Casados Por Error

Diana

Ha pasado una semana desde que firmamos la anulación de nuestro matrimonio con Marcus. Él ha estado algo distante estos días, solo se limita a saludarme.

- Oye y qué será lo que nos quieren informar? - dice Samanta hablando cerca de mi oído.

- No lo sé - digo viendo a todos los empleados de la casa de modas que se acercan al salón de reuniones generales.

Pasados unos minutos, Eva se pone de pie frente a todos y comienza a hablar.

- Bueno, seguramente se estarán preguntando a qué se debe esta reunión. Pues bueno, seré breve y no les quitaré mucho tiempo. Primero quiero felicitarlos y agradecerles por el excelente trabajo que están haciendo con las casa de modas Smith Style. Nos han invitado al desfile de modas anual que organiza la señora Sara Backer en beneficio de las fundaciones para mujeres con cáncer, para nosotros es un gran logro ya que desde mis comienzo he admirado a la señora Sara. Y bueno, eso significa que debemos trabajar mucho para presentar allí nuestros mejores diseños - dice ella y todos aplauden.

- Wow es increíble poder estar en ese desfile, hasta hay modelos internacionales en él - dice Samanta emocionada .

- Oh vaya, será una buena oportunidad para la empresa entonces - digo sorprendida.

- Así es - responde Samanta llena de alegría.

- Diana, crees que puedas venir un segundo? Necesito hablar contigo - dice Eva mientras pasa enfrente de mí.

- Claro - digo siguiéndola a su oficina.

Una vez dentro de su oficina Eva me ofrece tomar asiento y comienza a hablar.

- Verás Diana, he estado observando detenidamente como has avanzado con las clases que te he estado dando - dice ella viendo unos bocetos de vestidos que he hecho a pedido suyo.

- Le agradezco mucho señora - digo feliz, en verdad para mí significa mucho que ella me diga eso.

- Hay un diseño que ha llamado mucho mi atención, mira es este vestido, tiene algo en especial, tú le das ese toque especial que lo hace tan particular - dice ella viéndome con entusiasmo.

- Lo dice en serio? Para mí significa muchísimo que a usted le guste lo que diseño - digo sonrojada.

- Así es, solo le faltaría ajustar pequeños detalles, yo me encargaré de hacerlo. Y quiero que ese sea uno de nuestros diseños exclusivos en el desfile - dice ella despreocupada.

- Señora, me lo dice de verdad? - digo levantándome de mi silla.

- Claro Diana, por eso te lo dije, haz progresado mucho con las pocas clases que te he dado, en verdad el diseño es lo tuyo - dice ella sonriendo .

- Ay muchas gracias señora Eva, no imagina lo feliz que me siento - digo mordiendo mi labio.

- Lo sé, por eso quiero darte esta oportunidad. Quiero que logres llegar a lo mas alto, tienes potencial, sólo necesitas oportunidades y quiero ser yo quien te las de - dice ella caminando hacia mí y me da un abrazo.

Me tomó por sorpresa, pero respondí a su abrazo, es la primera vez que ella lo hace.

- Bueno, ahora necesito que vayas a la dirección que te voy a enviar a tu celular, mañana haremos una sesión de fotos con algunas modelos que usarán algunos de nuestros diseños de otoño para promocionarlos. Quiero que te asegures de que los de la limpieza y la decoración hayan hecho bien su trabajo, ve con Iván no vayas sola, es un lugar algo alejado de la ciudad y puede ser peligroso - dice ella viendo su tablet.

- Está bien señora, así lo haré - digo viendo la dirección en mi celular.

Tomo mi bolsa, mi abrigo y salgo camino hacia el estacionamiento donde se encuentra Iván.

- Hola Iván, puedes llevarme a esta dirección? La señora me ha encargado que fuera a ver si esta todo preparado para mañana - digo caminando hacia él.

- Hola Diana, que pena, justo iba a subir a pedirle permiso a la señora para retirarme, internaron a mi abuelita y debo estar con ella - dice él algo preocupado.

- Ah... Entiendo, ve tranquilo, yo puedo tomar un taxi - digo haciendo un gesto con la mano.

- Te lo agradezco Diana - dice él y camina a zancadas hacia el interior de la empresa.

Por aquí no tengo suerte de encontrar ningún taxi, por lo que decido caminar hasta una parada de autobús, allí tomo el primero que lleve hacia un lugar cercano de donde debo ir.

Luego de viajar como por media hora, el chofer del bus nos informó que una de las llantas se había pinchado y por lo tanto no podía seguir su viaje.

La verdad es que era un lugar ya en las afueras de la ciudad, habían unas pocas casas.

Me fijé en mi celular y vi que el lugar donde debía llegar aún estaba algo lejos para llegar caminando.

Entonces decidí caminar por la carretera hasta ver algún bus o un taxi, todavía era de día y no tenía miedo.