Él es un CEO renombrado, visto por las mujeres como un canalla, está enfocado y siempre consigue todo lo que quiere. ¿Será verdad? Ella, una joven carismática e impetuosa, muy inteligente y por encima de todo muy orgullosa, ¿cederá ante los caprichos de su nuevo jefe?
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Capítulo 7 A Festa
Hunter Andrew Johnson...
Soy un hombre muy enfocado en mis objetivos, por ese motivo no admito ningún tipo de relación en el trabajo.
Cometí el error de involucrarme con Madisson, mi última secretaria, involucrarme no fue la palabra correcta, salí con ella algunas veces y siempre dejé bien claro que no quería nada serio. Como era su jefe, no quería complicar mi situación. De cualquier forma, iba a arruinar mi vida.
Después de un tiempo, Madisson empezó a querer exigir más de mí, quería algo más serio, algo que en ese momento yo no estaba dispuesto a ofrecerle.
Mostrando un lado posesivo, empezó a llamar mucho la atención en el trabajo y como no admitía ningún tipo de relación, y peor aún, siendo ella mi empleada, los medios de comunicación se iban a cebar conmigo.
El asunto estaba escapando de mi control y si algo así se filtraba en la empresa, estaría firmando mi propia ruina.
En ese momento tenía que tomar una decisión, las cosas se estaban yendo demasiado lejos. Fue entonces cuando decidí despedirla, ya no aguantaba más los chantajes de Madisson. No soy el tipo de hombre que se deja chantajear.
Madisson se fue de mi vida y desde entonces no la he vuelto a ver. Y cuando pienso que me he librado de un problema así, respiro aliviado.
Dios me libre de involucrarme de nuevo con alguna empleada.
No quiero manchar mi reputación involucrándome en escándalos románticos. Lejos de enamorarme, últimamente estoy muy tranquilo y eso me basta.
Contraté una nueva secretaria, Amara, es joven y tiene un temperamento difícil.
No puedo negar que Anne Louize es atractiva, y ni siquiera necesito mencionar lo mucho que me provoca. Ninguna de mis secretarias anteriores había tenido el coraje de contradecirme o desafiarme. Me resulta incluso divertida la forma en que me mira, estoy seguro de que me insulta mentalmente todo el tiempo. Es evidente cómo aprieta los dientes cuando la provoco.
Es divertido, solo eso.
Odio tener que admitir que todo el encanto desaparece cuando recuerdo que soy su jefe.
Sería diferente si nos hubiéramos conocido en otra ocasión, por así decirlo, la llevaría encantado a un motel. Me imagino lo que podríamos hacer cuando estuviéramos solos.
Pero no seas tonto, no pienses en tener fantasías sexuales con la novata, no compliques las cosas aún más.
Estaré fuera de la empresa por unos días, hace casi dos años que no veo a mi padre, hace mucho tiempo que me está pidiendo que lo visite.
No me gusta postergar mis compromisos, el próximo mes tendré una agenda llena: eventos benéficos, la nueva sucursal que estamos abriendo en Los Ángeles, entrevistas y más eventos. Pero como siempre, me las arreglo.
Estoy camino a la casa de mi amigo Bradley, hoy es su cumpleaños y está organizando una fiesta en su honor. Después de insistir mucho, finalmente cedí y aquí estoy, camino a su casa.
Odio estas fiestas, me obligan a socializar con personas que no conozco. Bradley siempre tiene la costumbre de presentarme a todo tipo de mujeres, lo cual no me molesta.
Bradley es muy intenso cuando se trata de "juergas". Suele hacer mezclas de alcohol poco convencionales. La última vez casi termino en el hospital por falta de glucosa en la sangre, después de pasar todo el fin de semana borracho. No me malinterpretes, no quiero repetir ciertos errores.
Cuando llego a la casa de Bradley, soy recibido por su prima, un antiguo affair llamada Laura. Ella se para frente a la puerta impidiendo mi entrada, convencida de que cederé a sus caprichos.
Laura: Hunterzinho, estás aún más guapo que la última vez que nos vimos. Qué bueno verte, cariño.
Hunter: Ah, hola Laura.
Laura: ¿Hola Laura?
No entendí la énfasis. Intento liberarme de su abrazo, pero esta mujer pegajosa, cielos. Me alejo un poco y le pregunto rápidamente por Bradley.
Hunter: ¿Sabes dónde está el cumpleañero?
Laura: Extrañaba tu aroma, pero te dejaré ir. Brad está en el área de la piscina, te llevare allí.
Extendiendo la mano, la ignoro y finjo no darme cuenta de su desesperado intento de acercarse a mí. El estruendo ensordecedor hiere mis oídos, hay gente por todas partes. A lo lejos veo a Brad forcejeando con una rubia, y detiene su acto tan pronto como me ve.
