Hay alguna edad para amar? la edad importa?
Vamos a descubrir la historia de Paul Sheridan y Rosmery Sáenz, dos personas con historias similares, hijos mayores, nietos y una edad en donde es muy poco creíble que puedan volver a enamorarse.
Descubramos juntos el final de la historia de estos dos personajes.
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Un ataque
📱 buenos días, madre, ¿cómo estás? cómo te va en el nuevo trabajo
📱 buen día, hijo, estoy bien, me va muy bien
📱 es más tranquilo ese trabajo para ti madre, no tienes que esforzarte tanto.
📱 así es, pero cuéntame cómo están las niñas, y tu esposa? ¿Que sabes de tus hermanos?
📱 madre. Iker hizo silencio por un momento y supe que algo pasa.
📱sucede algo, hijo?
📱 la mujer de papá está embarazada. Un silencio se escuchó de ambas partes, mis lágrimas comenzaron a salir, se me hizo un nudo en la garganta, el padre de mis hijos hace mucho comenzó a hacer su vida, tanto así que ahora después de tantos años va a tener un hijo con su mujer
📱hijo debo ir a trabajar, que te parece si hablamos después, no quiero llegar tarde. Mi hijo y yo quedamos en hablar más tarde, rápidamente seco mis lágrimas y salgo del departamento, Cris el chófer me está esperando.
Durante el camino mis pensamientos eran sobre los años vividos al lado del padre de mis hijos, soy un poco tonta al seguir pensando en él, debo dar vuelta a la página, definitivamente debo dejar todo atrás, disfrutar de mis nietos, si él pudo olvidarme y rehacer su vida, yo debo dejar todo atrás.
Comencé a preparar el desayuno, ya que por Cris, supe que Paul está en su habitación.
_ buenos días Rosmery, cómo estás hoy?
_ bien día, Paul, estoy bien gracias.
_ pasa algo?
_ no, porque lo dices.
_ no se te veo diferente, como que tu mirada ha cambiado, está triste.
_ no pasa nada
_ cuando gustes contarme, aquí estaré para escucharte. Yo asiento y voy a servir el desayuno, me asombra como este hombre puede darse cuenta de mi estado de ánimo con tan solo mirarme.
Hace muchos meses que no veo al padre de mis hijos, para ser exactos, desde que salí de la que un día fue nuestro hogar, el dolor de su traición fue tan grande que no quise quedarme en ese lugar.
Lloré tanto aquel día, me deprimí, la verdad es que sufrí, pero aún más cuando fui a firmar el divorcio, ya no quiero sufrir, no deseo seguir llorando por algo que claramente no tiene remedio.
Mi hijo Iker fue a visitarme al departamento, en cuanto llegó se arrojó a mis brazos. Nunca olvido esos abrazos que mi hijo me daba al volver de clases, siempre cariñoso, responsable y muy servicial, siempre ha mostrado ese cariño único por mí.
_ que pasa hijo?
_ me imagino que la noticia del hijo de papá, te tiene mal y se que mis abrazos te dan consuelo, siempre me lo ha dicho
_ gracias hijo, sí, tus abrazos me dan consuelo y mucha paz, ven siéntate.
_ lo de papá me desconcierta un poco, pero es su vida, me incomoda un poco, pero aceptaré a mi nuevo hermano, quien diría que a mis cuarenta años tendría un hermano o hermana.
_ claro que debes quererlo, será tu hermano.
_ y tu? ¿Te sientes bien?
_ hijo, no me esperaba tal noticia, creí que esa relación no duraría, pero ya vez llevan tanto tiempo juntos que hasta un bebé viene en camino y no te niego que me duele mucho, siempre creí que nuestro amor sería hasta que la muerte nos separe, pero tu padre hace muchos años que no pensó eso, antes ya hubo infidelidad y era de esperarse que esto terminaría así, yo soy la que debo dejar el pasado atrás y seguir con mi vida.
_ tienes toda la razón madre, sabes que cuentas conmigo para lo que sea, porque no sales de compras o terminas tus estudios,
_ de hecho estoy estudiando online, me va bien en mi nuevo trabajo.
_ si tanto que mi jefe no deja hablar tanto de ti, Rosmery esto, Rosmery lo otro, me gusta como cocina bla, bla, bla. Me estoy poniendo celoso. Mi hijo sonríe y yo me pongo roja de vergüenza.
_ hijo, no exageres.
_ no lo hago madre, si vieras la cara de tonto que pone, como si estuviera enamorado.
_ alto ahí, como que cara de tonto enamorado, no digas esas cosas, tu jefe solo habla bien de mí, le caigo bien y él también me cae muy bien.
_ ahora eres tú la que pone cara de tonta enamorada.
_ hijo ya para con eso, ahora que ya me has hecho sentir bien, me daré una ducha para dormir.
_ me estás echando de tu casa madre?
_ no hijo, claro que no, solo evito que sigas con el tema de tu tonto enamorado, jefe
_ jajaja, está bien, Guadalupe vendrá a quedarse unos días contigo, estos días tendrá tiempo libre en su trabajo y le he pedido que se quede contigo. Muy temprano llegó mi querida nieta.
Todos mis nietos me quieren, pero Guadalupe, es como mi hijo Iker, tienen un gran amor por mí.
_ hola abuelita, buen día,
_ pasa Lupe, me termino de arreglar y me voy al trabajo, quedas en tu casa
_ no abuelita, como crees, yo iré contigo, así hacemos el trabajo mucho más rápido y salimos antes.
No me quedó de otra que llevármela, no sé si Paul este de acuerdo de llevar a alguien a su departamento, pero le pediré que por estos días le permita a mi nieta ir a ayudarme, es tan testaruda que sé que insistirá para ir conmigo.
Cuando vamos de camino al departamento un auto impacta la parte trasera del auto en el que viajamos.
_ nos están siguiendo, sujétensen fuerte.
_ que rayos. Dice mi nieta.
_ señora Rosmery, llame al señor Paul. Rápidamente, saco mi celular y le marco a Paul.
_ señor, nos están siguiendo y le han dado al auto, Cris está haciendo lo posible por perderlos
_ que que? Envíame la ubicación, enviaré a mi gente de seguridad.
Todo parecía descontrolarse, Cris aceleraba el auto, pero fue imposible, el otro auto volvió a golpearnos, mi nieta me sujeta fuerte de la mano, en eso vemos que dos camionetas,color negr@ se le acercan al auto, tanto que lo hacen frenar.
_ son la gente de seguridad del señor Paul, estaremos bien. Yo respiro aliviada, pero me pregunto, quien quería hacernos daño, por lo menos no tengo enemigos, mi nieta tampoco, bueno eso creo.