La Duquesa Odia Los Clichés

El escandalo de la familia Capell, estaba en conocimiento de todas las personas del ducado. Nadie sabia exactamente que había pasado, pero había varias versiones… unos decían, que estaban en negocios ilícitos, por eso el joven Capell se había visto muy malherido… otros decían que tenían deudas con peligrosos acreedores… también comentaban que quizás, habían cometido traición al reino… e incluso, otros afirmaban que la señora Capell había matado a una de las amantes de su esposo… por supuesto en la casa Capell, la desesperación era aún mayor.

Lord Capell: todo esto es tu culpa mujer… no podías disimular el odio infundado que le tienes a la hija… ¡dioses! ¿Por qué me case con una mujer tan tonta! Ahora podríamos haber estado disfrutando de los beneficios de ser parientes directos del duque… sin embargo, lo arruinaste todo.

Señora Capell: no me culpes a mi por los errores de tu hija, fue ella quien es una mujer malvada.

Joven Capell: asi es padre, mi hermana es la malvada, no mi madre.

Lord Capell, le dio una bofetada a cada uno… y les grito lleno de ira…

Lord Capell: ¡ESTUPIDOS! Les guste o no… ella es la duquesa… nos habían hecho creer, que no era favorecida por el duque, por eso no la busque antes, sin embargo… el maldito duque, hace lo que Ellie quiere… ¿Qué no lo entienden? Estamos arruinados… ya nadie quiere ser nuestros socios… nadie se va a oponer a una decisión de Joseph Norwood…

Joven Capell: padre, deberías hablar con mi hermana, obligarla a que hable con el duque…

Lord Capell volvió a golpear a su hijo, quien ahora sangraba del labio.

Lord Capell: no puedo creer realmente que seas mi hijo… ¡idiota! Si nos enfrentamos a tu hermana, perderemos hasta la casa… ¡lo perderemos todo! Vivirás en la calle y trabajaras como un plebeyo…

Señora Capell: ¡NO! ¡mi hijo será un gran señor!

Lord Capell: tú hijo es un imbécil.

Joven Capell: padre, jamás te he ofendido, siempre he sido bueno…

Lord Capell: mentira, sé que tu madre te encubre todos tus errores, sé que te aprovechaste de todas las muchachas que trabajan en la mansión, y de tus constantes visitas al salón rojo…

Joven Capell: padre… yo…

Lord Capell: Ellie, es la única que realmente puede traer fortuna a esta casa… por eso… ustedes harán lo que tengan que hacer para que ella los perdone…

Señora Capell: jamás le pediré perdón a esa chiquilla insolente…

Lord Capell: si no lo haces, te abandonaré… porque si ella no nos perdona, tendré que cuidar el poco dinero que nos quede y no pienso gastarlo en ti…

Joven Capell: padre… pero…

Lord Capell: pero, nada… asi tengan que estar de rodillas, bajo la lluvia, día y noche frente a esa mansión… tienen que hacer que ella los perdone…

Señora Capell: ¡JAMAS! mi hijo se arrodillará frente a su hermana menor

Lord Capell: jajaja mujer tonta, que no recuerdas, cuando Ellie era pequeña y creíste que había roto tu vajilla… la niña estuvo de rodillas frente a la puerta toda la noche, luego enfermó y pensamos que hasta moriría por la fiebre… y después descubriste que había sido este imbécil, y que le hiciste NADA… jajaja eres una mujer malvada… quizás, Ellie tiene razón de tratarte asi…

Señora Capell: ríe todo lo que quieras, porque también el duque te está hundiendo a ti…

Lord Capell: te mandaré de regreso a la casa de tu familia y hare los papeles correspondientes… no tendrás nada de los Capell… cortaré todos los lazos contigo… le pediré perdón a Ellie y tu vivirás con eso… como una mujer abandonada y una mala madre…

Señora Capell: no puedes hacer eso…

Lord Capell: jajaja ¿Qué harás? No tienes a nadie, todos los nobles del ducado te desprecian…

Joven Capell: Padre por favor…

Lord Capell: jajaja tú piensa bien lo que vas a decir, mocoso… porque si no me agrada, te puedes ir hoy mismo con tu madre a la casa del campo, con tus abuelos… asi que mide tus palabras antes…

Joven Capell: yo…

Señora Capell: no me iré… no puedes…

Lord Capell: ¡mayordomo!

Mayordomo: dígame señor.

Lord Capell: prepara la carreta, la señora se va de esta casa…

Mayordomo: ¿la carreta?

Lord Capell: si… y que no se lleve nada… esas cosas las puedo vender a buen precio…

Señora Capell: no me voy a ir…

El mayordomo comenzó a mover a la mujer… y en el forcejeo, ella cayó al suelo…

Señora Capell: ¡hijo mío! ¡ayúdame!

Joven Capell: padre… yo…

Lord Capell: dime…

Joven Capell: creo que tienes razón, si mi madre no hubiese sido tan mala con mi hermana menor, nada de esto estaría pasando…

Señora Capell: hijo…

Joven Capell: ahora lo mejor para la familia, es cortar lazos con esa mujer y decir que esta desequilibrada mentalmente, así los rumores y las habladurías de la gente no nos afectaran…

Lord Capell: ¿desequilibrada mentalmente? Si… eso puedo resultar… bien… prepara todo…

La mujer estaba atónita… ya ni siquiera tenia fuerza para luchar… sus ojos solo estaban en la figura de su adorado hijo, quien la miraba con desprecio…