ALPHA EROS

De un momento a otro el Alfa siente El cambio brusco de la atmósfera, solo logra escuchar un canto suave qué hace que Alfa Eros cierre los ojos lentamente, siente la suave brisa removiendo su cabello, hasta que logra abrir los ojos nuevamente, estaba en una habitación decorada completamente en negro, Eros se da la vuelta encontrándose con una copa de Sangre, la Luna tenía el intenso plateado esta noche iluminando su rostro, la vista del Alfa no estaba nublado en lo absoluto, sus ojos eran amarillos lentamente se acerca al balcón no se sentía la presencia o la cercanía de la Vampiresa entonces se percata de que estaba en lo que parecía ser un faro abandonado, las tinieblas le daban el aspecto tenebroso.

La habitación de la Vampiresa es un lugar frío y sombrío, donde el aire se siente tenso, pero el exterior era escalofriante, Eros sabe que estaba envuelto en el hechizo de la Vampiresa, podía sentir la fragancia de melocotón estaba presente y pen*trando sus fosas nasales, entonces Alfa Eros escucha la suave melodía de un canto.

<Закройте свои желтые глаза, как лучи солнца, почувствуйте холод моего присутствия вокруг вас, позвольте желтому цвету переступить через черный цвет смерти, теней, тьмы, подумайте о том, чего больше всего жаждет ваше сердце, подумайте, что это желание в вашей власти, перед вами.>

*Cierra los ojos amarillos como los rayos del sol, siente la frialdad de mi presencia alrededor tuyo, que el amarillo sea revocado por el negro de la muerte, de las sombras, de la oscuridad, piensa en lo que tu corazón más anhelo, piensa que ese anhelo lo tienes en tu poder, ante ti*

Eros cierra los ojos, entonces siente el tacto frío de la Vampiresa subiendo por su torso, la frialdad traspasa la tela de la camisa del Alfa, el mundo sobrenatural parece detenerse, las hojas de los árboles dejan de moverse, el Alfa continua con los ojos cerrados.

— Emily — Susurra Alfa Eros mientras la Vampiresa desprende los botones de la camisa del macho, posteriormente mete la mano en la copa de Sangre arrebata la camisa del Alfa dejando manchas de sangre por la piel de Eros.

— Sí, soy Emily — Murmura la Vampiresa con los ojos rojos mirando al Alfa, ella tenía una capa negra que cubre todo de ella, las sombras la protegen nada más sus ojos rojos son visibles en la oscuridad de aquella habitación en lo más alto de aquel Faro, en dónde la luz de la Luna solo enfoca en el Alfa que tenía ya el torso desnudo.

Eros era débil, era manipulado por el poder de la Vampiresa al ser Hechicera, el Alfa veía en su mente a Emily, creyendo que ella estaba allí con él, la Vampiresa acaricia el rostro del Alfa dejando la sangre en los labios de Eros qué seguía con los ojos cerrados.

— Abre tus ojos, mírame — susurra la Vampiresa mientras hechizada al Alfa, sus ojos rojos se vuelven más intensos, Eros obedece y abre los ojos, y allí el Alfa veía a la loba, tan hermosa, delicada, pero con la piel pálida y los ojos rojos, Darko gruñe, pero era doblegado por su totalidad por la Princesa con Sangre Hechicera.

— Ven a mi Alfa, déjame reclamarte — susurra la Vampiresa mientras cierra sus ojos y deja caer la Capa que cubre su cuerpo pálido, era tan delgada, tenía cicatrices en su cuerpo, como las grietas en el suelo, Eros la toma de la barbilla lentamente.

— ¿Por qué estás tan pálida? — La voz del Alfa se escuchaba con ronquera.

— Por qué los Vampiros somos pálidos, llevo días sin alimentarme de la sangre de un humano, la sangre de los lobos es asqueroso y más la sangre de los abusadores — susurra ella recordando a los Guardias del Alfa Rey.

— Tú no eres una Vampiresa Emily, tú eres una Loba, eres mi Luna, mi destinada — Dice el Alfa cuyas manos empiezan a recorrer el frío cuerpo de la Vampiresa, sus miradas se encuentran, eran el rojo carmesí y el Amarillo del sol miradas cargadas de deseo y peligro.

La Vampiresa se aparta llegando hasta en dónde estaba una Vela encendida y un cuadro de varias gotas de sangre manchando el suelo, ella le daba la espalda al Alfa, Eros solo contemplaba la espalda solitaria de la Vampiresa, mirándola en silencio, su corazón empieza a latir con fuerza, pero su sangre parece helar entonces ella se da la vuelta dejando caer la copa, entre las sombras se distingue la figura imponente de un Alfa, cuya presencia despierta una pasión sin amor en la Vampiresa. Sus ojos brillan con un deseo voraz, su piel pálida contrasta con la oscuridad de la habitación.

— Ven a mi Alfa — y él se acerca lentamente la Luna en ese preciso momento es cubierta por nubes mientras la Vampiresa toma de la mano al Alfa y lo guía hasta lograr que se siente en el suelo allí dónde la sangre se ha derramado, Eros cierra los ojos nuevamente y despoja al Alfa de sus prendas totalmente, la cortina deja el lugar en total oscuridad.

Segundos después es la Vampiresa quién toma el control sentándose ahorcajadas por encima del Alfa, su mano se posa en la cintura de ella, entonces ella cierra los ojos sus miradas se vuelven a encontrar, Eros era débil, sumiso ante tremenda Vampiresa de sangre pura, poderosa.

— Emily, puedo lastimarte — susurra el Alfa, pero entonces el mismo emite un gruñido cuando la Vampiresa deja que él se hundiera en lo más profundo de ella, la Vampiresa se queda quieta mientras el Alfa siente como ella se tensa en su brazo, aunque él quería reaccionar ella no se lo había permitido. Segundos después Darko de librarse de la posición de la Vampiresa, despertando su instinto de Bestia, entonces ella es dejada en el suelo, y el cuerpo de Eros se cierna por encima de ella traspasando con fiereza la feminidad de la Vampiresa tomando el cuerpo de ella con una fiereza qué hace que ella tiemble, las estocadas son profundas, certeras, el Alfa Gruñe mientras siente como el interior de la Vampiresa se contrae.

Eros la pen*etra sin contemplaciones y la Vampiresa cierra los ojos, en eso Eros la ve, ve a Emily, el Alfa trata de detenerse, pero la Vampiresa vuelve a maquinar su mente al mismo tiempo que la pen*traición se vuelve más intensa.

En un instante de intensidad, la Vampiresa marca al Alfa como suyo, dejando una huella oscura en su piel que arde como fuego. El viento azota con fuerza en ese momento, como si la misma naturaleza temiera lo que está sucediendo en esa habitación. La atmósfera se siente cargada de peligro y lujuria, creando un ambiente de temor y excitación intensa, Eros se lleva la cabeza hacia atrás mientras el veneno de la Vampiresa recorrer sus arterias principales.

Entre tanto ante el Rey Alfa se encontraba el Rey Vampiro han pasado tantos años para que ellos volvieran a estar frente a frente.

— Quiero ver a la loba que Eros tenía en su poder — Dice el Rey Vampiro con seriedad, era evidente que ambos Reyes querían aniquilarse el uno al otro.

— La loba ha desaparecido ¿alguna vez escuchaste hablar de la Vampiresa de la Dinastía con Sangre Hechicera? — Pregunta el Alfa Rey.

—Esa Vampiresa es la maldición de todo el mundo sobrenatural ha muerto hace miles de años, yo mismo la mate, es el ser más poderoso de nuestro mundo, ella está en el infierno o en donde sea.

— ¿Está seguro? — Pregunta el Alfa Rey con una sonrisa peligrosa.

— Si ella volviera ten por seguro que tu cabeza y la mía estarán rodando a sus pies, si ella volviera de la muerte, debe de unirse a un Alfa, debe de marcar al Alfa y debe de alinear a una aliada poderosa, pero si no marca a un Alfa si es que no hay unión ella regresa al Coliseo es allí donde pertenece ¿Qué ocurre? ¿Tienes miedo de la Vampiresa?

— No soy el único que debería de tener miedo si ella por alguna razón volviera.

— Los muertos no regresan y menos Emily, ella murió, yo la mate, pero para nuestro mundo si ella estuviera viva sería la resurrección de los Híbridos porque solo ella puede dar vida a Híbridos.

— ¿Es nada más una Vampiresa verdad?

— Si, ella no es híbrida, es una Vampiresa de sangre pura, Diosa única que puede alterar todo a su favor ¿Qué ocurre?

— Seré directo, tengo mis sospechas de que ella está rondando mis territorios.

— Eso no puede ser — Responde el Rey Vampiro.

— Sucesos llenos de misterios ocurren.

— Si es así, tanto tu Reinado y el mío deben de buscar a 100 brujas, cada Vampiresa qué se encuentre a partir de este momento debe de ser aniquilado con una estaca de plata en forma de cruz para evitar que sea Híbrida, más las cadenas de plata que se coloca en el cuello de las lobas, si la Vampiresa regresa las 100 brujas deben de lanzar el hechizo de muerte de esa manera matarla, solo 100 brujas pueden contrarrestar su fuerza, ni más ni menos.