CAPÍTULO 1 Estefan, será realmente un villano

En las profundidades del bosque se alza un magnifico castillo iluminado por la luz de la luna, resaltando sus grandes ventanas y sus muros de piedra, desgastados por el paso de los siglos. Ha permanecido oculto durante el día por una espesa niebla que permite alejar los curiosos ojos humanos del peligro inevitable, aunque eso no asegura su completa eficacia.

En la parte alta de la fachada se encuentran cuatro gárgolas de piedra talladas con una precisión que parecen cobrar vida en medio de la noche. En el interior del castillo, un sin fin de pasillos oscuros se extienden hasta los grandes salones donde están las antorchas a cada lado de las paredes dando la ilusión de sombras danzantes.

En la habitación más alta de la torre se encuentra Estefan Black un vampiro con un aura misteriosa, Su ropa contrasta perfectamente con la oscuridad de la noche, mientras su piel pálida y sus ojos rojos parecen resaltar bajo la luz de la luna dejando al descubierto una profunda tristeza en su mirada y un anhelo por el pasado que no volverá mientras los recuerdos atormentan su mente con imágenes inquietantes y entre los recuerdos hay uno que se destaca, el rostro de la única mujer que amo sinceramente y perdió, cuya ausencia aún pesa sobre su alma. Convirtiéndose en un ser cruel y despiadado ganándose así el apodo de el temible Conde Estefan.

Pero esta noche no es igual a las anteriores. Un terremoto de gran magnitud se hace presente solamente en su territorio causando daños en los cimientos del castillo.

¡Esto no puede ser!.. Habla Estefan sorprendido al percatarse quien es el causante de tan terrible suceso.

¿El sello se está debilitando?... Rápidamente, se dirige por los pasillos del castillo sin ser notado, por sus sirvientes quienes pasaban por allí y tras hacer un leve movimiento con una de sus manos hace aparecer una puerta en medio de la pared, esta se abre dejando a la vista un pasaje secreto que conecta con una entrada subterránea donde se encuentra el cuerpo de la poderosa bestia que veinte años atrás había capturado por medio de un pacto de sangre, pero este pacto no duro ya que la bestia se reveló perdiendo el control de dicho poder y es hay cuando empleo la ayuda externa para sellar la bestia en una prisión, después de separar su energía espiritual del cuerpo físico.

De inmediato Estefan procede a reforzar el sello, pero este se rompe liberando una gran onda de poder mágico que lo hace retroceder un par de pasos mientras trata de contener la energía liberada, pero esta acción ocaciono una serie de alteraciones en el lugar creando una grieta dimensional, amenazando con desencadenar el caos. lo que obligó a Estefan ha utilizar su última carta y tomar el control antes de que sea demaciado tarde.

Un aura demoníaca comenzó a rodearlo a la vez que está amenaza por apoderarse completamente de su cuerpo, sus ojos comenzaron a tornarse negros, convirtiendo la oscuridad en su mejor aliado. Sin embargo, en lo más profundo de su ser todavía existe una chispa de determinación y aunque es muy pequeña le ayuda a fortalecer su espíritu. En sus manos aparece una esfera de color morado que se eleva a una altura considerable y en su interior aparecen pequeñas descargas de energía las cuales van aumentando de tamaño a medida que Estefan completa el círculo de invocación para traer a unos cuantos lacayos (vampiros híbridos, que sacrificaron su humanidad para obtener sus más oscuros deseos sin percatarse de que perderían su alma en el proceso). A medida que los primero vampiros híbridos son invocados comienzan a comprender el verdadero precio de sus desiciones y sus rostros reflejan miedo mientras tratan de escapar del terrible destino que ellos mismos crearon, pero ya es tarde. Sus gritos desesperantes no podrán salvar sus vidas.

Una carcajada malevola hace eco en el lugar a la vez que se materializa una presencia maligna en forma de sombra por medio de la esfera y procede a devorar las almas de los vampiros híbridos. Sus cuerpos se retorcían en agonía mientras su vida era arrancada, dejando solo polvo en lugar de cuerpos qué se dispersaban lentamente con el viento.

Una voz escalofriante se escucha mientras se deleita por el sufrimiento de aquellas almas que acababa de consumir. Exquicitas, las mejores, sin ninguna duda. Tú has sido mi mejor inversión y comienza a reírse sonoramente mientras se desvanece restaurando todo como si nado hubiera pasado.

Con un suspiro de resignación, Esteban recupera su energía que había sido absorbida por el cuerpo de la bestia, sabiendo que a medida que el pacto con el demonio y la maldicion se fortalece, la oscuridad consumirá su alma.

Mi señor que acaba de ocurrir preguntan varios de sus sirvientes qué se acercan al verlo caminar por los pasillos una vez que se encienden las antorchas.

Con una aura y mirada amenazante Estefan dice que no ha ocurrido nada, ocasionando en los nuevos sirvientes un susto de muerte.

El mayordomo quien se percata de lo sucedido se acerca para disculparse por la imprudencia de los nuevos sirvientes, no sin antes asegurar que no volverá a pasar. Estefan asiente mientras pasa de largo.

Cuantas veces tengo que decirles que sigan las leyes y reglas que se han establecido en este lugar para que puedan conservar su trabajo. Habla el mayordomo.

Pero... Interrumpe un sirviente todavía sin comprender que hizo mal o en que se equivocó.

Los compañeros lo reprenden ya que no es la primer vez que los ponen en aprietos por su culpa.

Suficiente dice el mayordomo, si ya terminaron sus respectivos trabajos retírense.

El pobre mayordomo todavía no comprende como su señor cambió tanto después de la trágica muerte de su señora y la repentina desaparición de su primogénito quinientos años atrás.

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Todo comenzó en una época donde los seres mágicos coexistían en armonía hasta que un vampiro llamado Erick Mondragon acendió al trono con grandes ambiciones. Su obsesión por encontrar la inmortalidad lo llevo a sembrar caos y destrucción alterando la armonía qué existía en el lugar, cuando destruyó aldeas y mató inocentes desatando la furia del gran hechicero, quien lo maldijo con un castigo devastador. Todo su legado se perderá en una generación futura y su obsesión será su propia perdición.

Cegado por obtener la inmortalidad, Erick ignoró el poder de las palabras del gran hechicero hasta el día en el cual nació su primogénito Estefan. Ese dia comprendió las consecuencias de sus actos, pues el niño había nacido con una pequeña marca roja en su cuerpo, pero ya era demasiado tarde y en vez de buscar su redención y encontrar una manera para detener la maldición, decidió ocultarla a la vez que decidio continuar con su obsesión, convirtiéndose en un ser despreciable.

Estefan creció alejado de su padre sin tener conocimiento de la maldición y las atrocidades qué este despreciable ser hacia, para obtener lo que tanto anhelaba.

Estefan se convirtió en un prodigio a lo largo de su adolescencia y conforme pasaban los años se ganó el aprecio de quienes lo rodeaban, aunque muchos lo veían con recelo debido a su padre y eso lo marcó en gran medida, pero a pesar de todo aquello. Estefan poseía una apariencia excepcional y un carisma natural que inspitaba admiración y temor en partes iguales gracias a su madre. Al poco tiempo Estefan se casó con Selena una hermosa vampiresa de alta alcurnia quien se convirtió en su pareja destinada y tuvieron a su primer heredero trayendo felicidad en el palacio. Sin embargo, esta dicha pronto se vera empañada por una tragedia devastadora.

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