ETERNO AMOR DEL VILLANO

He pasado más de un siglo en la oscuridad, por tu partida y ahora que has vuelto, puedo ver de nuevo la luz en mi vida dice Estefan mientras deposita una caricia sutil en su hombro y cuello ocasionando en Elena una sensación de seguridad a la vez que vuele a sentir sus emociones a flor de piel.

No te preocupes mi querida Elena, que no haré nada que tu no quieras, pero comprenderás que no podre estar lejos de tí. Se que todavía no puedes aceptarme como tu tua cantante debido a factores que desconocemos, pero no me alejes, tú eres mi todo y te prometo que te ayudaré a encontrar tu verdadera esencia.

¿Por favor di algo mi amada?... Pregunta Estefan preocupado.

Elena, se encontraba perdida en sus pensamientos, todavía no entendía como era posible que el vampiro que estaba frente a ella asegurará que era su tua Cantante, pero ella no sabía y tampoco recordaba ni siquiera su nombre en eso recordó las palabras de su maestra. (Debo completar mi misión, él no interfiera en mis planes).

—Me dirás tu nombre, no crees que por lo menos tengo derecho de saberlo.

Buen punto, aunque quería que tu misma lo recordaras, te diré... Mi nombre es Estefan Drack.

El rostro de Elena era un poema, no podía creer que el vampiro que su maestra la envio a buscar estaba todo este tiempo frente a ella y no se había percatado de ello.

Solo para cerciorarse Elena vuelve a preguntar ¿tú eres el Conde Estefan?

Este sonríe afirmando su pregunta para después preguntar acaso es muy reconocido mi nombre y al ver el rostro serio por parte de Elena decide cambiar el rumbo de la plática ya que él conocía muy bien los rumores que manchaban su nombre.

 ¿Que te parece si me acompañas a cenar. Ella lo observa un poco confundida, pero no pudo negarse ya que Estefan la abraza y luego besa su frente a la vez que le dice después de la cena iremos a nuestra habitación.

 Lo que hace que ella malinterprete sus palabras y no pueda articular palabra alguna.

Al llegar al comedor la cena está servida, se ve todo muy delicioso. Estefan se siente junto a ella y le dice buen probécho querida y procede a comer.

—Espera acaso los vampiros como tú no se alimentan solamente de sangre.

Estefan baja lentamente los cubiertos, mientras lanza una sonrisa maliciosa y levanta una ceja al observa fijamente a Elena.

¿Vampiros como yo? Pregunta una vez que se limpia la comisura de su boca.¿A que te refieres exactamente?

—Pensé que al ser un vampiro de sangre real solo consumían sangre.

Estefan suelta una suave carcajada como si le hiciera gracia. Mi querida Elena, los tiempos han cambiado y con el paso de los siglos nosotros los vampiros nos tuvimos que adactar a las nuevas costumbres. Aunque... Procede a lanzar una mirada trabiesa antes de continuar. Algunas veces tendremos que tomar sangre, pues nuestro cuerpo lo necesita, ya que es cuestión de supervivencia.

Con una sonrisa descarada continua su platica... Tú aun no lo has hecho, ¿verdad?

—Elena deja caer su cubierto al ser descubierta, pero rápidamente se tranquiliza y procede a preguntarle ¿Cómo lo sabes?

simplemente me puedo dar cuenta de ello. Con solo ver tus ojos.

—¿Que tienen mis ojos?.

Estefan ríe sutilmente... Eres tan inocente como encantadora y procede a continuar con la cena.

Bajo la mirada confundida por parte de Elena, Estefan dice... No te preocupes cariño. Yo me encargaré de enseñarte todo lo que necesitas saber he incluso te ayudaré a que puedas liberar tu parte vampira.

—(No se, por que sus palabras me sonaron con doble significado) al finalizar la cena subimos las escaleras en completo silencio hasta llegar frente a la habitación que ya conocía. Lo miró seria y él me dice adelante esta será nuestra habitación.

—¡Nuestra!

 Por supuesto cariño a caso esperas que descansaríamos en habitaciones separadas. Dice Estefan con una mirada lujuriosa, abre la puerta no sin antes regalarle una sonrisa pícara a su amada después de acariciar su mejilla, para después susurrale "debes saber que me es muy difícil estar más tiempo lejos de tí y aunque tú por el momento no me recuerdes estoy seguro que lo haras una vez que liberemos tu parte vampira". (Que será muy pronto).. y procede a besar sus labios antes de continuar con su platica, cariño en el closet hay ropa para tí, puedes utilizar la que te guste.

—Nos bañamos por separado y una vez cambiados nos disponíamos a descansar, pero por alguna razón mi mente no deja de dar vueltas y no podía encontrar la calma que necesitaba. Por un lado, estaba el temor que me descubriera el verdadero motivo de mi llegada a este lugar y también estaba el motivo de que yo nunca he dormido con un hombre y temo que se quiera propasar conmigo ya que la mayoría de vampiros solo descansan un par de horas solo para retomar sus energías. Bueno al fin el sueño me venció. Al día siguiente cuando me desperté me di cuenta que no fue él quién se propasó conmigo, sino que fui yo al invadir su propio espacio, pues me encontraba sobre su pecho. Observó a detalle cada una de sus facciones de su rostro, no puedo negar que es sumamente guapo. Rápidamente niego mi cabeza y trató de levantarme, pero él me abraza a la vez que acarició su cabello, mi corazón late rápidamente despertando el deseo más profundo la lujuria (Debo alejarme de él antes de que caída bajo sus encantos, maldición esto si que es un problema)

Buen dia, Cariño.

— Me levanto rápidamente... Perdón, No quise...

Tranquila, cariño, puedes seguir observando mi rostro he incluso puedes hacer más que eso. Yo soy solo tuyo. Mis palabras hacen que ella se levanta rápidamente y corre hacia el baño.

Estefan sonríe mientras piensa (Es tan tímida, creo que iré con calma no quiero que aleje de mi lado, aunque quisiera que ella recordará cada detalle, cada instante que compartíamos antes).