a veces me pregunto porque la vida nos trata tan cruelmente?
yo fui abusada cuando solo tenia 15 años por un desconocido, y gracias eso no solo quede embarazada si no que lo perdí todo, a mi familia, a mis amigos, ami es tilo de vida, y mi infancia y vida adolescente
estaba segura de dejarlas en un orfanato pero... Al ver sus ojos cafés casi dorados con tonos oscuros y brillantes como un atardecer simplemente no pude y decidí enfrentarme a la vida con mis pequeñas ami lado
hasta que apareció ese hombre y ahora me reclama ?
- mire señor yo solo tenia 15 años y ese horrible pasado en lo único que nos une
NovelToon tiene autorización de chiquinquira para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
6
El vuelo hacia Rusia transcurrió sin incidentes, pero mi mente estaba ocupada planeando el operativo de los franceses. Aterrizamos en un aeropuerto privado, donde nos esperaba un convoy. Los rusos se mostraron agradecidos y prometieron futuras colaboraciones. Sabía que mantener buenas relaciones con ellos podría ser ventajoso.
Después de despedirme, me dirigí a un lugar seguro en Moscú para coordinar la operación francesa. En mi habitación, preparé el equipo necesario y revisé los detalles del plan. Tenía que ser meticulosa; no había margen para errores.
A la mañana siguiente, recibí un informe detallado sobre el infiltrado en el grupo francés. Al parecer, era alguien de alto rango. Esto complicaba aún más las cosas. Decidí que la mejor estrategia sería llevar a cabo la operación como estaba planeada, pero con vigilancia adicional sobre el sospechoso.
Me puse en contacto con mi equipo para darles instrucciones precisas. Cada movimiento tenía que ser sincronizado y ejecutado a la perfección. La seguridad de la familia francesa y la integridad de nuestra operación dependían de ello.
Esa noche, mientras revisaba los últimos detalles, mi teléfono sonó. Era un número desconocido. Contesté con precaución.
-*¿tulipan ?-, dijo una voz al otro lado.
-*Así es- respondí, manteniendo mi tono neutro.
-*Tienes un nuevo admirador- continuó la voz. -El presidente que mencionaste antes está impresionado con tus habilidades. Quiere contratarte para una operación más compleja. Estaré en contacto.
La llamada terminó tan repentinamente como había comenzado. Me quedé pensativa. Trabajar direct
amente para un presidente significaba entrar en un territorio aún más peligroso y político, pero también abría puertas a recursos y conexiones invaluables. Era una propuesta que requería una cuidadosa consideración.
Mientras reflexionaba sobre esta nueva oferta, mis pensamientos se desviaron hacia mis hijas. A pesar de estar acostumbradas a este estilo de vida, cada decisión que tomaba repercutía directamente en su seguridad y bienestar. Sabía que cada paso que daba en este mundo oscuro debía ser calculado no solo por su impacto profesional, sino también por cómo afectaría a mi familia.
Decidí que, una vez finalizada la operación con los franceses, tomaría un tiempo para estar con mis hijas, alejadas de todo. Necesitábamos ese respiro, una oportunidad para recordarnos por qué luchábamos y lo que realmente importaba.
Pero primero, la operación francesa. Me sumergí de lleno en los preparativos finales, determinada a asegurar que todo saliera según lo planeado. La noche antes de la operación, repasé cada detalle, cada ruta de escape, cada identidad falsa. No podía permitirme fallar.
Finalmente, llegó el día. Todo estaba listo. Mis equipos estaban en posición, y la familia francesa estaba preparada para el traslado. A medida que el operativo se desarrollaba, mantuve una vigilancia constante, listo para adaptarme a cualquier imprevisto.
La operación fue un éxito. La familia llegó a Colombia sana y salva, y el infiltrado fue identificado y neutralizado sin causar alarma. Una vez más, había demostrado mi habilidad y eficacia en este peligroso juego de sombras.
-* tulipán tu trabajo fue un éxito, ya recibí noticias de mi familia y los colombianos también aceptaron que se resguardaran en su territorio, así que está bien gracias.
-* fue un placer señor, cuando quiera los jinetes lo atenderán con gusto.
-* gracias.
Ahora con esa llamada me relajaba y podia concentrarmee otras cosas, era tiempo de reflexionar sobre la oferta del presidente y planear esos momentos de paz con mis hijas. En este mundo de constantes peligros y decisiones difíciles, esos raros momentos de tranquilidad eran más valiosos que cualquier recompensa.