NovelToon NovelToon
LOS RUTTHERFORD- FREDERIK RUTTHERFORD

LOS RUTTHERFORD- FREDERIK RUTTHERFORD

Status: En proceso
Genre:Romance / CEO / Mafia / Chico Malo
Popularitas:4.8k
Nilai: 5
nombre de autor: Gabriela Kienzler

Elizabeth es una mujer de veinte años con condiciones de vida precarias, luchando por sugir en una sociedad empeñada a darle la cara difícil de la moneda, trabaja y estudia en la universidad, tiene ua familia numerosa, su madre y sus hermanos, su padre los abandono cuando eran pequeños, por ende su madre siempre fue su apoyo.

Las cosas comienzan a ponerse mas difíciles para Elizabeth cuando una tarde normal de su dia a dia es secuestrada por unos traficantes, luego es llevada a una gran subasta realizada solo para los grandes magnates de la alta sociedad, con ella siendo la pieza principal de dicho evento. Su comprador resulta ser un hombre alto, de cuerpo fornido, quien promete liberarla luego de que esta le pague el costo de su compra con intereses incluidos, mientras el será su dueño.

NovelToon tiene autorización de Gabriela Kienzler para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

CAPITULO 5

Elizabeth sentía un gran dolor al tratar de mover su cuerpo, su garganta suplicaba por tener agua fresca recorrer desde su boca hasta su esófago, nunca había tenido tanta sed, los ojos le dolían y su cabeza también. La ropa que llevaba puesta era de hombre, la camisa era enorme y el short no le ajustaba mucho.

¿Puedes levantarte? - le pregunta el hombre a su lado.

-          No lo sé, siento el cuerpo pesado y me duele mover la más mínima articulación- le responde, aunque su voz era ronca y dolía pronunciar cada palabra.

-          Debe ser efecto secundario de la toxina - le dice mientras se levanta - iré a traerte algo para desayunar – quizás la ropa le pertenecía a ese hombre.

-          Esta ropa – le dice agarrando la camisa

-          Ah, lo siento, sé que te queda grande – el hombre sonriendo – ya mandé a que se te comprara ropa de mujer y de tu talla – el hombre comienza a caminar hacia a puerta.

-          Espera - le dice deteniendo al hombre- primero quisiera saber, ¿Dónde estoy?, ¿Cómo llegue aquí?, y ¿Quién es usted? - en su mente rondaban un sin fin de preguntas, pero esas eran las principales.

-          Responderé todas tus preguntas luego de que comas algo- el hombre sale de la habitación, al cabo de unos minutos vuelve con una venderá de comida, la coloca sobre el regazo de Elizabeth y vuelve a sentarse en el sofá al lado de la cama- espero que te guste, mande a prepararte una comida balanceada que te ayudara a reponer energía – sonríe

-          La verdad es, que no tengo apetito- le responde mirando la bandeja- no quiero ser grosera con usted, pero...

-          Entiendo que te sientas inquieta y llena de incertidumbre en este momento - se reclina y toma la mano de la mujer - pero no vas a remediarlo matándote de hambre, al contrario, te verás debilitada y pronto morirás- la mira fijamente – tu cuerpo ya está débil – Elizabeth sintió como la mirada del hombre lograba penetrar hasta los más profundo de su ser.

-          en, comeré – toma el tenedor y comienza a comer – lamento causarle tantas molestias.

-          Tranquila – le sonríe – solo estoy devolviendo un favor que debía.

-          Quisiera poder ir a casa con mi familia – le dice mirando el plato de comida.

-          Claro, te llevare cuando me lo pidas – le responde.

-          Muchas gracias – le sonríe animándose – quisiera que pudiera darme su número – le dice luego de un momento de silencio – quiero agradecerle por toda su ayuda.

-          Claro, te daré mi numero – le responde inclinándose hacia el frente – pero no entiendo porque dices que perderás la comunicación conmigo si no tienes mi número.

-          Es que me iré a casa y no lo vería más, además no sabría cómo localizarlo ya que no sé quién es usted o su nombre - lo mira de forma amigable.

-          Creo que hubo un error en esta conversación – le dice de forma seria – dije claramente que podías ir a la casa de tu familia y te llevaría cuando quisieras, pero nunca dije que podías quedarte allí o marcharte de aquí – la mira fijamente mientras el rostro de la mujer se mostraba de forma asustada.

-          No, espere – no sabía que estaba sucediendo, la habían raptado, despertó en ese lugar extraño, quizás ¿ese hombre era su captor?, rápidamente se levantó de la silla y corrió hacia la puerta de salida, pero fue en vano, dos hombres fornidos con trajes le impidieron el paso – por favor, por favor – cae al suelo de rodillas – no puede hacerme esto, yo – comienza a desesperarse, estaba atrapada con ese hombre y no sabía cómo salir de allí.

-          Cálmate Elizabeth – le dice el hombre acercándose a ella.

-          ¡No! – grita al ver al hombre cerca de ella – no se me acerque – comienza a gatear de espaldas – por favor, no me haga daño – quería llorar

-          No te hare daño – le responde el hombre tratando de acercarse lentamente – te lo dije desde el principio, estas a salvo – su voz era dulce

-          Entonces, si no quiere hacerme daño ¿Por qué me rapto? – le dice mientras retrocede con cada paso hacia adelante que daba el hombre, hasta que llego a la pared quedando acorralada - ¿Por qué no puedo irme?, ¿Qué me quiere hacer?

-          Necesito que te calmes – el hombre camino hasta estar a un paso de Elizabeth, luego se agacho hasta estar cerca de ella – no te hare daño, de eso puedes estar segura – intenta acariciar su mejilla, pero la mujer lo esquiva – no tienes por qué temerme – su mirada mostraba dolor.

-          Déjeme ir, si es verdad lo que dice – le dice mirando fijamente al hombre – por favor, deje que me vaya.

-          Eso es algo que no puedo hacer – quisiera poder cumplir con la petición de la mujer, pero temía en dejarla ir de nuevo con la persona que la vendió, al menos no hasta saber toda la verdad y estar seguro de que no volverá a ocurrir, quizás si la deja ir ahora, la próxima vez no toque con la suerte de conseguirla y sea demasiado tarde, no quería correr tal riesgo, pero decirle la verdad sobre su madre era un dolor que le estaba evitando, al menos por el momento.

-          Usted juega a ser bueno y luego el villano – le dice con furia en sus ojos - ¿Qué derecho tiene de mantenerme aquí encerrada y luego decir que debo estar tranquila por lo que está haciendo? - su voz era de odio hacia el hombre.

-          No quería recurrir a esto, pero no me dejas más opción – chasquea los dedos y uno de los hombres de la puerta le entrega un documento – Esto es lo que me da el derecho sobre ti – le entrega los documentos y Elizabeth los toma.

-          ¿Qué es esto? – dice mientras los lee.

-          Eso es un documento de compra y venta, en el cual se estipula la compra de la esclava número uno, cinco, cero, dos – le comienza a explicar mientras Elizabeth leía cada palabra del contrato con desesperación -  en pocas palabras, yo te compre- Elizabeth levanta la mirada rápidamente de forma asustada

-          No, no, no, no – comenzó a desesperarse – eso no es verdad, ¿Cómo pueden hacer eso?, además no estamos en tiempo de esclavitud, no tienen derecho alguno sobre mi libertad – las lágrimas brotaban de sus ojos mientras su cerebro trataba de darle un sentido a todo y defender su posición.

-          Este negocio es de esa forma Elizabeth – le dice de forma calmada viéndola a los ojos – desde el momento en que fuiste raptada tu vida ya no te pertenecía.

-          ¿Quién lo decide?, ¿Qué les da el derecho de venderme y a usted de comprarme?

-          Te dejaron vivir – le dice y la mujer se queda en silencio mirándolo – desde tu rapto, pudieron abrirte, sacarte los órganos y matarte, pero en su lugar te dejaron viva para la subasta, dándoles el derecho de tu vida – por mi parte, yo pague una gran suma de dinero para que estés ahora aquí, fuera de ese lugar – se acerca más a la mujer casi a centímetros – lo que me convierte en tu dueño – le susurra – mi nombre es Frederick Ruttherford, jefe de una de las más grandes mafias y a partir de este momento el dueño de tu vida.

1
HILDA BENÍTEZ ALFONSO
me encanta Natalia esa es la actitud
Teresa Perez
excelente autora como seguiste Autora
Rocio Raymundo
Franchesca eso te paso por mala amiga
HILDA BENÍTEZ ALFONSO
me gusta esta muy buena sin tanto rodeo , ller es facil
Elizabeth Matheus
/Smile/
Elizabeth Matheus
muy buena novela 😄 felicidades pero quiero más capítulos
yari gabi: hola, gracias por el apoyo, subo capítulo todos los dias
total 1 replies
Alba Victoria
Es muy interesante y con los conflictos que afectan a nuestra sociedad.
Rocio Raymundo
ojalá puedan decirse en algún momento todo lo que sienten en verdad ambos
Aleida Rojas
Bueno
Rocio Raymundo
fedrerick arriésgate a amar a elizabeth ella está enamorada de ti realmente
Rocio Raymundo
Franchesca calenturienta quería aprovecharse de Frederick dormido
Rocio Raymundo
si Rebeca te besa que quieres que piense elizabeth haber dime
Rocio Raymundo
está borrachita Pero le dijo sus sentimientos el veremos que pasa
Rocio Raymundo
Elizabeth está enamorada Pero no seda cuenta que está celosa que pasara
Rocio Raymundo
estás celosa es eso
Rocio Raymundo
más capitulos de infarto. cada capítulo
Rocio Raymundo
que bueno que fue a rescatarla
Rocio Raymundo
pobre elizabeth a hora si sufrirá de verdad
Rocio Raymundo
que opción más le queda
Ismerai Montes Chavez
no pues que opciones , o con viejos o con el , que no hay tercera
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play