La Santa Y El Duque Exiliado

Dijo Alice saliendo y cerrando la puerta de la iglesia escuchando los gritos de los dos sacerdotes mientras suplicaban por su vida al duque, al paso de unos minutos el duque salió de la iglesia con sus ropas bañadas en sangre, “Parece que todo acabo” pensó Alice mientras el duque se acercaba a ella.

-Eddie ¿Qué tienes pensado hacer con ese dinero?

-Se le devolverá a los aldeanos, pero no en dinero sin no en materiales y alimentos…duque ¿Qué piensa de lo que ha visto hoy aquí?

Pregunto Alice mientras el duque miraba a su alrededor, este veía niños pequeños tirados sobre el suelo completamente sucios y con claras señales de mal nutrición, aparte de adultos y ancianos con enfermedades cutáneas, este miro a Alice y cerró los ojos unos segundos “Esto no es mi culpa, mi hermano me exilio hasta acá, si no fuera porque me obligan a estar en este territorio yo jamás hubiera visto a esta gente así que no es mi culpa pero…pero sé que debería de hacer algo” El duque guardo silencio ante la pregunta de Alice cuando vio una pequeña niña correr donde uno de los pequeños rescatados, esta lo abrazo y lloro aferrándose a él mientras una desnutrida anciana se acercaba para abrazar a los niños.

-¿Por qué me preguntas eso Eddie?

-Este es su territorio mi señor, esta gente depende de usted ¿o me equivoco?

El duque subió a su caballo y comenzó a galopar camino al palacio, mientras que Alice se despedía de los pequeños dejando un bolso con alimentos y marchándose junto con el duque al palacio. Al llegar Andrew vio a su amigo llegar con su ropa manchada de sangre y un rostro molesto caminando directamente hasta su oficina, fue entonces que miro al pequeño Eddie quien era un hombre frágil según su opinión.

-Eddie ¿Qué sucedió? ¿Por qué Kenneth esta así?

-Solo vio como es la vida fuera de este palacio, creo que eso no es algo de otro mundo, todos quienes no tenemos las comodidades de ustedes, vivimos así y tenemos los mismos miedos que esta gente y eso me incluye a mí.

Respondió Alice volteando y caminando a su cuarto “El duque es demasiado terco, no sé si puedo convencerlo de ayudar a la gente de sus tierras solo con hacerlo ver la realidad, pero si eso no funciona no me quedara más remedio que recurrir a las amenazas aunque debo darme un tiempo, supongo que una semana será suficiente para poner todo en marcha” pensó Alice planeando chantajear al duque después de una semana haciéndolo que se acostumbre a ella en el palacio. Durante la cena el duque estuvo en total silencio sin querer hablar sobre lo visto en su territorio, este solo se limitaba en mirar a Alice y volver su rostro a su plato “Este chico tiene un comportamiento muy extraño ¿porque le importa tanto como vive esa gente? Él no los conoce ni es de acá entonces ¿Por qué se preocupa tanto por ellos?” pensaba el duque mientras observaba a Alice, al terminar este se levantó de su asiento y camino a su habitación diciéndole a Alice que fuera con el mas tarde.

-Eddie ¿Quieres venir conmigo a saludar a los caballeros? Vamos acompáñame para que conozcas a los demás caballeros del palacio.

Alice lo miro y luego comenzó a imaginarse como entrenarían estos “Cuando pase esta mañana se veían todos muy bien… creo que no pierdo nada en ir a mirarlos, digo a saludar” pensó Alice asintiendo a la sugerencia de Andrew siguiéndolo hasta el patio de entrenamiento. Al entrar esta vio a varios hombres sin camiseta secando sudor y algunos balanceando su espada “Wow son tan fuertes, no se comparan con la apariencia de Andrew o el duque Kenneth pero aun así se ven muy bien” pensó esta hasta que vio un bloque de paja para tiro al arco, Alice tomo un arco abandonado en el lugar y apunto acertando cada flecha en el objetivo, al voltear vio a Andrew observándola sorprendido, Alice sonrió y los demás hombres que se encontraban allí corrieron hacia ella y la abrazaron poniendo sus brazos en los hombros de esta, “Huelen a sudor, aun así…¿Por qué me siento tan feliz?” pensó esta mientras escuchaba a todos los hombres alabarla ya que era la única que usaba el arco en el lugar “Es primera vez que alguien me alaba por mi puntería sin contar a mi papá” pensó. Al paso de unas horas Alice fue llamada por el duque ya que era tarde y quería irse a la cama, Alice camino hacia la habitación del duque y lo vio en su bata de dormir, este se recostó en la cama y extendió su mano esperando que Eddie la tomara para hacerlo dormir.

-Eddie…gracias.

Dijo el duque mientras cerraba los ojos quedándose profundamente dormido, Alice se quedó unos minutos mirándolo y acaricio el rostro de este con nostalgia “Duque por favor abra su corazón a la gente de aquí, sé que fue lastimado pero esto también puede brindarle felicidad” pensó Alice mientras pensaba en el gran desamor que el duque había sufrido “Debe haber amado mucho a la reina” se dijo mientras soltaba la mano del duque y dejaba la habitación. Al paso de unos días Alice hizo rutina ir al patio de entrenamiento y practicar con su arco mientras que el duque la observaba desde la biblioteca del palacio “Ese chico Eddie cada día me parece más intrigante, siento que esconde algo pero no puedo decir que es…se comporta tan natural con todos, siempre dice lo que piensa y es amable, aun así ¿Por qué siento que oculta algo?” se preguntó el duque mientras observaba a Alice entrenar desde su ventana.

-Eddie ¿aquí estas?

-Andrew ¿Qué pasa?

-¿Quieres venir a tomar unos tragos con nosotros hoy?