¿Cómo te sentirías si amaras a tu propio primo? La respuesta es ¿por qué no? Si tu primo es un hombre muy guapo y amable, aunque su carácter y actitud sean tan fríos como el Polo Norte.
Eso es lo que le pasó a Bayron Arbeto, un precioso omega de dieciocho años que quería mucho a Agam Mateo, su primo mayor.
Un alfa conocido por ser muy frío, rígido y nunca visto cerca de ningún omega. Pero lamentablemente Agam Mateo no siente lo mismo, el alfa siempre ha considerado a Bayron como su propio hermano pequeño. ¿Y cómo podría un hermano amar a su hermano?
-Amarte es un regalo para mí- Bayron Arbeto
-Ser amado por ti es un desastre para mí- Agam Mateo.
¿Cómo va la historia de amor de ambos? ¿Se producirá el matrimonio entre primos? Ven a seguir su linda y adorable historia de amor.
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Part. 21
-Lo siento bebé, no quise reírme de ti- Leo intentó con todas sus fuerzas contener las ganas de reír.
-Leo, ¿crees que debería rendirme?- Preguntó Bayron al ver que su primo guardo silencio.
-¿Rendirte en qué?- Leo repitió con el ceño fruncido.
-Rendirme con A- Bayron explicó, mirando lánguidamente hacia abajo.
-Pronto estarán comprometidos y se casarán, además, A siempre me considero su hermano.
-¡Entonces simplemente ríndete!- interrumpió Leo.
-¿Pero Leo...?
-¿Por qué? ¿No estás listo para rendirte? Entonces continúa tu lucha antes del día de su boda- Dijo Leo casualmente.
-¿Pero qué pasa si el resultado sigue siendo el mismo?
-Sí es así, acéptalo con gracia, al menos has luchado, cariño- Leo abrazó a su primo.
-Además, ¿dónde está el Bayron que yo conozco? ¿El Bayron que está lleno de confianza y que nunca se rinde?- Bayron miró a Leo con una sonrisa en los labios.
-Tienes razón, soy Bayron Arbeto, y un Arbeto no puede perder antes de pelear.
-¡Bueno, este es el Bayron que conozco! Lucha hasta el final- Leo alborotó el cabello de Bayron con entusiasmo y ambos se rieron juntos.
-Oh, sí Leo, ¿Quiero preguntarte algo?- Preguntó Bayron al ver que su primo guardaba silencio.
-Cariño, quiero preguntarte algo, pero tienes que responder con sinceridad- Bayron rápidamente asintió con la cabeza.
-¿Qué quieres preguntar, Leo?
-¿Crees que soy hermoso o no?- Leo respondió a la pregunta de Bayron con una pregunta.
-Por supuesto que eres hermoso, sólo los ciegos dirían que eres feo.
-¿Hablas en serio? ¿No estás mintiendo sólo para hacerme feliz?- Bayron volvió a asentir con la cabeza.
-¿Por qué preguntas eso?¿Alguien te llamó feo?
-No, es sólo que todos los alfas que se acercan a mí no tengo ninguna noticia de ellos al día siguiente- Leo se quejó, porque no sólo había tenido una o dos citas con unos alfas elegidos por Alan, sino que había tenido más de veinte veces citas a ciegas.
Pero todo fracasó porque al día siguiente los hombres dejaron de contactarlo y parecían evitarlo. Bayron miró fijamente a Leo.
-¿Será que están siendo amenazados por tus hermanos?- No fue sin razón que Bayron acusó a los hermanos de Leo, porque hasta donde el sabía, Lio y Lou eran muy posesivos con Leo.
-Mis dos hermanos no tienen nada que ver con todos esos alfas, les he preguntado. Y es más, mis dos hermanos no tienen ningún poder aquí, por eso le confiaron a Antón- explicó Leo.
-Te mudaste al departamento de Alan, porque Bryan seguía observando cada uno de tus movimientos- bromeó Bayron.
Leo se rió de las palabras de Bayron, porque lo que decía su primo era verdad. Se mudó al departamento de Alan para poder vivir libremente sin la supervisión de Bryan.
-¿Te das cuenta de esto? ¿El destino romántico entre el mio, el tuyo y de Alan es tan triste?
-Amo a mi propio primo que se va a casar con otra mujer, y tú no lograste dejar a un alfa casado, mientras que el novio de Alan se casó con su propia hermana- Bayron respiró hondo.
-Sí, tienes razón- Leo y Bayron se miraron y luego ambas exhalaron profundamente, indicando que los dos omegas estaban cansadas de su romance fallido.
