Cerezos De Sangre.

Luna...

Gracias a las palabras del señor Lanka que dio fin a un incómodo momento en el que está siendo yo participe, ya no sabía que más decir y solo hable sin parar rápidamente.

° Por fin llega la comida, tengo un hambre voraz.

Hijo brindemos por tu matrimonio junto a Luna.

° Pero como es posible que yo no esté presente en el brindis de mi hijo y mi futura nuera.

° Querida, pense que ya no llegabas.

Ricardo...

Se saludan con los Mackenzie y mi madre le da un abrazo a Luna, yo sin quitarle la mirada de encima a Pablo, que el muy sinvergüenza ve a Luna con deseo, pero ella ni lo mira.

¿Bueno y ya hicieron el pedido?

° Querida iré yo mismo a pedir tu plato favorito y sé que te gusta la preparación de este restaurante.

° Gracias querido.

...Ricardo......

...Después de algunos minutos nos encontramos aquí almorzando y yo con un nudo incómodo de la garganta que no se a que hora se acaba esto, pensé que seríamos los cuatro y ahora...

° Hijo, ahora si podemos hacer el brindis por su matrimonio.

Luna...

Veo que toman sus copas y se da un salud por nuestro futuro matrimonio, siento que las mejillas me duelen tanto tener que fingir una sonrisa. El almuerzo concluye y Ricardo me mira y habla...

• Bueno nos encantaría quedarnos, pero en la oficina tenemos que avanzar con la documentación y revisión de algunos papeles, si nos disculpan por favor.

° Sí la vida de los aún no casados va rápida por el trabajo, me imagino después del matrimonio, ya ni se podrán ver.

... El idiota de Pablo y su gran boca.

° No del todo Pablo, los jóvenes de ahora viven la vida acelerada igual que él ritmo de sus corazones, después de mucho tiempo se me hizo que mi único hijo se comprometa y que mejor nuera que Luna Prioste, bueno creo que ellos se tienen que marchar a la oficina ya que dejaron algunos pendientes, yo luego los alcanzó.

¿Te paso las llaves o tomas un taxi ?

• Me tomo un taxi, ya que mi auto se quedó en la empresa.

Bueno nos disculpan, nosotros nos retiramos, adiós señor Mackenzie y ... Pablo.

• Sí, he nos vamos. Señora Sofía, señores Mackenzie.

° Bueno yo señor no he, solo tengo un año más que Ricardo, no creo que sea tan viejo. (Risas)

• Ho si lo olvidaba, tenemos casi la misma edad. Bueno Adiós.

Luna...

Ricardo toma mi mano, y salimos, cuando atravesamos la puerta, por fin siento que puedo respirar con libertad.

• ¿Luna estás bien?

• Sí... Solo algo cansada.

• En unos minutos llegará el taxi.

... Veo que ella observa su teléfono y yo solo la miro a ella, y me culpo por los sentimientos que se están formando dentro de mi conforme va pasando el tiempo. Hasta ahora no la he visto sonreír, pienso que me debe odiar, por el simple hecho de que debe casarse conmigo. El taxi llega y subo después de ella, el silencio vuelve a primar, son casi diez minutos hasta la empresa y así nos hemos mantenido sin decir nada.

Llegamos y salgo primero, le extiendo mi mano para que baje.

Entramos y ella es la primera en entrar al ascensor, justo está Luis Casas, saludamos y vamos los tres hasta que en piso siete sube Lorena. Me saluda, pero sé comporta de una manera indiscreta como ella solo puede hacerlo, esta delante de mi y cuando el ascensor llega al piso 17, se le caen algunas hojas y al recogerlo coloca su trasero sobre mis pantalones. Luna sale apresurada y cierra la puerta de su oficina. Luis mira con incomodidad y sale también él.

° Bueno ahora estamos solos, que tal y si me invitas un café.

• Yo... Creo que tú y yo debemos conversar, pero no aquí en la empresa, acepto ese café.

° Bueno entonces tomo mi bolso y salimos.

• Claro.

... Vuelvo a presionar el piso uno y entra Lorena, cuando las puertas se cierran, ella me presiona sus labios con los míos y me besa, yo le sigo el juego hasta que mi hombría se hace notoria, ella con su mano roza por encima de mis pantalones y eso me prende.

Luego la dejo y me acomodó el cabello, vaya la estupidez que acabo de hacer.

° Fue agradable sentir nuevamente tus labios y recordar el sabor de ellos. Que dices si está noche te espero en mi departamento y así recordamos nuestros tiempos.

• Creo que eso no puede pasar.

Las puertas del ascensor se abren y yo voy al cafetin con ella.

° Yo pensé... Yo pensé que iríamos a tomar un café fuera de la empresa.

• No. No tengo suficiente tiempo, si acepte tomar ese café, es para aclarar algunas cosas.

Vamos sentemos por favor.

Como ya sabes me caso en algunos días, conoces a mi futura esposa, por lo tanto, te pido que mantengas tu postura.

° ... Y cuál de mis poses quieres que conserve para ti.

• No me refiero a eso, tú entiendes que ya no puede pasar nada entre nosotros, solo fue un rato de sexo y nada más y eso tú lo sabías desde antes.

° Crees a caso que casándose serás hombre de una sola mujer, pues yo no. No te mientas a ti mismo si sabes que el gran Ricardo Lanka hijo, es un macho que lleva a distintas mujeres a su cama de hotel.

• Tratare de no hacerlo.

° Ya que te vas a casar, pues yo te puedo arreglar una despedida de soltera privada, dime la hora y voy al hotel de siempre para dejarte listo cuando disfrutes de tu noche de boda.

Ricardo...

Me es imposible poder hablar con ella, ya que no acepta jamás un no.