María Cavalcante, una joven de 19 años que perdió a sus padres en un accidente hace 3 años, tiene una amiga, la mejor y única, Beatriz Menezes. Se conocieron en la facultad donde María es becada, muy estudiosa siempre fue muy esforzada y la mejor de su clase, no dejó que el dolor la consumiera. Ella heredó un apartamento de sus padres y se quedó sola, ahora, en la etapa final de la facultad, necesita un empleo, y ¿quién la ayudará? Su amiga, que viene de una familia acomodada, y su tío, un solterón convicto, decepcionado de la vida por encontrar a su novia con su primo, Júlio, en una despedida de soltero pocos días antes de la boda... Hoy, a sus 39 años, no quiere más relaciones a pesar del vacío y la soledad, ha decidido que las mujeres son solo por una noche... Hasta que una pequeña morena aparece... parece frágil... pero es un huracán...
Tu amigo Gael también tendrá algunas sorpresas...
Los espero...
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Mary
Me solté el pelo, estaba limpio, me lo había lavado por la mañana, elegí un vestido sencillo, no pensaba quedarme mucho tiempo... Me puse unos cuantos complementos, algo de maquillaje ligero y ya está....
después de mirarlo me gustó y no me llevó tanto tiempo...
El conductor vino a recogerme y como siempre charlamos de cosas al azar, llegué y conocí a la madre de Bia y nos abrazamos, también conocí a su padre y le abracé, le pedí disculpas por el regalo y me dijo que no necesitaba regalos....
Subí y Bia seguía en la ducha, así que esperé a que saliera...
Hasta que empezó a arreglarse, que tardaría un siglo, aprovechamos para ponernos al día...
Rafael
Después de arreglarme, me pregunté si debía ir a la fiesta de cumpleaños... o inventarme una excusa que Dilan supiera que era mentira.
Así que me puse algo de ropa y salí, le compré un reloj y decidí que a la primera oportunidad me iría. Le envié un mensaje a Gael y estuvo de acuerdo, incluso se emocionó, menos mal, al menos no estaré sola.
Gael
Sería una tonta si no emprendiera esta aventura, ir a ver a la gata a su casa, quería ver si realmente se atrevía... Hoy jugaría con ella.
Me duché, me puse perfume, me arreglé y salí. Le compré a Dilan un perfume de primera, a las mujeres les encantan los perfumes de hombre y a su mujer le gustaría.
Rafael
Llego frente a la casa de Dilan y espero a que llegue Gael, me cuesta entrar sola en este matadero. Llega y aparca, me bajo y le explico por qué le espero.
Gael
Me da un ataque de risa. Me asustas huyendo de las mujeres...
Rafael
No brinda por Gael y tampoco dice una palabra al respecto.
Entramos y ya estaban sirviendo las bebidas.
Entrego mi regalo, charlo con Dilan y Gael, y estamos de buen humor.
¿Dónde está mi sobrina?
Dilan
Estará abajo preparándose, ya sabes que lleva años.
Gael
Creo que vale la pena cada segundo.... Doy otro sorbo a mi bebida...
Hasta que aparece en las escaleras, por un segundo me olvido de quién soy....
Maravillosa es como se veía, como una princesa, pero la caída no fue solo mía, miré por el rabillo del ojo y él me miró como un idiota, me miró, le pillé in fraganti, ojalá lo hubiera dicho....
Rafael
Cuando miré hacia las escaleras, Bia bajaba, tan guapa como siempre, pero para mi sorpresa ESTABA AQUÍ.... Intenté disimular, miré a Gael y me pareció un imbécil. Pedí que me disculparan, le di la espalda y me fui.
Gael
Amigo, no seas payaso. Te perdiste el descenso triunfal...
Rafael
Gael, déjame en paz, el remordimiento de pisar esta casa es suficiente sin tu ayuda...
Tomo otro vaso y salgo al jardín.
¿Por qué tenía que ser tan...? No, no me lo creo...
Bia
¿en qué no crees?
Rafael
Nada. Abrazo a mi sobrina y le doy las gracias por estar sola.
Estás preciosa.
Bia
Gracias, tío. Tú también estás preciosa. A la amiga de tía Vania le encantará.
Rafael
No bromees, mantén a esa mujer lejos de mí.
Bia
Hablando del diablo. Míralos...
Vienen hacia nosotros...
Vânia
Hola Henry, ¿cómo estás?
Bia....
Rafael
Hola Vânia.
Bia
Hola, tía.
Vânia
He traído a mi amiga Patricia, espero que no te importe.
Bia
Hola, Patrícia.
Rafael
Se acerca a mí y me da dos besos...
Gael viene hacia nosotros y cuando llega aprovecho, finjo que tengo que atender una llamada y me voy al fondo de la casa....
Cuando llego la encuentro.... Más bien????
Mary
Estaba cansada de sentirme como pez fuera del agua, así que cogí una copa de champán y me fui al fondo. Yo estaba sentado allí cuando apareció....
Iba a dejar....
Rafael
No tienes que irte. No voy a morderte... Sólo quiero un poco de paz y tranquilidad...
Mary
Quería estar en casa, con mi gato, comiendo palomitas... Y no aquí. Bia dijo que no había mucha gente... todo era simple, y realmente no me siento parte de eso.
Rafael
¡Yo tampoco! ¡Y me trajeron una mujer! ¿Qué soy, un desesperado?
Mary
Me echo a reír...
Rafael
¿Yo también soy una broma?
Mary
Eres tan mandón, huyendo de las mujeres...
Rafael
No cualquier mujer, la amiga de la cuñada de Dilan.
¡No, gracias! Cometí un error cuando elegí solo, imagina elegir por mí mismo.
Mary
No tienes la culpa de que la gente sea idiota contigo, a veces tenemos que aceptar, el error está en ellos, no en nosotros.
Rafael
Mientras hablaba, sentí que ella hablaba más para sí misma que para mí...
¿Quieres salir de aquí?
Mary
Es lo que más deseo...
Rafael
Vamos a decir que no te sientes bien y te llevo a casa.
Mary
¿Cómo así?
Rafael
¡Te ayudo, tú me ayudas! Mentimos y nos vamos a casa. Tú a la tuya, yo a la mía después de dejarte en la tuya. Me pongo nervioso.
Mary
Está bien.
Rafael
Así que seguimos nuestro plan. Fuimos hasta Dilan, y le dijimos que ella se sentía mal y que la llevaría a casa; dejé a Gael, ¡no estaba divirtiéndose...? Así que aprovecha.
Mary
Salimos y él se detuvo en una lanchonete. No bajé...
Rafael
Vamos a comer algo, luego te llevo.
Mary
Bajé, pedí un perrito caliente especial y una coca.
Rafael
Tomamos los bocadillos y la observé, pensando que ella come esto...
Mary
¿Qué pasa?
Rafael
Nada... pensé que hacías dieta o algo así...
Mary
No lo hago. Paso hambre cuando puedo correr por la mañana, por la tarde... Hago ejercicio y es para comer...
Rafael
Me rio y sacudo la cabeza...
Llegamos a su dirección, iba a bajarse, le agarré el brazo...
Gracias...
Mary
¿Quieres merendar arriba?
Rafael
Sé que soy imbécil, canalla, pero pensé...
Mary
No seas desagradable, retiro la invitación.
Rafael
Pero quiero subir. Piensa mejor antes de hablar.
Mary
Subimos, y Federico ya me estaba esperando.
Rafael
Ella pone los bocadillos sobre la mesa.
Y me pide que espere. Va a su cuarto y vuelve con un short y una camiseta tan juvenil.
Mary
¿Qué pasa?
¿Quieres ketchup?
Rafael
No, gracias.
Abro mi refresco, pero creo que lo habían agitado porque salta sobre mi camisa y la empapa.
Mary
Qué fastidio. Puedes quitarte la camiseta, la lavo y la pongo en la secadora...
Rafael
Mejor no. Me voy a casa.
Mary
No hay problema, quítatela ya. Digo y voy a buscar el detergente en el baño. Cuando vuelvo, él está sin camisa. Dios mío, es maravilloso, es enorme, musculoso y creo que lo miré demasiado tiempo.
Rafael
La camiseta... Me miró muy roja. Atrapada in fraganti. Sí, conozco la sensación, pensé...
Mientras ella lavaba la camiseta, curioseé sus cosas, libros.
Hasta que regresó muy avergonzada, y comimos el bocadillo.
Mary
Enseguida se seca...
Empecé a comer y no dijimos nada, fui a buscar la camisa.
Rafael
No hacía falta que la lavaras.
Mary
Qué va, estoy en casa. Acabo de comer un súper bocadillo, te lo debía.
Rafael
No digo nada, me despido y me voy a casa. Pensando cómo puede ser tan distinta. Muchas darían la vida por estar en su lugar en esa fiesta...