las gemelas, uno por uno caían, la familia Caruso estaba desconcertada, todo pasaba tan rápido y al final, terminaron pasando a la mesa del comedor, donde Roxane exigió el control de la organización y ellos pasaban a ser unos simples lacayos, por supuesto, no les gusto para nada, se negaban a dejar que una jovencita dirigiera la organización, aun cuando han visto que basto solo dos guardaespaldas para derribar a los suyos.
— todo esto es un maldito chiste, mi organización jamás será entregada a la maldita que mato a mi hijo y nietos.— grita el viejo y sus otros hijos estaban de acuerdo.
— Kovalev, tú estás tras de todo esto...vimos el vídeo, esa mujer esta contigo.— menciona uno de los Caruso.
— todo esto fue causado por Giovanni, que no pudo aceptar un "no", por respuesta.— responde Misha enojado.
Y es que todo es culpa de Giovanni, de eso no hay duda, si tan solo hubiera aceptado que Roxane no estaba interesada en él, estaría vivo en ese momento y cada quien seguiría con su vida, pero más importante, ella estaría tranquila. Misha deja escapar un pesado suspiro, aún sigue procesando lo que vio en la bodega, todo fue tan rápido y confuso.
El silencio se había hecho presente, el viejo Caruso no pensaba entregar su organización, pero si estaba dispuesto a matar a esa mujer que les estaba causando problemas, pero, al dirigir su mirada hacía ella, un escalofrío recorrió cuando le vio a los ojos, Roxane solo ladeo un poco la cabeza, sin despegar su vista del rostro del anciano quien luchaba por mantenerse en su lugar. Roxane sonrió ladina.
— supongo que los Caruso tendrán que extinguirse.— comenta.
Al escucharla, todos se alteran y comienzan a reclamar, pidiendo al anciano que los dejen matarla, incluso uno de ellos saca su arma apuntando a Roxane.
— solo un disparo y se acaba todo, dejemos de jugar con esta perra.— menciona uno de los jovenes Caruso.
Pero antes que el anciano Caruso pueda decirle algo, el estruendo de un disparo hace eco en la sala, siendo aquel joven quien cae con una bala en la frente y Roxane fue quien ha disparado. Los gritos de la madre de aquel joven se escuchan mientras corre a abrazar el cuerpo de su hijo suplicando que despierte, el padre de dicho joven también intenta ir en contra de Roxane pero el anciano le grita para que se detenga.
— pero padre...mi hijo...—
— ¿quieres acabar como él?— le pregunta.
— pero...
— suficiente, esa mujer...
El anciano guarda silencio, ha perdido tres nietos y un hijo, de seguir así, perderá todo. Roxane baja el arma dejándola sobre la mesa.
— supongo que han tomado una decisión, por el bien de su familia, si es que siente algo de apreció por ellos.— habla Roxane con cierto tono de burla.
— la organización dejará de perseguirla...pero no será suya.— menciona el anciano.
—¿creen que seria un trato justo?, siendo que fue Giovanni quien empezó esto.— agrega Misha.
— no estoy para negociar, la organización es mía o me encargaré de desaparecerla del mapa.— responde Roxane.
— oye...— Misha no esperaba esa respuesta, tal parece que Roxane va por todo.— ¿estás segura de esto?
— por supuesto, todo o nada.— responde Roxane.
— no dejaremos que nadie se quede con lo que es nuestro, suficiente tienes con que te dejemos vivir.— reclama el segundo hijo del anciano.
— así es, deja de actuar de digna, seguramente fuiste quien sedujo a Giovanni y como no te quiso hacer su esposa, lo mataste, las perras como tú solo buscan eso.— agrega el tercer hijo.
Misha quien estaba más cerca de aquel hombre, le agarro con fuerza de la nuca y le azotó la cara contra la mesa, todos quedaron pasmados ante esto, pues saben que pocas veces Misha deja ver su lado violento.
— a ella no le vuelves a faltar el respeto o seré quien te meta una bala en la cara.— advierte.
Roxane observa atenta, dejando ver una leve sonrisa, hasta ahora, Misha ha permanecido tranquilo, incluso ella no lo había visto perder el control y eso, era interesante para ella.
— maldito...esa p*ta debe de hacerte buenas mam*das si tanto la defiendes.— se burla uno de los jovenes.
Misha levanta la vista hacía aquel chico y apuntando su arma hacía él, pero la madre del chico se interpone pidiendo que no lo haga, incluso le pide a su hijo disculparse, pero este discute con ella. Roxane da un disparo al aire, captando la atención de todos nuevamente.
— he esperado suficiente.— se pone de pie.— no necesito su organización. Aura, Gaia, quemen todo y a todos.— ordena Roxane.
Las gemelas asienten ante la orden y atacan rápidamente a los Caruso, eliminando a los mayores primero, ante esto, las mujeres gritan tratando de proteger a sus hijos, el anciano al ver esto.
—¡esta bien!, puedes tener todo...pero no toques a mis nietos...— suplica.
Roxane ordena a las gemelas detenerse, pero deja salir una risa.— no cabe duda, que el amor es la peor debilidad de un humano.
El anciano apretaba los puños, estaba furioso por perder todo por lo que ha trabajado y por culpa de Giovanni que no pudo aguantar el rechazo de una mujerzuela.
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