La Duquesa Abandonada

Dunkan está en la sala con Aina, es un poco tarde, salen al jardín a platicar sobre lo que sucede, una sombra al fondo hace que Dunkan saque su espada, Aina ve por primera vez como es la magia, nunca tuvo la oportunidad de verlo, en Luciel es básica y aún no logra controlar bien sus habilidades.

Dunkan tiene los ojos completamente negros, así logra ver a lo lejos, sombras como humo salen de él, está a punto de atacar cuando ve el filo de la otra espada, un diamante rojo, solo alguien que conoce muy bien tiene una espada así.

-Oye cálmate, con esa apariencia das miedo, si me atacas vas a matarme, necesito hablar contigo.

-Haaa es el idiota, amor me voy, te espero arriba.

Le decía Aina, que le da un beso y le guiña el ojo.

-Te ves bien así, te ves más guapo.

Dunkan solo regresa a la normalidad, pero se ríe, ella se va y Kiram se acerca.

-Que haces aquí, si vienes a molestar te voy a sacar volando.

-No, necesito hablar contigo, vamos al bosque, es delicado lo que tengo que decirte.

Dunkan duda un momento, pero termina aceptando, el vio que solo hay otro caballero, no es una trampa.

-De que vas a hablarme.

-Dunkan, quiero disculparme, todo este tiempo he estado equivocado, tal vez no me creas pero por favor, dame la oportunidad de enmendar mis errores

-Que?

-Después me disculparé con Aina, ahora empezaré contigo, mi padre desde niño fue quien me puso en contra de ti, llegó un punto en dónde deje de verte como el Hermano que eres y los celos me cegaron.

-Kiram que paso, que sucedió para que estés aquí.

-El... él es el que provocó su muerte...

-De quien hablas?

-De tu esposa, su doncella la empujó, por qué mi padre se lo sugirió, ella quería que tú la amarás y mi padre no quería a ese niño, el dice que eres, que son una amenaza, pero yo... Yo te quiero y jamás te haría eso, lo de Larisa fue un error, pero nunca he pensado en acerté daño, ni a ti ni a Luciel.

-Pero que demonios estás diciendo, como sabes eso, como estás tan seguro.

-Yo mismo lo escuché sus labios, Dunkan no es todo, él también es culpable del accidente de la mina.

Dunkan está tan enojado que de un solo golpe con su espada rompe un árbol, cuando está así es más fuerte.

Kiram solo se asombra de lo fuerte que es, cuando siente que alguien viene, es Aina quien llegaba por qué Luciel le dijo que su papá estaba usando magia, ambos se sienten y él estaba asustado, así que fue a buscarlo.

-Que pasa, que le hiciste.

-No le hice nada, bueno le dije la verdad sobre….

Aina solo lo abraza y él la ve.

-Hey, mírame, soy yo, cálmate, Luciel siente tu magia, sé asusto por qué se elevó mucho, si estar cerca uno del otro sienten la magia.

Dunkan solo apoya su cabeza en su hombro, no quiere soltarla, Kiram no sabe que hacer, si irse o esperar, le molesta que estén abrazados ahí frente a él.

-oigan sigo aquí.

Ambos voltean y lo ven con cara de pocos amigos, Dunkan solo va hacia él.

-Gracias por decirme, pero sabes también que esto no se quedará así.

-Lo sé, haz lo que tengas que hacer, yo no voy a intervenir, Dunkan por favor perdóname.

-Tú siempre serás mi hermano, solo ve a casa y ten cuidado, sé dé tu compromiso, ten cuidado con Greta, tiene una cara bonita, pero es más peligrosa de lo que parece.

-Que? Pero si ella es tierna y amable.

-Si, pero también duerme con una daga en su almohada.

-Como sabes eso?

-Su hermana era igual, por eso su accidente fue tan extraño, pero debes darte cuenta tú solo, no la provoques o te golpeará.

-Ella no sería capaz de eso, o si?

Dunkan solo reía y se iba con Aina.

-A mi ni me veas, tu jamás seras mi hermano.

-Que mala...

En la casa, Dunkan va a dormir a Luciel, cuando llega con Aina le cuenta todo, ella no puede creerlo, eso significa que el rey tiene que morir.

-Sin pruebas será difícil condenarlo.

-Si, lo se, pero debo encontrar a esa mujer.

-Dunkan, si ella confiesa solo será por la muerte de tu esposa, más nadie le va a creer que el rey le ordeno hacerlo.

-Entonces que hacemos, no puedo dejarlo pasar, debo hablar con el duque Andrew.

-Pensaremos en algo, ahora ve a bañarte, o prefieres que me bañe contigo.

-Claro que sí, tenerte en mis brazos es lo que me da la fuerza de no hacer una estupidez.

-Si sería más fácil entrar y cortarle el cuello.

-Jaja, ni siquiera lo dije.

-No, pero ella era importante, es la madre de Luciel, en ese momento de tu vida la querías y planeabas una vida con ellos, él y ella te quitaron esa vida a ti y a tu esposa, ella no lo conoció, murió sin recobrar el sentido, le debemos una venganza, eso no puede quedarse así.

-Y la tendrá, pagarán por lo que le hicieron.

En lo que ellos terminan de conversar, Kiram llega al palacio, en su cabeza da vueltas lo que le dijo Dunkan, así que desea comprobarlo.

En el palacio de visitas hay un pasadizo, logra entrar y va allá cuarto de Greta, la ve dormir profundamente, ella se ve inofensiva, siente la curiosidad de alzar su almohada, ve su rostro muy cerca y la besa, él solo alza las manos porque Greta pone una daga en su cuello

-Disculpa no quise hacerlo.

-Sin embargo, lo has hecho, sabes que puedo cortarte el cuello y saldría gritando que un hombre entro a mi cuarto, por el pánico no lo vi, imagina el rostro de todos cuando vean que eres tú.

-Greta! como puedes imaginar algo así

Un escalofrío recorrió su espalda, sobre todo por qué la daga seguía en su cuello, ella quita la daga y comienza a reír, Kiram aprovecha para quedar encima de ella.

-Quieres dejar de jugar, sabes que puedo tenerte si quiero.

-Que? Ja inténtalo y terminarás con un ojo morado, las costillas rotas y te aventaré por el balcón.

-Tú no harías eso.

-Quieres apostar.

La mirada de Greta era sería, fría y no estaba bromeando.

-No, ya me voy.

-Sé defenderme, sé manejar las dagas y mi padre nos ha entrenado en combate, recuerda que aparte de ser un duque es un general.

Ella toma el rostro de Kiram, él solo siente el roce de sus dedos, logra notar algo.

-Lo sientes, mis manos no son suaves, son ásperas, uso guantes, pero el manejo de una espada causa eso.

-Tu hermana podía hacer eso?

-Si, por eso yo no creo que cayera tan fácil de las escaleras, a ella alguien la empujó y fue alguien en que ella no desconfiaba.

-Debo irme luego hablamos

Greta de un movimiento gira y queda encima de él, solo lo ve detenidamente.

-Tienes buen cuerpo, solo no me gusta la idea de que estuvieras con esa tonta, por favor el día de nuestra boda te bañas varias veces.

-Queeee, pero que te pasa, yo...

-Jaja ya vete quedaste todo rojo.

Kiram no sabe que decir y ella solo baja de la cama.

-Ten tu capa, sal por el baño, ahí hay otra puerta, no quiero chismes.

-No, yo tampoco mi madre me va a matar si sabe de esto, me voy, siento haberte despertado.

Kiram sale y nadie lo ve, él sabe dónde están los guardias y logra evadirlos, solo ve unos que no son guardias, así que corre y se esconde en unos matorrales, su caballero lo espera ahí.

-Pero que hiciste, por qué estás así.

-Esa mujer es un demonio, no me di cuenta cuando corto las cintas de mi pantalón y mi chaqueta, casi me descubren por su culpa.

-Jaja Greta Andrew es de cuidado, debes estar alineado o ella es capaz de golpearte.

-Ja ja ja que gracioso, vamos, debo hablar mañana con mi madre.

El caballero solo reía, Kiram solo ve los cortes de su ropa, cuando se la quita ve que son puntos dónde ella cortó, de hacerlos profundos estaría muerto.

-Voy a morir.