Vamos a ver qué nos prepara el mundo, lean a ver qué nos lleva la vida de Makoto con su pequeña y querida.....
Autor: La inspiración fluye en su detenido tiempo , subiré capítulos cuando pueda 😅☺️
Datos:
Silencio En La Oscuridad, es una historia recién creada por mí Contiene suspensión, LGBT y entre otros géneros.
Novela Original 😉🖤😘😊 No copiar la historia, Los plagios son totalmente ilegales.
Está novela es original, creada con paciencia y dedicación. Porfavor no copiar.
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Verdad o Falso?
Dylan al ver a su pareja observo que llevaba su ropa en él, estaba algo tierno por lo grande que le quedaba.
Dylan: Te ves lindo amor.
Makoto: Es lo que encontré más o menos mi talla, eres demasiado grande.
El señor solo se rio leve al ver la reacción de su hijo.
Makoto le vio.
Makoto: Señor ahora que lo recuerdo, no se su nombre.
Nathaniel: Me llamo Nathaniel pequeño, por cierto que edad tienes joven Makoto?
Makoto se rio leve.
Makoto: Mi edad en estos momentos es un secreto. Pero solo diré que Su hijo es un pedófilo.
Nathaniel: ... Dylan.. Tiene menos que tu no es verdad?
Dylan: No se padre, pero me llamo pedófilo así que creo que sí es menor.
Makoto camino hasta la entrada nuevamente pero se detuvo al escuchar risas, miro a su alrededor pero no había nadie y Dylan corrió hacia él al igual que Nathaniel. Agarraron al menor y lo jalaron hacia ellos, y quedaron sorprendidos al escuchar también aquellas risas.
Dylan miro donde estaban las chicas y ellas también venían corriendo, se acercaron y tomaron levemente de la mano a todos.
Makoto estaba temblando un poco, Dylan le abrazo suavemente para tranquilizarlo. Hikari también le abrazo por la parte de adelante.
Hikari: Hermano!
Makoto se tranquilizó un poco aun así seguía asustado por aquellas risas, Nathaniel miraba desde donde estaba hacia adentro de la casa. Estaba oscura completamente no se notaba las mínimas luces solo unos pequeños de color rojo.
Unos ojos rojos se notaban desde dentro, mirando hacia afuera y a la vez una risa blanca se notaba abajo de aquellos ojos color carmesí.
La oscuridad estaba desapareciendo poco a poco mientras que se notó la silueta completa de una mujer que saludo levemente.
- Que hacen allá entren de una buena vez- una voz seria.
Nathaniel no lo podía creer a quien veía, una mujer de cabellos plateados, piel blanca y unos hermosos ojos rojos, al igual que Dylan y Esmeralda, estaban atonicos mirando hacia la puerta.
La puerta se cerró levemente, dejándole por fuera de aquella mansión. Hikari y Makoto se miraron y luego miraron a los demás, tenían una duda así que miraron al Nathaniel.
Hikari: Quien es esa mujer?
Nathaniel les miro atónico y sonrió algo nostálgico.
Nathaniel: Es mi esposa pero ella murió hace unos años...
Hikari miro a su hermano y luego los dos caminaron hacia la puerta, abrieron lentamente la entrada y se adentraron dentro de la gran casa.
Dylan, Nathaniel y Esmeralda caminaron atrás de ellos, al entrar no había nadie, ni siquiera un mínimo ruido se escuchaba. Todos estaban sorprendido por el suceso y más cuando no sabía que había pasado.
Estaban intentando tranquilizar se todos en la sala hablando, pero Makoto se levantó para ir a tomar agua camino hasta la cocina.
Las luces se apagaron, Makoto sintió un leve agarre en los pies y una pequeña risa en forma de susurro cerca de sus oídos. Makoto se estremeció por un momento y luego soltó un grito, al ser jalado hacia una habitación.
Los demás al escuchar el grito se levantaron de sus asientos corriendo donde estaba Makoto pero no estaba en ese lugar, se miraron y sintieron suavemente un cierre de puertas arriba, pero antes un grito de Makoto pidiendo ayuda.
Todos corriendo rápidamente por las escaleras viendo como Makoto estaba temblando fuera de la puerta y con sangre.
Se acercaron levemente pero luego escucharon otro grito, se detuvieron y miraron a aquel chico cubierto de sangre sonriendo muy feliz.
-Vengan~ vengan~ ja, ja, ja!-
Todos gritaron al verlo y luego miraron con miedo, pero una voz débil los llamaba.
Makoto: Vengan que hacen allá?
Abrieron los ojos como platos, estaban sorprendidos y se miraron entre ellos, luego miraron a Makoto ladear levemente la cabeza.
Makoto: Paso algo?
Hikari: Hermano... ¿Que edad tengo?
Makoto le miro extrañado.
Makoto: Tienes 12 años … ¿Por qué preguntas?
Hikari suspiro y bajo las escaleras para abrazarlo.
Hikari: Estás bien?
Makoto sonrió suavemente y asintió.
Los demás bajaron las escaleras.
Dylan: Te oímos gritar hace un rato...
Makoto: Ah eso lo siento mucho.
Makoto se disculpó y luego les contó lo que había pasado, pero al ser encerrado en aquella habitación no dijo nada. Miro el techo levemente y luego abrazo a su hermana.
Estaba asustado pero no lo hacía notar solo miro hacia aquella puerta, suspiro suavemente y luego caminaron hacia la sala.
Todos estaba sorprendidos pero no entendían nada de lo que había pasado, pero si algo paranormal les había pasado en su propia casa por primera vez.
Después de unas horas, comenzaron a irse a sus habitaciones, Makoto abrazo a su hermana menor por un momento y le susurro levemente.
Hikari se puso a llorar suavemente, abrazo fuerte a su hermano haciendo que este se quejara un poco, estaba herido su ropa tenía leves manchas de sangre.
Dylan se percató y le quitó el suéter que traía puesto adelante de todos, pequeños rasguños y cortes se vieron. Esmeralda fue corriendo a la cocina para luego traer un pequeño botiquín de emergencia.
Curaron gentilmente las heridas de Makoto y todos estaban sorprendidos porque era raro. Ya que el menor solo se quejaba suavemente por el dolor, les miraba con una sonrisa cálida.
Makoto bajo su cabeza mirando el piso pero Dylan se acercó a él y poso un suave beso en sus labios.
Dylan: Tranquilo cariño.
Makoto le abrazo lo más fuerte que podía, unas pequeñas lágrimas brotaban de sus ojos.
Makoto: Lo siento, lo siento.
Dylan: Shh tranquilo cariño.
Hikari aún lloraba mientras era abrazada por Esperarla, y Nathaniel estaba pensando demasiado. Observando a los jóvenes.
Regresaron a la sala, se acomodaron y poco a poco se quedaban dormidos. Era demasiado tarde y demasiado lío habían pasado, todo quedaron completamente dormidos.
Risas y mas risas en toda la casa se escuchan pero ninguno estaban escuchando, se abrazaron dormidos en un solo lugar. Una alfombra suave era su cama en ese mismísimo instante.
hará*