Atrapada Por El CEO Que Cayó Del Cielo

Aiyana se quedó molesta por lo que dijo Hania, él estaba empecinado en casarse con ella desde que ambos tenían solo quince años y sus abuelos casi la obligan a casarse a los dieciocho años eso ella nunca lo olvidaría y no perdonaba por eso a Hania, no lo queria ni como amigo.

Recordaba lo que tuvo que hacer para impedir que la casen y Aiyana derramaba algunas lágrimas, entró a ver a su extraño enfermo aún secandose las lagrimas y él estaba despertando.

Él extraño se movía en la cama y le comenzó a doler la cabeza, se quejaba agarrándose los costados de la frente, entonces él recordó como una fotografía que pasaba por su cabeza muy rápido.

FLASHBACK

Guardaespaldas: "Señor intentan explotar el jet, se lanzó en paracaídas el piloto, venga rápido solo hay un paracaídas, señor Cristopher, salve su vida, no olvide que quién está tras esto es su hermano y una mujer que aun no logran darme el nombre.

Fin del FLASHBACK.

Aiyana: "Tranquilo toma este te, ayudará con ese dolor".

El extraño tomaba él té que le daba Aiyana y fue sintiéndose mejor, le devolvió la taza a Aiyana y ella se le acercó más a acomodarle las almohadas para que este semi sentado, en ese momento el sintió su aroma, era un aroma a flores, un aroma tan dulce y sutil que ni el mejor perfume francés lo igualaría, ella se alejó un poco y se paró frente a él, él recién la vio bien, una bella joven de una belleza que realmente lo deslumbraba.

Extraño: "¿Como llegué aquí?, ¿donde estoy?".

Aiyana: "Estás en la Nación Navajo, caíste sobre mi cabaña, tu paracaídas se incendió cuando exploto el avión en el que viajabas, yo soy Aiyana aquí no tengo yeso para tu pierna fracturada, pero con lo que la inmovilice estará bien, las quemaduras en tu rostro y cuello las estoy curando con yerbas, ¿tú como te llamas?".

Extraño: "Todo es confuso, no recuerdo casi nada, solo que me llamo Cristopher porque lo único que recuerdo es que alguien me puso el paracaídas y me decía que me salve que fue un atentado quisieron matarme".

☆Cristopher Livington☆

Aiyana: "Si usted gusta lo llevo en la camioneta a donde las autoridades, para que lo lleven a donde su familia".

Cristopher: "Aiyana llama a tus padres hablaré con ellos, quién me quiere matar me buscara y no parara hasta matarme, el que me salvo me dijo que no olvide que quien quiere matarme es mi hermano, no sé ahora sí tengo uno o tengo cinco hermanos pero, sí que no debo aparecer aún".

Aiyana: "Vivo sola, asi que no tengo papás con quienes hables, pero tranquilo nadie sabe que estas aqui, perdóname ayer tuve que cortar tu ropa, para poder atenderte, pero te puse algo de mi abuelito, no te preocupes estaba muy limpia la ropa, seguro no es a lo que estabas acostumbrado pero es mejor que andar sin ropa, te traere desayuno y un baston para que te ayudes a llegar al baño, tienes fractura en tibia y peroné, ya estan en su sitió pero tienes que estar un mes o mas con eso".

Cristopher: "Gracias Aiyana".

Aiyana trajo rapido el desayuno para él y busco una buena rama que sea fuerte y tenga forma de bastón que la pulio un poco con su machete y se la trajo, le indico donde era el baño y ella salio.

Aiyana tenía que ir por el aislante, llevar los huevos que siempre vendía al supermercado del pueblo, así como mantequilla que hizo, fue a donde su extraño caído del cielo que ahora sabia que se llamaba Cristopher y ya lo encontró dando algunos pasos.

Aiyana: "Cristopher no, una cosa es pararse por necesidad al baño y otra caminar así, tu pierna se inflamará y puedes mover la fractura, déjame ayudarte a llegar a la cama, iré en la camioneta al pueblo tengo que llevar a vender algunas cosas para el supermercado y comprar de aislante espuma de poliuretano, algunas cosas que faltan para la casa, hoy techaré el forado que quedo en el techo".

Cristopher: "Aiyana perdón por todas las molestias, en mi ropa no vino algún documento mío".

Aiyana: "Ay, perdón no lo recordaba, vino esta billetera que no abrí ah".

Cristopher revisaba su billetera y encontró su identificación, su licencia de conducir, tarjetas de banco y dinero, dos mil ochocientos dólares en total.

Saco un billete de cien dólares, sabía que tenía que cuidar ese dinero, se lo alcanzo a Aiyana.

Cristopher: "Compra con esto el aislante, y para ayudar a lo que pueda con la reparación del techo, se que es muy poco, pero te recompensaré por todo lo bueno que estás haciendo cuando recupere la memoria y mi vida".

Aiyana: "Acepto los cien dólares porque quiero techar hoy mismo esto, no quiero que Hania se vuelva a parar por mi cabaña, con sus ofrecimientos, y aprovecharé de traerte algunas cosas para tu uso personal, solo no salgas asi sientas que la cabaña se cae, Hania anda por aquí y no quiero que te vea".

Cristopher: "No me moveré de la cama de no ser al baño, pero me gustaría que después me cuentes quién es Hania y porque le debemos tener miedo".

Aiyana: "No le tengo miedo, pero no quiero que te vea aún, más tarde te cuento la historia de por qué odio a Hania, ya regreso".

Aiyana salió de su cabaña cerrando la puerta y en la camioneta llevaba los huevos que pusieron sus cincuenta gallinas en una semana, ella compraba envases para huevos y ya los llevaba envasados en empaques por catorce unidades, con una etiqueta que decía huevos de granja Tsosie, al igual que la mantequilla.

En el pueblo lo de la caída del avión era todo un escándalo, vio algunos titulares de periódicos y la mayoría decía:

"FALLECE FAMOSO CEO CRISTOPHER LIVINGTON DEL RUBRO DE LA CONSTRUCCIÓN EN EXPLOSIÓN DEL JET QUE LO LLEVABA A TEXAS, SU FAMILIA LLORA EL NO PODER ENTERRAR CUERPO ALGUNO, HOY SE HARÁ UN FUNERAL SIMBÓLICO".

Aiyana sabía bien ese apellido lo recordaba muy bien, fue al supermercado y vendió los huevos como la mantequilla, fue a los pasillos compró útiles de aseo para Cristopher y algunos comestibles que no tenía en la granja y siempre llevaba, fue a la ferretería y allí compro el aislante clavos y todo lo necesario, tomó el periódico pago por él y lo guardo en la guantera se lo entregaría a Cristopher cuando estuviera restablecido.