Nova Reik III: Ragnar

Después de unos días, Andrew volvió a visitarme debido a que lo había vuelto a olvidar, debido al estrés. Él nunca entraba a mi habitación por la puerta principal, sino que siempre lo hacía por la ventana, así que le abrí la ventana agobiada. Andrew trató de besarme de nuevo pero lo esquivé de manera cortante.

—¿A qué viniste?, sabes que tengo que dormir, tengo cosas importantes mañana

—Vine para ayudarte a deshacerte de ese estrés —dijo mientras me mostraba un preservativo—

—Andrew… —frustrada y volteando los ojos hacia atrás di un suspiro—. De verdad, no tengo tiempo para esto, sé que quieres ayudar, pero no voy a tener relaciones contigo con mis padres aquí

—Vamos, solo una noche, se que esto te ayudará, prometo que es la única —lo volteé a ver con el ceño fruncido hasta ceder a su mirada— ¿Qué dices?

—Bien, bien —respondí molesta—.

Nos acurrucamos en mi cama para intentar hacerme olvidar el estrés, a decir verdad al principio parecía funcionar, sentía que todo el mundo se estaba desvaneciendo a nuestro alrededor. Solo estábamos nosotros pero al dejarme llevar, fui perdiendo cada vez más el control de mi fuerza hasta terminar por hacerle daño a Andrew.

—Andrew… No sabes cuánto he esperado esto, te…

En un parpadeo lo que parecía un momento de pasión, se volvió una pesadilla. Por accidente al intentar apoyarme en él mientras nos besábamos, le arranqué un brazo sin darme cuenta, la sangre de Andrew me manchó y manchó toda mi habitación.

—¡¡Andrew!! —grité asustada al ver cómo su brazo se separaba de su cuerpo—

Por unos momentos me quedé paralizada por el miedo, sentí como mi respiración se aceleraba y como comenzaba a sudar frío por el shock hasta que pude actuar y le hice un torniquete a Andrew en el brazo para que no se desangrara y sin titubear lo llevé al hospital lo más rápido que pude. Debido a la pérdida de sangre, Andrew cayó inconsciente a los pocos minutos de perder su brazo.

Me sentía tan culpable por haberle hecho daño que después de esa noche traté de ser mejor novia para él. Incluso cuando hice lo posible para darle un baile de graduación perfecto para él, a pesar de que yo había reprobado.

—Creí que ibas a venir a mi fiesta de graduación

—No, esto está mejor, bailar en el cielo junto al hombre que amó

—Jaja, sí, suena mejor esto que bailar junto a todos mis compañeros

Usé mis poderes para bailar con Andrew en el cielo mientras la luz de la luna nos iluminaba. Aunque a pesar de que mis intentos por ser una buena novia parecían hacerlo feliz, realmente era agotador.

Con el pasar del tiempo, mi responsabilidad con la ciudad y con mi novio, mi vida comenzó a asfixiarme. No importaba si estaba en casa o afuera, me sentía sin ganas, pues tenía que fingir que todo estaba bien en todo momento, cuando no era así.

Ya no me sentía cómoda con Andrew pero no quería hacerle daño de nuevo, aún así sabía que tarde o temprano todo iba a explotar y eso fue lo que pasó en una noche de Navidad.

Él se me acercó nervioso para ponerse de rodillas frente a mi, con el anillo en su mano, todos nuestros amigos y nuestros familiares voltearon a vernos al ver que Andrew estaba a punto de proponerme matrimonio.

—Flor Watson, ¿Te casarías conmigo?

—Ah… eh… —noté las miradas de todos, sintiendo al momento la presión de aceptar pero algo en mi interior me detuvo antes de aceptar por presión social— N-No, no me casaré contigo —todos quedaron helados al escuchar mi respuesta incluido Andrew quedó en shock. Se quedó quieto unos segundos tratando de asimilar lo que sucedía, lo que había respondido— Ya… Ya te lo he dicho muchas veces, no quiero casarme, no quiero, no sueño con casarme, con tener hijos igual que tú, eres lindo, tanto que pareces hecho para mí, pero yo no estoy hecha para ti, no estoy hecha a tu imagen y semejanza igual que tú lo estás para mí, así que mi respuesta es no, no Andrew y… —sujete mi vestido con fuerza tratando de agarrar fuerzas para hablar— Últimamente he notado que tenemos metas distintas en esta vida, es por eso que… Esta… Esta noche, iba a decirte que… Lo mejor para ambos, es que lo nuestro se termine

—¿Qué?

—Estoy rompiendo contigo, lo siento

No pude aguantar más y salí corriendo de la casa de Andrew, mi madre salió detrás de mí aunque no me alcanzó, debido a que volé tan lejos como pude, fui al único lugar donde me sentía libre que era el espacio.

A causa de la ruptura nos distanciamos por meses, no tanto por él, sino porque no quería regresar a mi vieja vida. Él siguió intentando volver conmigo pero tan solo lo ignoré, era lo mejor para ambos.

—¡¡Nova!!, ¿Crees que podamos hablar?, ¡Nova!

—Lo siento, pero esto se terminó, Andrew, por favor vete —dije mientras cerraba las cortinas de mi ventana— Lo siento, no eres tú, soy yo

Decidí enfocar mi mente en mi vida como heroína para tratar de olvidar los sentimientos que me quedaban por Andrew.

Mi vida parecía volver a la normalidad con cada día que pasaba. Al menos, hasta que un Kaiju salió del océano Pacífico para causar destrozos en mi ciudad. Hice todo lo posible para evitar bajas, salvando a las personas de los derrumbes causados por el Kaiju.

—Es mejor que evacuen la zona, yo trataré de llevarlo lejos de aquí —dije dejando a uno de los civiles en el suelo—

Los policías asintieron, me di la vuelta para ver al inmenso Kaiju, decidida arranqué un árbol del suelo de un parque y lo usé para llamar la atención del inmenso monstruo, como si fuera un cachorro viendo un hueso comenzó a perseguirme.

—¡Ven!, ¡¡Sígueme!!, ¡¡Pequeño!!

El Kaiju la siguió emocionado, lo llevé por una zona en la que no había ningún civil, aunque en el camino, pude ver a un cachorro atado en un barco, sin dudarlo solté el árbol y volé hacia el cachorro para llevarlo a un lugar donde no había peligro.

El Kaiju se entretuvo con el árbol un tiempo, tiempo que aproveché para cargarlo y llevármelo de ahí.

Lo dejé en el océano, en donde dicho Kaiju pertenecía, agradecido me dio algunos lengüetazos en la cara para después regresar a su nido, que estaba en lo profundo del océano pacifico.

—Adiós pequeñín, jajaja

Después de salvar la ciudad una vez más, me cambié en un parpadeo, y me fui a la eterna preparatoria, antes de que me dejaran afuera de la escuela.

En el camino hacia la preparatoria, pude ver una noticia en mi celular, sobre un superhumano, que me hizo detenerme.

—Un… ¿Un Kirie? —murmuré confundida y aterrorizada al ver a un monstruo de sangre parecido a Carnage, era un monstruo que causó una tragedia en Moncia— K02, viejo amigo…