Isabella Rossi tiene 21 años, es la hija de un famoso empresario y lleva una relación con su novio desde los diecisiete años, solo esperaba graduarse para completar el compromiso que ambas familias han convenido desde hace muchos años, pero los padres de Isabella le dieron a escoger si casarse o no. Ella está muy enamorada de Sebastián Greco un joven apuesto de 25 años que es hijo de otro poderoso empresario, y no tiene dudas de él, pero pronto conoce el engaño de su prometido y su mejor amiga por eso su compromiso quedará disuelto. Al encontrarlo con su amiga él le dice que lo hizo por qué ella no lo representa y es demasiado mojigata, entonces ella decide cambiar tanto su aspecto como sus principios.
Te invito a conocerla.
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Día de la presentación parte uno.
Isabella.
Este fin de semana fue muy loco, conocí a ese maravilloso hombre tan sexy, es todo un adonis, cada beso que me da hace que me tiemblen las piernas.
En todos los años que pasé con Sebastián no me había besado de esa manera, tampoco había sentido lo mismo que siento con Franco, este hombre es perfecto.
Sé que dije que solo lo quiero para que me ayude con mi problema, pero ahora, el solo hecho de pensar en no verlo más me aterra.
Después de amanecer en su cama me siento extraña, como si necesitara verlo y besarlo es que es tan sexy y hasta su voz me hace temblar.
Mañana es mi primer día en la empresa de Sebastián y juro que haré que se arrepienta, me he visto bien al espejo y Franco tiene razón, soy hermosa y con los atuendos que me eligieron mis amigas juro que se va a arrepentir de haberme dejado y de la manera que lo hizo.
Me vestí hermosa, con una falda tubo corta, una blusa blanca, unos tacones y lista.
Llegué a la oficina y para mi tranquilidad no estaba Sebastián, pero para mi desgracia tampoco estaban los demás socios, ellos estaban de viaje y regresaban el viernes que era el día de una importante presentación para cerrar un negocio millonario.
No era demasiada coincidencia, claro que esto era obra de Sebastián, él quería que fallara, pero todavía no me conoce nadita.
Ingresé a mi oficina y revisé todos los archivos, todo estaba en desorden, el sistema tenía fallas.
Algunos contratos próximos tenían un margen de Ganancia muy bajo para mi gusto y había un comunicado del cliente del día viernes, el señor Terranova, dónde exponía su descontento con los diseños ya presentados y es que no era para menos no tenían nada que ver con las pautas que quería el señor y no iban con su marca,
tenía mucho trabajo, pero iría por partes.
Empecé por reorganizar los archivos y renovar algunos contratos antiguos que no tenían el mismo valor, como ellos me dejaron sola, tenía poder para decidir que hacer con la empresa mientras no estén.
El martes me encargué de cambiar todo el sistema, pues tenía una gran falla, lo dejé mucho mejor y más productivo, eso me tomó todo el día y más porque las secretarias y asistentes de los socios se fueron de baja mientras ellos no estuviesen, estaba literalmente sola en esto, pero igual yo no me dejaría.
Franco me llamaba todos los días y me decía que estaba de viaje, pero que a su regreso me quería ver.
Lo que tengo con él, que realmente no sé qué es, a mí me gusta mucho, hablar con él me da paz, sus palabras me dan fuerzas y sus besos me hacían sentir segura.
El día miércoles fue un caos, creé nuevos diseños y hablé con el señor Terranova y estuvo de acuerdo le encantaron, pero como no había personal para confeccionar porque según los jefes las necesitaban y tuvieron que irse, me encargué de eso yo misma gracias a dios soy una excelente modista en todo el sentido de la palabra.
El día jueves fue un mega caos, las dos modelos de la empresa y las que eran la imagen de esta colección no estaban, se fueron a Millán por otros proyectos y casualmente eran Fanny y su mejor amiga Thalía.
Maldito Sebastián, esto era obra de él, me quería joder y lo estaba haciendo, llamé al señor Terranova y le pregunté si había problemas con que yo cambiara a la modelo y me dijo que no, ya que esa mujer no lo convencía del todo.
Eran las doce de la noche cuando mi teléfono sonó.
Franco: Disculpa la hora bella, es que acabo de salir de una reunión y no me fijé en la hora, te desperté.
Isabella: Para nada Franco, menos mal llamaste tu voz me calma, estoy en la empresa, he tenido una semana horrible y mañana estará peor, pues, tengo que entregar cuentas y si no termino lo que estoy haciendo hoy creo que quedaré mal.
Franco: Cálmate bella, por qué estás allá a esta hora, ve y descansa, por favor, todo saldrá bien.
Isabella: No puedo, cuando termine esto me voy, falta poco y todo tiene que estar perfecto, luego te cuento, desearía que estuvieses aquí, hay perdón, digo estupideces, no me hagas caso.
Franco: No digas eso, si así lo sientes dilo, mañana salgo temprano, pues debo ir a ver si mi empresa no está en llamas, prácticamente me obligaron a dejarla en manos desconocidas y a lo mejor tendré que solucionar el caos mañana, pero en la noche eres toda mía di que si
Isabella: Sabes que desde que te di mi palabra estoy atada a ti, hasta que cumplas tu parte que es hasta mañana por lo visto, luego de eso, pues te voy a extrañar, ja, ja, ja
Franco: Mañana no será ese día, quiero disfrutarte más tiempo.
Isabella: Está bien, con verte me basta, bueno te dejo, voy a seguir trabajando, besos.
Franco; Me los das mañana.
Este hombre sabe cómo hacer que me relaje, hablar con él es tan fácil y no veo al ogro que dicen por ningún lado, es todo un dulce.
Seguí con mi labor y terminé a las tres de la mañana, fui a mi apartamento y me acosté, estaba cansada, a las horas siguientes me desperté, me duché y me vestí para matar, pero del infarto a Sebastián por desgraciado.
Llevo una falda tubo un poco más arriba de la rodilla color negro, un bralette de encaje o corpiño negro, un saco corto negro, unos tacones negros y un bolso de mano a juego.
Outfit de Isabella.
Esta semana loca es obra de Sebastián, pero le voy a demostrar que no me jodió.
Llegué y estaba el señor Terranova, él aceptó los diseños, ahora quería verlos en la modelo, le expliqué que eran un prototipo porque los hice yo misma por falta de personal y tiempo, él aceptó gustoso.
Sr. Terranova; No te preocupes confío en usted, es una excelente persona, esta semana me lo demostró.
Isabella: Espero y la modelo le, guste también, en un momento empieza el desfile.
Dije y me dispuse a ir a cambiarme.
Mi estimada MARINES, no importa cuál sea la temática, están tan bien escritas que no es difícil "engancharse" y leerla hasta el final, sin parar.
Por suerte, aún me quedan muchas por leer, así que una vez más:
FELICITACIONES Y MUUUUUUUUCHAS GRACIASSSSSSS por tan hermosas creaciones. Hasta la próxima y que Dios siga bendiciendo tu talento.