NO TODO ES LO QUE PARECE Y HASTA LO MÁS PEQUEÑO ES LO MÁS PELIGROSO, AL MIRAR AL PRESENTE TE DARÁS CUENTA QUE LAS LÁGRIMAS QUE DERRAMASTE EN EL PASADO SON LAS ALEGRÍA MÁS GRANDE QUE PUDISTE EXPERIMENTAR CONPARADO CON EL AHORA.
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PATÉTICO IMBECIL
LEONORA, al llegar a casa, entra a su habitación pensando. "¿Qué me pasó? Por poco y caigo en sus garras", piensa mientras toca sus labios. "Qué emocionante es ese tipo, pero qué pena que no sepa cuántos años tengo. Después de eso, quedaría petrificado", piensa sonriendo.
"Un juego después que comienza, hay que terminarlo, y al terminarlo, surgirán muchos errores".
Un momento después, suena el timbre de la puerta y ella se levanta para abrir. Al ver al repartidor, le dice un poco confundida: "No, yo no he pedido nada".
REPARTIDOR: "Pero aquí está la orden para el apartamento 5012".
LEONORA: "Gracias".
REPARTIDOR: "De nada".
LEONORA: "¿Quién habrá enviado esto?" dice con curiosidad. Ella decide abrir el paquete, pero era comida y adentro había una nota que decía: "Para mi esposita, mis besos te endulzan, pero no llenan tu estómago".
LEONORA (enojada): "¡Imbécil! ¡Te odio! Ni a mi enemiga odio tanto como a ti".
ROWAN (estando en casa, sonríe): "Debe de estar maldiciendo en este momento". De pronto, empieza a toser hasta el punto de vomitar sangre.
AXEL: "Señor, señor, ¿está bien?"
ROWAN: "Estoy bien, estos son daños pequeños".
AXEL: "Señor, no olvidé que ha pasado mucho tiempo con..." (con preocupación en su rostro).
ROWAN (con una sonrisa en su rostro): "Ya lo sé, pero solo dejemos que pase el tiempo. Ya no quiero volver ahí. Vivamos como mortales, pero no sigamos todas sus reglas".
Llega el anochecer y LEONORA se prepara como siempre para ello. Mientras se mira al espejo, piensa: "Mi piel necesita hidratación, también necesito bajar un poco de peso".
ADELAIDE: "LEONORA, baja a comer o se enfriará la comida".
LEONORA: "Voy".
LEONORA baja a comer, después de hacerlo, sube a su cuarto y ve la ventana abierta. Siente mucha desconfianza y la cierra. Mucho más tarde, entra ROWAN al cuarto de LEONORA e intenta besarla, pero LEONORA se despierta y le dice: "Lo sabía, pervertido, querías besarme".
ROWAN: "No, solo quiero probar tus rojos labios".
LEONORA (avergonzada): "Patético, imbécil. ¿Cómo entraste a mi cuarto? Esto es muy alto. ¿Quién eres en realidad?"
ROWAN: "Soy tu esposo y tu mí esposita. Seguro que quieres saber quién soy yo".
LEONORA: "Sí, no sabes que soy menor de edad y nunca me he casado, y sí estoy segura".
ROWAN: "¿Cuántos años tienes?"
LEONORA (con una sonrisa): "16 años tengo, 16".
ROWAN: "Esposita, pensé que tenías más, pero por ti soy capaz de irme preso, cosa que no pasará".
LEONORA (con decisión en su rostro): "Pero no quiero ser tu esposa".
ROWAN: "Esposa, te mostraré quién soy. Espero que mi suegra no se enoje si te robó toda la noche". Sim persar dos veces, toma a LEONORA de la muñeca y salen por la ventana, dejando la cama vacía.
ROWAN toma su forma original de un dragón gris y lleva a LEONORA en su espalda hacia un extraño lugar, pero LEONORA no se asusta en absoluto, hasta se emociona.
Un rato después de llegar al lugar, LEONORA dice: "Dicen que los dragones no existen, a menos que sea en las leyendas".
ROWAN: "Recojo su cabello hacia atrás y toco su rostro para intentar acercarse y besarla, y decirle: cariño, tu esposo es magnífico".
