De Santa A No Tanto.

Franco.

Bueno tuve que viajar mucho tiempo por cosas de trabajo, a pesar de eso llamaba a mi bella todos los días, sé que estás haciendo un excelente trabajo, hubo una junta para seleccionar la temática sobre los nuevos diseños y ellos escogieron los de gala, mi bella tenía otra propuesta, pero esa la vieron un poquito arriesgada.

Ella se quedaba hasta muy tarde haciendo cada diseño y yo siempre le decía que no se exigiera tanto, pero ya la conocen, es Isabella. No les digo que no me gusta dejarla mucho tiempo sola y no porque desconfíe de ella sería incapaz de serme infiel, pero hay alguien que nos quiere hacer daño y no solo lo digo porque le quisieron sabotear su desfile rompiendo todos los vestidos y los bocetos sino porque cuando estaba de viaje conmigo también se quisieron meter.

Estuve en un restaurante cerrando un gran negocio, luego de eso fuimos a celebrar a un antro y allí me drogaron como fue pues...

Llegamos al lugar y subimos a la zona VIP y estuvimos conversando y riéndonos, se acercaron unas chicas muy guapas, éramos cuatro y ellas también yo le pedí amablemente a la mujer que se retirara, pues no quería compañía en vez de eso me disculpé y salí un momento a llamar a mi bella ella estaba trabajando hasta tarde luego de cortar la llamada regresé a zona VIP, y ya me habían preparado un trago me lo tome de ingenuo y empecé a sentirme muy mal.

La joven que había rechazado se ofreció a llevarme, pero me negué, enseguida llame a mi chofer y amigo para que me ayudara, este me llevo al hospital donde me atendieron, me habían dado un afrodisíaco.

Al día siguiente me desperté en la sala de un hospital, rápidamente quise llamar a mi princesa para ver cómo estaba más, no le dije lo que me había ocurrido, por eso tuve varios días que no la llamé para no preocuparme, estaba averiguando y efectivamente me habían mandado a drogar y esto me huele a Sebastián y a Soraya no sé por qué odian tanto a mi bella si ellos fueron los que la dañaron ella no les ha hecho nada.

En el lanzamiento de la nueva colección mi princesa se portó como siempre a la altura demostrando lo capaz y maravillosa mujer que es esa parte desconfiada de ella siempre me ha gustado, ya tenía preparada otra colección por si acaso a lo mejor alguien la quería comprar, pues, esta fue la que salvó nuestra empresa porque habíamos puesto todo nuestro esfuerzo y dinero en esta colección, ya que era algo costoso pero gracias a Dios todo salió bien y mi princesa pudo manejar la situación nosotros ganamos un negocio multimillonario y somos más ricos que antes.

Mi bella se veía tan hermosa en esos últimos vestidos que ella desfiló al terminar el desfile, ni siquiera esperé que se cambiara la cargué y me despedí de alguno que otro invitado, incluyendo nuestros padres y me la llevé aún cargada en mis brazos todos me veían como si estuviese loco pero ellos no se imaginan el tiempo que pases sin verte para mí es una verdadera tortura estar lejos de mi bella.

Siempre le voy a dar gracias al imbécil de Sebastián por haber dejado a tan maravilloso diamante que ahora es mi joya más preciada.

Nos dirigimos a mi apartamento Aunque pronto le daré una sorpresa a mi princesa Pues quiero un lugar más grande pero todavía no se lo voy a decir falta poco para nuestra boda ya he visto todos los preparativos cada paso mi madre y mi hermana me lo comentan luego se lo comentan a ella yo estoy bien con todo lo que ella afecta pero ella también solo opina supervisa y todo lo que ellas decidan está bien.

A mi bella ni a mí nos importa esos protocolos esas grandes fiestas pero nuestras familias quieren algo hermoso y único a nosotros no nos importa nada de eso si pudiéramos casarnos debajo de un puente sería perfecto lo importante es que ella sea mi esposa y yo su esposo para siempre nadie se meterá más en nuestra vida Aunque un papel no define nuestro amor muero por gritarle al mundo que es mi esposa es que ella es tan hermosa realmente la han visto no sé por qué tenía tantas inseguridades es maravillosa inteligente dulce amorosa apasionada y muy traviesa a veces hasta más que yo.

Al llegar a nuestro apartamento la dejó en la habitación y voy con mi nana para que nos prepare una pequeña botana y una botella de vino, al entrar está mi amada y hermosa traviesa vestida con una hermosa y diminuta lencería negra y una camisola negra muy sexy Dios está mujer me quiere matar.

Dios mío esta mujer en serio me quiere matar la tomo como poseído y la empiezo a besar de manera desenfrenada, está hermosa y la lencería la hace ver una diosa, pero es tanto mi deseo que se la rompo encima devoro sus enormes pechos y me pierdo en ellos, bajo hasta ese lugar que me enloquece para darle placer con mi lengua habilidosa.

La miro revolverse del placer a causa de mis caricias y sus gemidos me confirman lo que mis ojos ven, le está encantando, luego de un rato de placer la veo convulsionar en mi boca.

La beso con desesperación mientras mis manos recorren su monumental cuerpo, esta mujer me llena de una manera que ninguna otra persona había hecho, no es solo el sexo, es ella, sus besos, cuando me mira y sé que me ama como yo a ella, empiezo con mis embestidas y sus gritos de placer me satisfacen y me hacen sentir como el puto rey del mundo.

Oh amor... Ah, ah, mmm más amor mmm más Franco.

Esas palabras me enloquecen, sus uñas en mi espalda también hacen que se nuble mi juicio, estamos a punto de estallar y llegar al límite, lo sé por qué cada vez la siento más tensa y me aprieta como solo ella sabe hacerlo.

Isabella: Mi amor... Por favor...

Franco: Dime princesa que deseas...

Isabella: Más rápido por favor, oh Franco. Ah.

Franco: Como desee mi diosa.

Ambos llegamos al límite y explotamos de placer, me acuesto a su lado y ella se acurruca en mi pecho y lo besa.

Isabella: Oh, mi amor no sabes cuánto te amo, gracias por hacerme la mujer más feliz de todas.

Franco: Gracias a ti por venir a llenar mi vida de luz, mi Reina.

Así nos quedamos ambos dormidos, uno amando al otro hasta más no poder.