EXTRAÑANDO-TE

Oliver: Oye estas bien.?, donde te metiste anoche.?, te busqué por todo el club, luego fui a tu apartamento y tampoco estabas allí, donde diablos te metiste anoche.?

—El parecía preocupado—

Saroth: Estoy aquí ¿no.?, además, tú  me dejaste sola casi toda la noche, y ahora dices que me buscaste y que estabas preocupado.?

—El suspira. sabía que estaba preocupado, jamás me había ido sin avisar, solo lo estoy molestando.—

Oliver: Claro que lo estaba, siempre avisas cuando te vas a ir.

Saroth: Me fui con una linda chica anoche, lo siento por no avisarte antes.

—Me disculpe sinceramente, además, ahora estábamos en la casa de mi madre y no quería que siguiera con lo mismo. Ayer después de saber el nombre de la chica que no salía de mi mente, aparecieron sus amigas algo preocupadas, de inmediato solté su mano algo asustada, luego sus amigas se la llevaron sin darle la oportunidad de despedirse, pero me quedé contenta porque ella antes de alejarse demasiado de mí... se volteo y me miró, dándome una sonrisa antes de retirar su mirada de mí, eso fue suficiente para mí, después de eso volví a casa, no se porque el dice que me buscó  en casa cuando estuve toda la noche en ella.—

-Llego la luz de mis ojos.

—nos sorprendió a la entrada de la mansión de la casa mientras Oliver me reclamaba.—

Saroth: Pero que dices, no puedo seguir siendo la luz de tus ojos, abuela.

—Ella es mi abuela, Ava, por parte de mi padre, siempre me ha dicho la luz de sus ojos, pensé que dejaría ahora que ya soy mayor, mucho mayor, pero veo que no es así.

Le dí un fuerte abrazo y unos besos en sus mejillas, adoro a mi abuela, luego Oliver hizo lo mismo.—

Oliver: Lo mejor de venir aquí... es verla, abuela.

Ava: Pero que dices..

—Dice sonriendo haciendo un gesto con su mano algo avergonzada.—

Oliver: Es cierto, aquí entre nos..

—él se acerca a mi abuela justo en su oído, luego mi abuela sonríe y dice.—

Ava: Pero que dices..

—Ella se larga a reír, Oliver también esta sonriendo, que al parecer esta coqueteando con mi abuela.?—

Saroth: De que se ríen.?

—Pregunté acercándome a Oliver.—

Saroth: Eres un hablador dulce no.?, ahora mismo tienes a mi abuela a tus pies como siempre.

—le dije al oído. Mi Abuela  me adora, pero con Oliver es otro precio, con él  podía estar sonriendo todo el día y no se cansaría, desde pequeño Oliver fue así con mi abuela, por eso más que todo que me cayó bien cunado lo conocí a la edad de 8 años.—

Oliver: Solo lo dices porque ella me quiere más a mí que a tí.

—me dijo yendo con mi abuela para luego pasarle un brazo por encima del hombro y dirigiéndose adentro de la casa.—

Oliver: Vamos abuela, ya tengo hambre.

Ava: Ooh, claro que sí, te encantará el desayuno que hice preparar hoy.

—dios, se olvidaron de mí, como casi todo el tiempo que vengo con él. Entré  a casa y no vi a mi madre, era extraño ya que ella fue la que quería que vinieras a desayu...—

-Cariño! Ya estas en casa, cuanto tiempo sin verte.

—Hablando de rey de Roma..., Ella es mi madre, Elizabeth Russell, Ceo de las empresas familiar, pero eso ya lo saben. Hoy parecía emocionada, normalmente era algo fría conmigo a menos que necesitara algo de mí  o me hablaría de algo muy importante, que será esta vez.?—

Saroth: Hola madre. Apenas han pasado dos días desde que no nos vemos, no es demasiado.

—le dije, ella se acercó y me abrazó sonriendo.—

Elizabeth: Eres mi única hija, no verte así sea un día es una eternidad para mí.

—dijo separándose mientras me miraba de arriba a bajo, frunci el ceño y pregunte.—

Saroth: Estoy mal vestida.?

Elizabeth: Claro que no, siempre andas a la moda.

—que.?, siempre ando a la moda.?, pero si casi  siempre ando de traje, como que siempre visto a la moda.?, este desayuno no será nada bueno.—

Elizabeth: Donde esta mi futuro yerno.?

—Sabía que no tardaría en preguntar por él.—

Saroth: Alguien se lo llevo en dirección a la cocina.

—Ella miró hacia la cocina para luego sonreír, ella podía imaginar de quién le estaba hablando.—

Elizabeth: Vamos, hoy el desayuno será en el jardín.

—Nuestra mansión era grande, de dos pisos, tenía un elevador a la mitad de las dos escaleras media luna  que estaban a la mitad de la casa, al entrar por la puerta principal... lado izquierdo estaba la sala de estar, y antes de llegar a ellas había una pequeña escalera de tres escalones, al fondo una sala común, que mi madre usa para tomar el té con sus amigas, al lado derecho estaba la cocina y lo que se trataba de la sala de cine, y al lado de la cocina estaba el jardín, donde estaba la piscina y un jacuzzi, pero donde íbamos a desayunar era en la parte trasera de la casa, en el otro jardín, donde habían una cantidad de flores de todo tipo, la cual ha planteado y cuidado mi abuela, un mesa redonda de 6 puestos, ya que solo la usamos para los desayunos familiares. En el segundo piso, estaban las habitaciones y la sala de reuniones de mi madre, la cual habían en total 7 habitaciones sin contar con la sala de reuniones, el piso de la casa en ambos pisos eran de mármol blanco al igual que las escaleras, los muebles de la sala eran de un color blanco pero un blanco más brillante, ellos resultaban más, en el media había una mesa de vidrio sostenida también por algo de vidrio, y al frente había una gran pantalla de televisor que solo la uso yo cuando vengo aquí, yo digo que solo está de decoración, el diseño de la sala de estar fue cambiada por mí hace poco, pero los colores los escogió mi madre a pesar que le dije que cambiara el color de los muebles, pero no me escuchó, ah! y justo en la mitad de las escaleras... hay un lindo candelabro plateado largo colgado, también se le puede llamar 'Lámpara colgante'.

Ya estábamos desayunando, mi abuela no dejaba de reír con Oliver, mi madre solo respondía su teléfono, y yo... yo estaba pensando en Mia, pero me odio ahora mismo por no pedirle su número, pero contenta porque ahora sé su nombre al menos, de repente mi madre habló.—

Elizabeth: Y bien, cuando te convertirás oficialmente en mi yerno.?

—preguntó mirando a Oliver. Ella soltó eso sin siquiera palpearear, y eso ahora era un problema para ambos. Yo mire a Oliver llevando un bocado de comida a mi boca, él  me miró asustado, entonces le pique un ojo y hable.—

Saroth: Madre, sabes muy bien que por el momento no se puede, ya te habíamos dicho, nos estamos conociendo para ver si podemos vivir juntos, no queremos casarnos y después darnos cuenta que solo nos llevamos bien como amigos.

—espero y me crea, yo podía vivir con Oliver sin problema, él  era un chico educado, cariñoso, amable, sabe cocinar y hacer los oficio del hogar, él  era perfecto, pero había un problema... no me gustaba para nada de esa forma.—

Elizabeth: Como que conocerse mejor.? se conocen hace 20 años, ahora tienen 28, como que no se conocen lo suficiente.?

—ella hablo firme y con dureza. Sabía que no podía engañarla para siempre, pero lo haría el tiempo que fuese necesario, no me casaría con Oliver por la única razón que no me gusta y solo lo veo como un amigo, no cabe resalta que me gustan mucho más las mujeres, y tanto mamá, Oliver y mi abuela lo saben, no se porque ella se sorprende que no quiera casarme.—

Saroth: Madre, una cosa es ser amigos, y otra cosa es casarte y compartir tu espacio con otra persona, puede que seamos amigos hace 20 años, pero durante esos 20 años él  ha vivido en su propio espacio al igual que yo, quien sabe si nos llevaremos bien cuando vivamos juntos.? eso nadie lo sabe, por eso te pedimos tiempo para aprender a compartir nuestro espacio personal con alguien más.

—Mi abuela asintió al igual que Oliver. Yo estaba rogando que mi madre me creyera y no habláramos más del matrimonio, y parece que la estoy convenciendo porque se quedó pensando por un buen rato.—

Elizabeth: Bien, tienes razón, no debemos apurar las cosas para que estas salgan según lo planeado.

—¡Yes!, Nos salvamos por esta vez, pero... esto se saldrá de mis manos si no digo la verdad pronto.—

Ava: Eres muy Cansona Elizabeth, ellos son jóvenes, no los presiones.

—Aunque no le he dicho nada... tengo un extraño presentimiento que ella sabe más de lo que creo.—

Elizabeth: Pero si ya dije que no los voy a presionar, nada más pido que no se vayan a embarazar antes de la boda.

—Ante eso, casi me ahogo con la comida que tenia dentro de mí boca, entonces volteé a ver a Oliver, diciéndole que no vaya a embarazar a ninguna de sus mujeres que lleva a su casa todas las noche con solo la mirada, él la  entendería.—

Saroth: Que dices madre.?

Elizabeth: Acaso ustedes no están teniendo íntimidad ahora que están tratando de vivir juntos.?

—Madre mía, así lo tuviéramos no se lo diría nunca, que vergüenza, además, íntimidad si tenemos, pero no entre nosotros, ni siquiera vivimos en el mismo apartamento.—

Ava: Ellos no te lo dirían sí así fuese.

—dijo tomando de su café que no puede faltar todas las mañanas.—

Saroth: Con razón tú eres mi abuela, abuela.

—Ella me sonríe tomando mi mano por encima de la mesa, mi madre solo nos vio y voltea los ojos, como diciendo, 'no me importa' cuando en el fondo sí le importa.

Ahora ya estaba en mi oficina mirando el avance del diseño de la señora Grace, así que haré una reunión con los muchachos.

Entonces le marco a mi secretaria.. después de un timbre ella responde.—

Saroth: Hola, señorita Angel, le puede decir a los chicos que tenemos una reunión en 5 minutos, por favor, gracias.

—Le dije y corte la llamada, tome mi laptop y salí de la oficina en dirección a la sala de reunión. Yo tenia un pequeño equipo de seis personas, no necesitaba más a pesar de la gran demanda que teníamos, yo era capaz de manejar lo con tan solo ellos 6, ellos eran jóvenes y estusiatas, tenían las ganas de aprender y eso era lo más importante para mí, sin meditar que ellos eran buenos en esto, tenían bastante creatividad y eso yo se los reconocía con algo de dinero cuando les pagaba y una que otra salida temprano o tomar un día libre, el que se esfuerza hay que premiarlo. Hoy debía ir a la casa de la señora Grace y quería llevar a dos de ellos para que vayan agarrando experiencia, aunque ya llevaban tiempo trabajando conmigo, y sabía que ellos eran tan buenos que podrían ellos solos diseñar sus propios espacios de interiores sin mi guía, pero también sabía que ellos necesitaban tantas experiencias como fuese posible, por eso cada dibujo que hacia  se los daba a conocer y que ellos sugirieran  sus ideas para que pudieran expandir sus mentes aún más, y la verdad sus ideas me ayudaban bastante, es como dice el dicho "tú me ayudas y yo te ayudaré" no se si así era, pero es algo similar. Y ellos me conocían bien, cuando yo llegue a la sala de reunión... ellos ya estaban allí, cuando digo 5 minutos, eso significa que de inmediato, aprendieron a las malas, pero aprendieron. Los primeros meses, la mayoría se quedaban afuera, porque en el momento que yo entre a esta sala los que no están se quedan afuera.—

Saroth: Buenos días.

-Buenos días, señorita Russell.

—dijeron todos.—

Saroth: Bien, iré al grano, ya que debo salir en...

—mire la hora en mi reloj.—

Saroth: 15 minutos por mucho. Ok, proyectare el diseño del trabajo que le haremos a la señora Grace, hoy iré con dos de ustedes a ver su hogar para poder diseñar acorde al diseño de su sala y la habitación del niño..

—las imágenes se proyectaron en la pantalla frente a nosotros.—

Saroth: Eso que están observando son las ideas del cliente, pero sabemos que eso puede cambiar cuando veamos el espacio de la casa, como también puede quedar igual, entonces... quien quiere trabajar conmigo en este trabajo.?

—Preguntar era demasiado ya que sabía que todos querrían trabajar conmigo, eso era obvio, si no para que vinieron a buscar empleo en mi empresa.?. Y tal cual, todos levantaron la mano, entonces para ser justo haría un juego, yo era estricta con el trabajo, pero sabía que para tener una buena imaginación no Debías estar estresado, por eso aveces hacia juegos para relajarnos y que el trabajo no fuese demasiado pesado.—

Saroth: Bien, los dos que ganen en el juego, piedra, papel o tijera.... esos dos irán conmigo.

—Apenas ellos escucharon eso, se emocionaron.—

-Eso será fácil srta Russell.

—demandó la crespa sentada  a mi lado derecho de la mesa, yo sonríe.—

Saroth: OK!, Piedra, papel o tijera.?

—Mire para ver quien había ganado, y solo había sacado papel la chica a mi lado, la cual su nombre es; Annia, ella salto de felicidad mientras que los otros renegaban por haber perdido,  y me sorprendió porque ella dijo que sería fácil, y realmente lo fue para ella, en cuanto a los otros... todos sacaron piedra, pero porque iba a llevar a dos, haría otra ronda.—

Saroth: OK, una ronda más; piedra, papel o tijera.?

-¡¡Gane!!

—Salto un chico al final de la mesa, sonreí ante eso. Todos sacaron papel, acaso todos tienen el mismo cerebro.?, el único que saco tijera fue Richard—

Saroth: Bien, Annia y Richard serán los que me acompañaran el día de hoy. Por favor, los que se quedan no descuiden su labor mientras no estoy, de acuerdo.?

-Sí señorita Russell.!

—Les di una sonrisa mientras tomaba mi laptop y salía de la sala. Pocas personas se había subido en mi auto, de echo solo Oliver le había permitido subir a el, y no fue porque quise, él se subió y no pide bajarlo, así que no me quedo de otra. Pero todo caminaba que hoy Annia y Richard se subirían a el, pero no podía permitir eso, la persona que se suba a el con mi permiso.... será una persona muy especial para mí, no podía subir a cualquiera a el, era mi auto personal, por eso pocas personas se habían subido a el, y por eso tenía varios auto, pero no en la empresa, entonces le llame a mi chófer para que los llevara a ellos. Esperamos por 10 minutos y llego mi chófer. —

Chófer: Buenos días, Srta Russell, para que soy bueno.?

Saroth: Disculpa por sacarte de tu casa, pero surgió algo y tuve que llamarte.

—Hoy le dije que podía descansar, pero no me acordaba que hoy iría con la señora Grace, y con algunos de mis empleados cuando se lo dije.—

Chófer: No sé preocupe señorita, siempre estaré a sus servicios.

—Sé que lo que está diciendo es por educación y porque soy su jefa, pero el trabajo de chófer no es agradable, ya que te toca aveces durar horas y horas manejando sin oportunidad de descansar, por eso agradezco el trabajo que él hace para mí.—

Saroth: Solo será un viaje de ida y vuelta, después te puedes ir a descansar. Bien chicos, Suban.

—Les dije y ellos se subieron después de mí. Le dije al chófer donde iríamos y puso el auto en marcha. Donde iríamos nos llevó 40 minutos, y eso que no había tráfico,  pensé que nos tomaría menos tiempo porque pensé que estaba cerca, pero me di cuenta que no es así, estaba algo lejos, antes de llegar ya le había avisado a la señora Grace  que iría, así que cuando llegamos ella nos estaba esperando.—

Sra Grace: Buenos días señorita Russell.

Saroth: Buenos días señora Grace.

—Ella era una mujer de unos 40 años, pelo castaño corto hasta los hombros, era la típica mujer rica que cree tiene todo para humillar a cualquiera, por que digo eso.?, porque cuando estuvo  en mi empresa para contratar nuestro servicio, miró  a mis empleados con desagrado y arrogancia, pero no podía clasificar mis clientes por como se comportan con mis empleados, para ser unas de las mejores empresa de diseño de  interiores  los necesitaba a ellos, como ellos me necesitaban a mí, así que me tragaba la rabia que me daba cuando  miraban a mis empleados como cosa que no sirve y solo debía aparentar y comportarme bien antes ellos. Como también habían personas que tenían mucho dinero, pero me sorprendían lo humilde que eran cuando l@s conocías, por eso cada día me gustaba más mi trabajo, porque tenía la certeza que me encontraría con personas que realmente valían la pena diseñar para ellos.—

Sra Grace: No sabe lo emocionada que estoy que este aquí.

—Ella realmente parecía emocionada, yo solo le sonreí.—

Sra Grace: Sigame por aquí, por favor.

—Nos invito a pasar y nosotros la seguimos. Nos mostró donde quería los cambios, y la verdad... todo quedaba perfecta con lo que ella nos habló en la oficina.—

Saroth: Lo que usted nos dije queda perfecto con el espacio, que opinan ustedes.?

—Le pregunté a Annia y Richard.—

Richard: Usted tiene razón Srta Russell, el espacio es realmente bueno, de hecho, si quiere agregarle algo más... no abría problemas.

—Tiene razón, agregarle algo más no dañaría los planes del inicio.—

Annia: Es cierto, parece que usted sabía muy bien lo que quería y el espacio que ocuparía aquello.

Sra Grace: De hecho... Yo estudie en mi adolescencia diseño de interiores, por eso tenía un poco de idea.

—Con razón sus ideas concuerdan con el espacio.—

Saroth: Ahora entiendo, sus ideas son muy buenas, y el espacio es perfecto.

—Comenté, ella asintió mientras sonreía.—

Saroth: Bueno, debo irme, nos pondremos en contacto con usted cuando el diseño esté listo para que nos de su visto bueno y comenzar con la remuneración de su sala y la habitación del niño.

Sra Grace: Ok señorita Russell.

—Nos despedimos, ella nos acompañó hasta nuestro auto, subimos a el mientras nos volvimos a despedir, el chófer puso el auto en marcha de regreso a la oficina de nuevo.—

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