Ailyn, una joven con un vínculo único con la luna, fue destinada como la luna del rey alfa, pero la diosa luna fue testigo mudo de su humillación al ser rechazada el día de su presentación ante la manada.
El rechazo del alfa había sido como una daga clavada en su corazón. Con la frente en alto Aylin emprendió su camino, lejos de la manada que la había despreciado siempre.
Nunca imaginó que aquel bosque oscuro, lleno de sombras, la llevaría a conocer al ser que cambiaría su destino para siempre.
NovelToon tiene autorización de Rosangel Pérez para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo 3: El bosque de los condenados I
La muerte de mis padres, protegiendo a la manada y protegiéndome a mí, fue el inicio de mis desdichas. Quedé huérfana siendo solo una adolescente de trece años, a quien nadie quiso acoger por ser una Omega y a quien culparon de la muerte de sus padres, como si yo hubiera traído a esos lobos renegados a atacar a la manada y les hubiera pedido que mataran a mis padres, dejándome sola y desprotegida.
Una cabaña sola y triste fue lo que me quedó de mis padres, y tuve que madurar siendo aún una niña, porque nadie se haría cargo de la Omega huérfana y "buena para nada". Y eso solo era lo más bonito que decían de mí, porque con solo tratar de recordar el resto de palabras hirientes que usaron en mi contra me hace doler el pecho con un dolor mayor, inexplicable e incontrolable, que ni siquiera se compara con el dolor que sentí por el rechazo de Dante. El dolor por el rechazo de Dante fue una cosquilla ante todo el dolor que la manada Reed Moon causó en mí desde que tengo memoria, solo por nacer siendo Omega y perder a mis padres.
Las lágrimas caen por mis mejillas mientras recuerdo los pocos momentos felices de mi vida, aquellos en los que mis padres aún estaban conmigo. A pesar de lo poco que teníamos, nunca nos faltó el amor. Abandoné mis pensamientos al sentir una pequeña opresión en el pecho y, al mirar a mi alrededor, me di cuenta de que había llegado a los límites de la manada donde viví toda mi vida. Sin embargo, nunca fue mi hogar, ya que nunca me aceptaron allí, a pesar de dar lo mejor de mí. El rechazo se intensificó cuando se supo que yo estaba destinada a ser la Reina Luna, aumentando el maltrato hacia mí. Aun así, me quedé y lo soporté, porque creí que Dante me amaría y cuidaría por ser su Luna. Pero la realidad me golpeó: para él, nunca valí, por mucho que me esforzara. Por eso, ahora, que se pudra. Lo único que me aferraba a la manada era el vínculo con Dante, y ese vínculo ya no existe. Mis ganas de creer en un mundo donde omegas, betas, deltas y alfas pueden vivir felices, juntos, en paz e incluso trabajar juntos, llegó a su fin.
En la manada Red moon, solo hay una familia rescatable cuyos valores y pensamientos no están limitados por el rango. Para ellos, todos son iguales, y el respeto se gana, no se obliga, ni siquiera desde la cima del poder. Por eso, si algún día me necesitan, no dudaré en acudir en su ayuda y destruir la manada si es necesario para protegerlos.
El rechazo de Dante y de toda la manada mató mis deseos de paz, unidad y prosperidad entre todos los rangos del linaje lobuno. Ahora, solo me importan mi supervivencia y felicidad. Un último paso y estaré fuera de los límites de la manada. Un escalofrío recorre mi cuerpo al adentrarme en el Bosque de los Condenados, territorio de los vampiros que no se adhieren ni respetan a su rey, un ser implacable con todo aquel que quebranta sus reglas. Acelero el paso para salir rápido de este territorio, porque, aunque soy fuerte, no quiero verme envuelta en peleas constantes por mi supervivencia. Lo mejor es evitar conflictos innecesarios.
Sigo avanzando a través del Bosque de los Condenados cuando unos gritos llaman mi atención. Al agudizar el oído, gracias a mi audición lobuna, descubro que quien grita es una mujer. Ella ordena que se detengan, advirtiendo que, de lo contrario, su hermano desatará una guerra que condenará a la destrucción el Bosque de los Condenados.
Gracias a mi aguda audición y velocidad, llegué al lugar de donde provienen los gritos y me encontré con una escena desagradable: una joven vampiresa rodeada por un grupo de vampiros que la observan con morbosidad, mientras intentan tocarla en contra de su voluntad. A pesar de su juventud, la vampiresa se defiende con tenacidad, pero aun así, no es rival para los diez vampiros que la tienen acorralada.
La lógica dicta que debo seguir mi camino y no meterme en problemas con vampiros, siendo yo una loba, ya que nuestros linajes nunca se han llevado bien; siempre están en guerra por cualquier motivo. Sin embargo, la razón me impulsa a no permitir que esa joven sea ultrajada, porque la forma en que esos vampiros la miran y pretenden tocarla sin su consentimiento deja claras sus intenciones obscenas y repugnantes. Cuando dos de los vampiros sujetaron a la chica, uno por cada hombro, y los otros se acercaron para destrozar su ropa, decidí que es momento de actuar. No me importa si es vampira y yo una loba, porque, al fin y al cabo, sigue siendo una mujer, y ninguna mujer merece que le pongan un dedo encima si no lo desea.
__Solo a la fuerza pueden someter a una mujer, porque la conquista no existe en su vocabulario. Son seres repugnantes que disfrutan del dolor que causan, y una mujer en su sano juicio jamás se dejaría engañar por alguien tan insignificante que no merece ser elegido como alma gemela__. Todos se sorprenden con mi llegada e intromisión, y más al ver que entro en el círculo asqueroso que formaron en contra de la joven vampira para debilitarla y abusar de ella.
__Lárgate, perra, no te metas donde no te llaman__. Me río al oír el insulto poco creativo del vampiro, que asumo es el líder del grupito cochino de abusadores
__Me voy si consigues decirme un insulto un poquito más creativo que logre herirme, porque 'perra' ya pasó de moda, cariño__. Mis palabras no causaron en los vampiros la misma gracia que en mí, lástima, yo creí que era un buen chiste, pero la risita de la joven me hace saber que sí estuvo bueno mi chiste, y que son ellos los que están dañados, que no saben reconocer el buen humor.
__Te lo advertí, perra, y ahora, si tanto quieres quedarte y defender a esta vampira de sangre azul, entonces también servirás para satisfacer nuestras necesidades sexuales, y después te convertirás en comida__. Me río del comentario del vampiro, porque solo en sus sueños podrán tenerme.
__Jajajajaja, por favor, lo que ustedes se cargan entre las piernas ni juntos podrán lograr satisfacerme, porque si tienen que recurrir a tomar por la fuerza a una mujer, eso deja en clara evidencia que no son lo suficientemente hombres para satisfacer a una mujer en una situación normal__. Uno de los vampiros se lanzó al ataque, pero esa fue la última acción que hizo, ya que Lily, mi loba, se hizo presente parcialmente y, con mi mano transformada en garra, le arranqué el corazón, el cual dio sus últimos latidos en mi mano hecha garra. El vampiro que creyó poder atacarme sin recibir un castigo cayó sin vida, y los otros miraron la escena con evidente miedo en sus ojos.
__Ay, hieren mis sentimientos al verme como si yo fuera un monstruo, solo soy una hermosa mujer a la que no le gustan las injusticias, así que se largan ahora y continúan con su vida patética o mueren como su amigo__. Los vi dudar, pero la duda se desvaneció y creyeron buena idea atacarme en grupo, sin saber que firmaron su acta de defunción. Esta loba no ha tenido un buen día y ellos serán perfectos para desahogar toda la mierda que llevo dentro.
🌕
🌕
🌕
Holis 👋🏼👋🏼👋🏼.
Nos vemos pronto en el siguiente ⏭️ capitulo ✨✨✨.