Ocultando Mi Alma (Los Morozova II)

Camila entro corriendo al hospital, sentia el. corazon fuera del pecho por la ultima llamada de Patrick.

No habia tenidp mucha suerte y el transito la habia hecho demorar mas de lo normal, parecia que cualquier cosa detenía el taxi, solo entrego el dinero al conductor y no espero la devolución de la diferencia. Queria llegar lo mas rapido posible al lado de Maksim.

Paso todas las puertas rapidamente, ya era conocida como la movia del director así que nadie la detuvo.

Sintio por un momento todo paso en camara lenta, cuando camino delante de la pared de vidrio que daba hacia la sala de las incubadoras, donde vio varias enfermeras, a Patrick y el jefe de pediatría al lado de la incubadoras de su bebé.

-¿Patrick? - susurro Camila sin aliento, no necesitaba decir mas.

-Tranquila, fue un susto, pero aqui el doctor James estabilizó Maksim - explicó Patrick abrazandola y besando su frente para calmarla.

-Es una infección en la sangre, que nos altero el corazón, lo estabilizamos lo mas rapido posible - comenzo el doctor James a dar el informe - a partir de ahora le sera dado antibióticos y una transfusión de sangre, le haremos un examende del líquido cefalorraquídeo, buscando si la bacteria allí. Lo bueno es que nuestro pequeño luchador esta semana llego pesar un kilo ochocientos gramos y midiendo cuarenta y nueve centímetros.

-Que bueno que Maksim este bien, ya esta proximo a los dos kilos - dijo Camila con lagrimas en los ojos, observando como las enfermeras arreglaban todos los aparatos respiratorios y revisaban al bebé.

-Si, ya casi, solo que uno de los aspectos negativos de la infección es que puede perder un poco de peso, espero que no sea así y que se recupere lo mas rapido posible, por ahora cancelaremos el metodo canguro, en cuanto se estabilice volveremos, tranquila - el doctor James le dio una palmada en el hombro tranquilizandola y le sonrió antes de retirarse para darle privacidad a la pareja

-Disculpa - Patrick la volvió a abrazar- fue solo un pequeño susto, pero el es fuerte.

-No te disculpes Patrick, agradezco que siemppre me informes de todo de mi pequeño, ahora siento que él es la luz de mi vida.

-Si, por supuesto - acepto Patrick con desgana, recordando las palabras de Natalia, no le habia comentado nada a Camila sobre la visita de la señora.

Camila se separo de Patrick y se acerco a la incubadora donde su pequeño bebe se encontraba acostado, aun mantenia el tubo de respiración y el de alimentación en su rostro. Las enfermera le trajeron la bata azul que se colocaba siempre que estaba allí y se la coloco rapidamente.

Metio su mano en los dos agujeros y tomo las pequeñas manos de su bebe, eran tan pequeñas y delicadas. Penso en el gran hombre que seria algun dia y eso le lleno los ojos de lagrimas, ¿como habia pensado en la locura de dar a su hijo?

-Le diste un gran susto a mami - le susurro Camila a su bebe que apretaba ligeramente su dedo, miro hacia atras y Patrick estaba alejado observando, le habia dado su privacidad, Camila sonrió con ternura y continuo hablando- estas mas grande que la semana pasada mi pequeño, hace unos días tu tio paso por la casa y le dio a mami un susto, creo que ustedes son unos expertos en eso Maksim, no puedo decir que comento algo de ti, no esta informado de nada y no se como el fuera coml tío... tu papá esta haciendo su vida, asi como nosotros la nuestra, sabes tengo el presentimiento de que tu papá te hubiera amado y quizas hubiera sido diferente contigo, pero no me puedo guiar por mis presentimientos, no son miy buenos Maksi, lo unico que sé, es que te amo hijo y prometo siempre estar contigo.

Camilo estuvo mas un tiempo con Maksim sin decirle mas, él se movia un poco y ella le tocaba las mejillas. Ya tenia mas fuerza ya que movia mas sus brazos y piernas. Pero cuando Camila le hablaba se quedaba quieto, prestando atención a la dulce voz de su madre.

-Cam - Patrick se acerco - podemos estar felices piede ser que en cuatro semanas mas o menos Maksim vaya para casa, solo un poco mas y alcanzara maa de dos kilos, dare la autorización de alta luego de los dos kilos trecientos gramos, que el sea capaz de alimentarse por succión y mantenga su temperatura, como fue un bebé tan pequeño sere muy detallista antes de darle el alta, que yo sepa que no te vas preocupar tanto, al salir del hospital.

-Estoy ansiosa por llevarlo a casa, siento que mi vida esta por cambiar en muy poco tiempo y se que sera difícil pero me siento contenta - Camila miro a su bebé y saco las manos, Maksim empezó a dar patadas, revoltado porque su mamá se iba - prometo volver mañana mi gran Maksim, mami te ama.

-Vamos creo que hoy en la tarde llegaron mas cosas para el cuarto de Maksim, deberias comenzar a preparar todo - Patrick la ayudo a quitarse la bata del hospital y la tomo por cintura.

Camila sentia que cada vez que salia sin su bebé, parecía sentia un vacio enorme, ganas de llorar y patalear por llevárselo, pero sabia que era solo cuestio de tiempo.

-Cam, se que prometi darte tu tiempo hasta que tomaras tu decisión - dijo Patrick mientras caminaban hacia el auto - pero debes de saber, que te has vuelto una gran parte en mi vida, en tan poco tiempo, si te quedas conmigo, puedes quedarte en casa cuidando de Maksim, sabes que los primeros meses fuera de casa son muy delicados, él va a necesitar cien por ciento de tus cuidados.

-Si, tan bien he pensado mucho sobre eso, pero tengo miedo sobre quedarme aqui en nueva York, Nicolai podria saber del bebé y quitarmelo - Camila nuevamente sentia aquella presión por parte de Patrick, era muy incómodo.

- Podemos viajar dos meses para Grecia, es un pais muy tranquilo y tiene un clima caliente, perfecto para Maksim. Alli también podriamos pasar un tiempo los dos conocernos un poco mas, ya es hora de que me tome unas vacaciones, ni se que es quedarme tranquilo - Patrick sonrió y saco las llaves del auto

-Seria algo grandioso - Camila dio una media sonrisa y entro al auto.

-Si, te imaginas a Maksim creciendo cerca del mar, seria grandioso - Patrick comenzo a conducir pero parecia que sus ojos solo se desviaban a los hinchados pechos de Camila que estaban listos para lactar, la camisa daba una imagen amplia de la piel blanca.

-Creo que me gustaria lejos del mar, no soy muy fanatica del calor - Camila miro por la ventana, sabia hacia donde estaba mirando Patrick.

-Bueno también podriamos ir cerca de la ciudad, cerca de los campos de siembras, voy a investigar un poco mas - Patrick continúaba conduciendo.

-Pienso decorar la habitación con animales de la sábana - comento Camila cambiando de tema

-Me parece perfecto, podriamos colocar algunos juguetes para escalar que sean como las montañas, te imaginas a ese pequeño corriendo y divirtiéndose - Patrick estacionó el auto a un lado de la casa y se bajo rapido para abrirle la puerta a Camila.

-Eso es lo que mas deseo, quiero hacer de su cuarto algo donde se divierta, donde pueda gastar toda su energia, se que sera travieso - Camila se hecho a reír solo de pensarlo

-Exacto, él sera muy feliz y yo espero hacerlo

-Él te querra - Camila subio las escaleras de la casa y Patrick no la soltaba, cerro la puerta y caminaron para la cocina

decir aquellas palabras le fue imposible no pensar en Nicolai, ¿cuanto el hubiera querido a su hijo? ¿cuanto Maksim lo hubiera amado?, pero en ese tiempo Nicolai no la habia venido a ver ni una vez, Natalia le había dicho que él la amaba, pero sus acciones parecian decir otra cosa.

¿Cuantas veces habia soñado en verlo entrar por esa puerta para buscarla? Muchas. Cuando Alexandre habia entrado a la casa, habia pensado que era él, pero se habia decepcionado, una y otra vez. Pero habia aceptado que eso no iba pasar y si pasase, ella tendria que hacer todo lo posiboe para alejarse y alejarlo.

Saco el pollo del refrigerados, mientras Patrick lavaba algunas verduras, él le hablaba de algunas cosas pero ella estaba sumergida en sus pensamientos y solo le sonreía o acpetaba sus besos fríos.

Tocaron el timbre y ella supo que era la entrega de las cosas de Maksim.

-Yo voy, debe ser las cosas que pedi - Camila se lavó rapido las manos

-Ven rapido, sino voy a quemar alguna cosa - se burlo Patrick, por ser pesimo en la cocina

-Sera rápido, no pienso comer carbón- se burla Camila riendose - eres capaz de quemar el agua, si eso posible

-Eso dolió en mi orgullo- grito Patrick desde la cocina

-Tu orgullo es muy alto - Camila sonrió mientras que abría la puerta y se encontraba con los dos hombres de ojos verdes que la miraban con ironía

-¿Nicolai? - fue lo unico que pudo decir Camila al verlo, se veia un poco diferente, pero seguia igual de perfecto, aquella mirada fria la observaba, quizás había venido a hablar con ella.

-¿esta Patrick? - pregunto Nicolai

Aquellas palabras parecieron atravesar su corazón y hacerla decepcionar aun mas.