Para Felipe era un día cualquiera, tenía una novia perfecta, un negocio que estaba en buen apogeo, pero una noticia le cambio su vida especialmente cuando conoció a sus hijas, desde ese día su hermoso mundo cambio, ya muchos llaman a sus hijas, demonios pero para él son sus hermosos luceros
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Me das otra oportunidad.
Felipe.
La verdad que me siento mal, por las palabras que me dijo Oriana pero tiene que entender que yo no tengo la culpa, Jonathan ingresar y lo peor es que el me ve llorando... si llore esas palabras fueron como una espada afilada que atravesaron mi corazón, después vino la reunión que espere por más seis meses pero no me pude concentrar gracias a Dios tengo el apoyo de Jonathan y una asistente excepcional que me apoyaron en todo momento.
Después que la reunión termino fui a mi oficina, necesitaba revisar unas papeles y ponerme de acuerdo en algunas cosas con Jonathan para la mejor exportación de mis flores al extranjero pero un escándalo nos desconcentro.
Jonathan----: ¿Que estará pasando afuera?.
Felipe---: Parece que es algo grave.
Jonathan----: Suena algo muy fuerte
Felipe---: Vamos a ver (se levantan)
Abri la puerta y al salir mi corazón se llenó de coraje, como era posible que el guardia de mi empresa este maltratando a mis hijas, no sé cómo actúe pero lo único que quería era estrangular al guardia como se atrevía a tocar a mi hija de esa manera.
El guardia al ver cómo Felipe lo miraba sintió escalofríos por toda su columna vertebral, de verdad el era el padre de esas niñas problemas pensó él,... el guardia con temor, las miro y unas de ellas lo empujó para que la suelte.
Ariana----: No querían dejarnos ingresa a verte.
Felipe---: Tranquila (voz suave) yo estoy aquí para protegerlas.
Cuando Felipe terminaba de hablar con Ariana el guardia que estaba responsable de las cámaras informo por teléfono lo sucedido.
Guardia 3- 📲 señor unas chicas ingresaron a la empresa agredieron a dos guardias y a la recepcionista.
Felipe--📱Estás seguro ellas tienen gorra, chaqueta negra y jean.
Guardia 3 📲 Si señor se visten iguales.
Mientras el guardia terminaba de informar lo acontecido, Felipe miraba a sus hijas sorprendido, como podían decir tal cosas si eran una niñas frágiles.
Felipe---: Yadira lleva a mis hijas a mi oficina y ofrecerles algo de comer y entretenlas por favor ( ya regreso).
Oriana---: Una solo cosa olvide decirte.
Felipe---: Dime lo que sea mi amor.
Oriana lo miro a los ojos y al escuchar esa palabra sintió alegría en su corazón y sonrió.
Oriana---: Creo que los guardias y la señora que está abajo necesitan ayuda, lo que pasa que nosotras solo nos defendimos.
Felipe---: No te preocupes solo espéramen en la oficina.
Yadira las miro aún estaba sorprendida sus hijas su jefe guapo tiene unas hijas de esa edad, no lo entendía si el es tan joven.
Yadira---: Está es la oficina del jefe, se les apetece unas tostadas y un yogur.
Oriana---: Claro.
Yadira sonrió y fue por las tostadas, ahora con las niñas presente ella se sentía más lejos de él.
Yadira---: No tenías que enamorarte de él estoy segura que volverá con la madre de sus hijas, lo sé pude ver cuánto las quiere, pero porque nunca dijo que tenía hijas, entonces porque tiene a la momia a su lado, bueno mejor que vuelva con la madre de sus hijas en que se case con esa mujercilla presumida, arrogante y altanera.
Oriana---: Se ve todo bonito desde aquí.
Ariana----: Cuenca es una hermosa ciudad.
Yadira---: Llegué, ojalá les guste lo que prepare a mi jefe le gusta así las tostadas( pensativa)
Ariana----: Están buenas, deliciosas.
Yadira---: Yo me llamo Yadira estoy para servirle(sonríe).
Oriana---: Ella es Ariana y yo Oriana como vez somos gemelas, conocimos a Felipe Sandoval hace unos días.
Yadira---: El no las conocía.
Ariana----: Asi es, mamá murió y quedamos huérfanas.
Yadira---: Entonces no son hijas de sangre del jefe
Oriana---: Si lo somos, es una larga historia.
Mientras ellas platicaban con Yadira en la sala de control de las cámaras Felipe observaba con atención lo que había sucedido hace unos minutos atrás.
Jonathan----: Huuuuuy hasta a mí me dolió esa patada (tocándose de los testículo) pobre guardia.
Felipe---: Que les hicieron porque cayeron al piso
Guardia---: Tienen un arma de electrochoque creo que usaron taser eso provoca que los músculos sufran un fuerte dolor y se paralicen.
Jonathan----: Dios es niñas son unos demonios.
Felipe---: No les digas así.
Guardia---: Que hacemos señor la capturamos y llámanos la policía.
Felipe---: Estás loco son mis hijas, manda al guardia a descansar, enviaré a Mercy al médico y que descance por hoy.
Guardia---: Disculpe señor no sabía que usted tenía unas hijas de esa edad.
Felipe---: Lo se (se retira de la sala)
Jonathan----: Me pongo a pensar, tú estaras a salvó con esas niñas en tu casa, creo que necesitan un exorcista.
Felipe---: Estaré bien y ellas no necesitan exorcista.
Jonathan----: Vencieron a dos guardias y a la pobre de Mercy que puedo pensar.
Felipe sonrió sus hijas no son tan débil como lo imagino, al ingresar a su oficina vio que ellas congeniaron muy bien con su asistente.
Felipe---: Gracias Yadira.
Yadira---: De nada señor, permiso(sonríe y se va)
Oriana---: Tienes una secretaria muy amable y hermosa tambien.
Felipe---: Hermosa, no me he percatado.
Ariana----: Como que no se ha dado cuenta, es muy hermosa parece un ángel.
Felipe las miro sonrió.
Oriana---: Lo siento si venimos a destrozar tu empresa, solo nos defendimos ellos no nos querían dejar pasar para verte.
Felipe--: No se preocupen por eso, ahora todos aquí saben que son mis hijas, las próxima vez las dejarán pasar sin problema.
Ariana----: Pobre chica.
Felipe---: ¿Quien les dió esa arma es peligroso.
Ariana----: Mi papá nos dió para defendernos.
Oriana---: Vine a pedirte disculpas mi hermana tiene razón no tenemos que juzgarte me darías otra oportunidad para ser tu hija.
Felipe la miro a los ojos se llenaron de lágrimas de cual salieron de felicidad, la abrazo fuertemente y beso su coronilla.
Felipe---: Les daré todas las oportunidades del mundo ustedes son mis hijas, son mis dos hermosos luceros... mis dos luceros gracias por hacerme el hombre más feliz de este mundo.
Felipe abrazo a sus dos hijas gesto que hizo que hasta Jonathan llorara, el tenía varios minutos parado en la puerta y observo toda la escena.