TUS CURVAS, MI PERDICIÓN

Son las 10 de la mañana, no tengo resaca, afortunadamente no bebimos nada muy fuerte, sino estaría del diablo el malestar.

Me organizo con un pequeño short de jean, una blusita ombliguera, cosa que deja mi hermosa y pequeña cintura a la vista y por debajo mi vestido de baño de 2 piezas. Imagino que hoy solo seremos nosotras disfrutando de un delicioso sol de verano para broncearme y poder entrar a trabajar el lunes con las energías recargadas. Al parecer soy la primera en levantarme y tengo un delicioso desayuno en silencio dentro de la cocina, cuando de pronto vienen una chorreante Alina y Haley abrazándome y diciendo que me habían dejado descansar, pero que ya era hora de ir a la piscina. Adiós desayuno en paz, hola alocadas mujeres. está bien vamos.

Haley: ¿Te pusiste el vestido de baño no es asi?

Si, si me lo coloqué, contesté mientras era llevada de arrastras hasta la piscina.

Alina: Si porque Bastian está tirando a todo mundo al agua ¡anden con vestido de baño o no!

¿Queeeee? dije tratando de frenar el paso, cosa que no logré... nooooooo, yo no me voy a bañar ni a desvestir delante de nadie. ¿No iban a salir al club o tenian otra cosa que hacer?

Haley: No hermanita, papá decidió anoche parrillada, así que sabes bien cómo es, y sin chance a esconderte en tu habitación porque de hecho íbamos a ir por ti, pero afortunadamente te encontramos en la cocina.

Genial. Ahora no hay como zafarse de esto y mi vestido de baño hará que se les derritan los ojos a mis hermanos, y a Iván Jr y a Bastian pues imagino que se vomitará. Chicas, chicas, déjenme ir a cambiar el vestido de baño por uno enterizo.

Haley y Alina: ¡No!

Chicas, en serio déjenme cambiarme, les prometo que bajo enseguida.

Haley: Ya te dije que NO Hannah Johnson. No me hagas enojar y a nuestros papás tampoco. Además, como si no hubiesen visto carne. Si han visto huesos, ahora ¡que vean lo que es carne de primera!

Haley, yo no soy una vaca. ¿Si lo sabes? No quiero molestar a nadie, tan solo no quiero ser la razón por la que alguien pueda vomitarse.

Alina: Pues creo que aquí no habrá nadie que se valla a vomitar por ver ¡el cuerpazo que te gastas mujer!

Entre las 2 me quitaron la blusita ombliguera y las detuve. ¡Ya no más! Yo me se desnudar sola. Dije bajando el cierre del short. Cuando estaba en el proceso de quitarlo, Alina le gritó a Bastian...

Alina: Bastian, vot tvoya lyubov', idi za ney. (Bastian aquí está tu amor, ven por ella)

¿¿Que dijiste Alina?? dije sacando mis shorts de mis pies

Alina: Que llegó quien faltaba.

Se encogió de hombros y se fue. Cuando volví a levantar la mirada, venía Bastian en shorts bañadores, sin camisa, el cabello mojado revuelto y su mirada como si me fuese a insultar o no se cómo carajos leer esa mirada que me está dando. Solo se que cuando quise volver en mi ya el me llevaba cargada como si fuese una pluma al estilo princesa y me dijo nuevamente esa frase: moya lyubov y lo siguiente fue el agua y nuestros cuerpos sumergidos en la parte más honda de la piscina.

¡Bastian eres un idiota! grité cuando pude salir del agua. Y comencé a nadar hacia la orilla. Todos en el sitio parecían felices, todos menos yo. Estaba irritada, me molesta no saber que es lo que me dicen, y mientras estaba en la orilla, parecía loca repitiendo y haciendo caras a la dichosa palabra. De un momento a otro, escucho al Señor Iván llamar a su esposa y cuando lo hizo dijo: Anya moya lyubov... Y ¡bingo! asumo que esas palabras son las que están destinadas para llamar a las mujeres en Rusia. Bueno, ya no me importa, solo decido ponerme a nadar un rato, el agua está cálida y Bastian está para variar compitiendo con Andrew. decido salir del agua, y sentarme en una de las tumbonas, No le voy a hacer mente a nada que tenga que ver con Bastian Volkov. En eso siento que se sientan al lado de mi pero tengo los ojos cerrados recibiendo el sol que baña mi piel. Cuando esa voz me dice, ¿que haces? Bastian lárgate de aquí. ¿No ves que me estoy bronceando? Busca un bosque y piérdete ¿si?

Bastian: Pues lo siento, pero si me pierdo va a tener que ser contigo, y aparte de eso te vas a hacer daño en la piel, ven para aplicarte bloqueador.

NO Bastian, me quiero broncear, ¿por que no me dejas en paz sino que de repente, de la noche a la mañana te interesa que te mire, te importa mi piel y si me quemo o no me quemo?? hazme el favor de dejarme en paz.

Bastian: Y no te parece normal que alguien se preocupe por ti? Porque yo estoy sumamente preocupado por como te están mirando los hermanos de Dylan y hasta el mismo Iván. ¡Chert voz'mi, ya nenavizhu, kak oni smotryat na tebya! (maldita sea, odio como te miran)

Si me vas a hablar a mi, me haces el favor y lo haces en español, porque no entiendo absolutamente nada de lo que me dices.

Bastian: Te voy a traer la ropa para que te vistas.

¡NO, yo me quedo así y si no te gusta, pues no mires y ya! aparte yo me visto como se me da mi real y regalada gana. No necesito tu aprobación para nada en mi vida. Así que te la aguantas. Y lárgate que solo me arruinas el día.

Bastian: Ésto no se va a quedar así moya lyubov...

Ya te dije, ¡en español! De pronto se acercó a mi, tanto que pude sentir su aliento mentolado...

Bastian: Que ésto no se va a quedar así mi amor, y te voy a castigar para que aprendas a no llevarme la contraria.

¿¿¿Perdón??? ¿¿que tú qué?? ¿Quien te has creído tu que eres Bastian? Dije mientras me ponía de pie.

Bastian: Ya yo te lo dije anoche mi amor... Soy el amor de tu vida, el padre de tus hijos. De todos los hijos que quieras tener. Pues te informo que ¡¡yo contigo no quiero nada!! me estaba dando la vuelta cuando me agarró y nos tiró al agua, pero esta vez fué diferente. Cuando estábamos bajo el agua, me halo hacia él y me agarró por el cuello y me comenzó a besar, me besó de una forma en la que en vez de darme aire, me lo quitó absolutamente todo. Jamás en mi vida me habían besado de esa manera. Quise salir inmediatamente a la superficie y me agarró, me volteó y salimos juntos, yo pegada a su pecho. Todos los demás parecían estar en sus propios mundos mientras mi corazón no sabía si estaba latiendo o zumbando. Mientras trataba de zafarme del agarre, me acarició el muslo derecho, y aunque estábamos en el agua, su toque parecía una braza ardiente contra mi piel. Lo último que me dijo fué...

Bastian: No quiero que los demás vean todo ésto moya lyubov dijo mientras subía con su mano por mi cuerpo. Así que espero vallas y te pongas ropa si no quieres que salga y vuelva a hacer lo que acabo de hacer. Y la próxima juro que no seré tan respetuoso y tocaré lo que verdaderamente quiero tocar.

Mi respiración se volvió agitada, y mis latidos igualmente. ¡Púdrete Bastian!