El Renacer De Una Tirana.

Misha abrió los ojos, sintiendo un leve dolor de cabeza tras ese extraño sueño...no, no era un sueño, Roxane lo dijo, le mostraría quien es en realidad. Su experiencia se hizo melancólica, si todo eso que vio era verdad, si Roxane es Abigail, entonces entiende porque esa personalidad tan fría, no es para menos, ella sufrió desde su nacimiento, y aunque su madre la quiso, no pudo hacer casi nada por ella debido a su origen de esclava y al final, ese único amor que Abigail tuvo, lo perdió cuando su madre falleció, debido a eso, para Abigail el amor no existía.

— despertaste...¿ahora lo entiendes?, quien soy en realidad...— la voz de Roxane era suave.

Misha levantó la vista, viendo a una Roxane sentada en el sofá, era una imagen hermosa, la joven de espaldas al atardecer que se reflejaba en esa enorme ventana y resaltaba la belleza de Roxane.

Misha quedo embobado por un momento; no importa quien haya sido o sea, la mujer que tiene delante suyo, lo ha cautivado, no solo por su belleza, también esa personalidad fría le hacía sentirse atraído. Misha se puso de pie para caminar cerca de la castaña y sostiene de la barbilla a la chica para que ella levante la vista.

— Abigail...— murmuro.

Roxane se sobresalta al escuchar la voz suave y seductora del pelirrojo, así que levanto la mirada encontrándose con los ojos miel de Misha, quien la miraba como aquella vez en la cabaña y eso, la hacía sentir nerviosa con un escalofrío que recorría su cuerpo. Misha se inclina uniendo sus labios con los de Roxane en un profundo beso, Roxane cerro los ojos correspondiendo ese beso, no era la primera vez que lo besaba, pero esta vez, fue él quien inició el beso.

Misha se apoya en el respaldo del sofá, sin dejar saborear los labios de la castaña, incluso el jugueteo entre sus leng*as no tardo en hacerse presente, Misha estaba tentado demasiado, la deseaba aunque ocultara, era un hecho, esa mujer causaba estragos en su mente desde que la conoció.

Roxane desliza sus manos sobre el pecho del pelirrojo, pero cuando este siente que ella empieza a desabrochar su cinturón, romper el beso y detiene las manos apenas, y no es que no tuviera ganas de llevarla a la cama, por el contrario, lo deseaba demasiado, pero, no así, ella no merece ser solo una aventura, Roxane merece más que eso.

— no, no tendrás mi semilla, no así...si la quieres, tendrás que darme algo a cambio...— se mantiene cerca mirándola a los ojos.

—¿que quieres?, ¿dinero?,¿acciones de Empress?— pregunta.

Misha se aparta, pero toma asiento a su lado para sostenerla de la cintura y hacerla quedar sobre su regazo, era ventajoso que ella sea más pequeña que él y ligera, lo cual hacía extraño que ella tuviera mucha más fuerza que un hombre promedio. Roxane se extraña por la posición que había tomado.

— nada de eso, quiero que te quedes conmigo, quiero ser el único hombre en tu vida...y criar al bebé juntos...— responde con seguridad.

Roxane se pone de pie rápidamente ante aquella absurda petición.

— si quieres una mujer y criar hijos juntos, búscate a otra, yo buscaré a otro donador...— responde algo irritada.

Misha la toma de la mano poniéndose de pie para así sujetarla de la cintura.— si otro hombre se acerca a ti, le meto una bala en la cabeza.

— no creo que puedas acabar con todos los hombres del mundo.— responde la castaña.

— puedo y lo haré...tú me buscaste primero, ahora no te puedes librar de mí.— sonríe ladino.

Roxane toma el arma de Misha y le apunta en la frente.— claro que puedo, solo jalando el gatillo.

— hazlo, de lo contrario, serás mía por siempre.— amenaza.

Roxane presiona el cañón del arma en la frente de Misha, pero duda en apretar el gatillo, incluso su mano tiembla un poco del solo pensar que tirando de ese gatillo ya no podría ver a ese hombre. Ante esa duda, Misha le quita el arma y la carga sobre su hombro pese a la queja de la chica y la lleva hasta la alcoba donde la tira sobre la cama; Roxane se retuerce un poco y al levantar la vista, Misha se estaba quitando el saco, corbata y camisa, dejando ver su bien formado cuerpo, Roxane se queda mirando, lo cual es una buena señal para Misha, así que apoya una rodilla sobre el colchón tomando las manos de Roxane para hacer que estas acaricien su abdomen, la chica se sobresalta al sentir la firmeza de esa zona, mientras que Misha deja escapar un suspiro ante el cosquilleo qué siente por el roce de las suaves mano de Roxane.

— Abigail...— le suelta las manos.

Roxane se sentía extraña cuando le llamaba por su antiguo nombre, pero un extraño sentimiento hacia presión en su pecho cuando lo escucha con la voz de Misha.

— si no me detienes ahora, serás completamente mía, no te librarás de mi a menos que de verdad tires del gatillo.— le advierte.

Roxane no dijo nada, así que Misha se inclino para unirse nuevamente en un apasionante beso, mientras que sus manos se apoyan sobre la cama. Roxane sentía su cuerpo excitarse por la cercanía del pelirrojo y por esos besos tan apasionados. Repentinamente se sobresalta al sentir que la mano de Misha amasa su sen* por encima de la ropa, pero no era para nada repulsivo, por el contario, esa sensación le gustaba.

Al notar que Roxane no lo rechaza, continúa con lo suyo, deslizando su mano hasta la pierna de la castaña, subiendo la falda del vestido para tocar directamente la piel de esa zona, subiendo hasta tener un leve roce de sus ded*s sobre la ropa íntima, causando que Roxane se remueva un poco y el beso se rompa. Misha observa el rostro de Roxane e introduce la mano dentro de la ropa íntima tocando directamente con delicadeza esos suaves pliegues. Roxane deja escapar un leve jadeo al estremecerse su cuerpo por ese simple roce.

— que linda reacción...— sonríe ladino.— quiero escucharte gemir para mí...

Roxane solo le mira con molestia, pero le jala del cuello para morderle el labio inferior hasta hacerlo sangrar, Misha se queja pero se relame el labio. Esa reacción solo le hace pensar que la acaba de hacer enojar y era divertido, así que se apresura a retirar el vestido de la chica. Roxane permite esto y Misha aprovecha atrapando entre sus labios los sen*s de la chica, los lame y ch*pa de forma alterna, mientras que Roxane se aferra al cabello del pelirrojo dejando salir un par de jadeos.

Roxane siente un cosquilleo recorrer su cuerpo cada vez que el pelirrojo usa su lengu* sobre sus sen*s, mientras que sus ded*s siguen un jugueteo entre sus piernas, Misha puede sentir la humedad debido a su excitación, así que no demora en introducir un ded*, sintiendo el cual mueve en círculos dentro de ella hasta lograr introducir otro, Roxane se remueve ante la sensación placentera que le estaba causando con cada acto.

Misha se aparta de sus sen*s, para acomodarse entre sus piernas, estaba ansioso y al sentir que ella estaba igual de excitada, quería pasar a lo siguiente, liberando su evidente dureza. Roxane sonríe ladina al observar su tamaño, al parecer no era solo un hombre con buenos genes, también estaba bien dotado. La castaña no dudo en tomarlo entre sus manos frotando de arriba hacía abajo causando que Misha se estremezca.

— Abigail...— una voz excitada dejo escapar un leve jadeo con el nombre antiguo de la castaña.

Roxane se acerco para besar y lamer el abdomen del pelirrojo, mordiendo a ratos la piel para dejar un par de marcas y esto, solo excitaba más a Misha, haciendo que se ponga ansioso. Misha optó por aparta a Roxane y acomodar bien entre sus piernas empujando su dureza dentro de ella. Roxane se sobresalta dejando salir un leve quejido por el dolor que sentía, Misha continuó, hasta estar dentro por completo respirando con excitacion al sentirse completamente envuelto en ese cálido y suave interior. Sujeto de la cintura a la castaña comenzando a moverse, un vaivén lento, observando las reacciones de Roxane y ella respiraba agitada, sintiendo como el dolor poco a poco se volvía solo oleadas de placer en cada estocada.

Misha comenzó un movimiento más brusco, con estocadas profundas, disfrutando del placer que recorría su cuerpo al sentir como el ese interior le apretaba de manera exquisita. Roxane también se había dejado llevar por el placer, pero no era solo eso, sentía una especie de conexión con aquel hombre, la forma en la que la mirada causaba una extraña sensación que llenaba su cuerpo de una emoción que nunca antes había sentido. Las estocadas continuaron, una y otras vez hasta que ambos alcanzaron el clím*x, Roxane sintió su cuerpo estremecer, mientras la semilla de Misha llenaba su interior y este dejaba escapar un jadeo al sentir como su cuerpo alcanzaba el extasis.

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