El Día Que Todo Cambió

🤎LEONARDO🤎

—Señor Harper, estos son los currículos—Gracias señor Osmán, puede irse.

El señor Osmán salió y empecé a ojear los documentos, pasé uno tras otro y la fotografía de mujer me dejó en shock por un buen rato…

—Es ella… Karina Spencer… Con que ese es tú nombre; novia fugitiva

—¿Señor Osmán ya están aquí los postulados? –Sí señor, ¿comienzo a llamar?

—Si hágalo.

Empecé a entrevistar uno tras otro y de mi mente no salía mi novia fugitiva, esa noche volvió a mi tan clara como el agua y me costaba concentrarme en las entrevistas, incluso una parte de mi anhelaba verla pasar

por esa puerta pero venían otras personas, tantas que… incluso llegué a pensar que no vendría. Pero resulta que era el número 27, casi el último. Cuando la vi entrar una sensación de nerviosismo me invadió y solo agarre los documentos de ella para cubrir mi rostro

—… No sabía si ella me reconocería, yo no logre olvidar ese rostro, pero valla balde de agua fría cuando ella hablo de manera tan

casual, seguro ni sabe quién soy… Hay de dos, o sabe quién soy y no quiere reconocerlo, o realmente no sabe quién soy.

Le pregunté lo normal… pero la curiosidad me gano y le termine preguntando si estaba casada, al final me toco inventar algo sobre su reacción a las preguntas y gracias a Dios se lo creyó o si no, no sabría que otra excusa colocar.

—Nos vemos mañana Karina Spencer –Digo en voz baja viendo desde la ventana como se va perdiendo entra las personas saltando como una niña.

—Leonardo, Leonardo. Ábreme la puerta ahora mismo— Grita Amelia queriendo entrar a mi oficina como loca.

—Un momento. –Abro la puerta y entra hecha una fiera,  y sé que merezco el regaño que me va a dar

—¿Qué haces aquí Amelia? –Pregunto calmado

—¿Qué qué hago aquí? Más bien ¿Qué haces tú aquí? Hoy debíamos ir a ver el diseño de las argollas. Pero en vez de eso preferiste quedarte haciendo entrevistas inútiles. ¡¿Crees que me voy a quedar de brazos cruzados?!

—Perdón por dejarte plantada Amelia… Pero las entrevistas sí eran importantes, la persona que contrate deberá ser cercana a mí, así que yo mismo la elegí… Y los anillos… yo, la verdad lo he pensado y quiero sé que debí haberlo hecho antes, perdón por decirlo ahora, pero quiero cancelar nuestro

—Shhh, no digas más—Dice colocando su mano en mi boca— No te atrevas a decir más mi amor, serás mi esposo, es lo correcto, es lo que todos quieren y es lo que más he deseado. Así que ni se te ocurra decirlo. La nueva cita para el diseño de los anillos es la otra semana, a esa cita no

faltes. ¿Entendido?

—Amelia, no puedes hacer esto… ¿No lo ves? ¿Por qué crees que siempre pospuse todo? No puedo seguir con esto, te aprecio, pero como amiga y hermana, eres casi como mi familia… Por favor no hagas esto.

—No, tú por favor no hagas esto. Nos casaremos en dos meses, ya envié las invitaciones mi amor… Seremos muy felices, ya lo veras, tu solo se bueno y no decepciones a tu madre… Ella es la que más espera esta boda ¿O lo olvidas? –Nos vemos esta noche en casa de tu madre para decidir el lugar de la boda ¿Entendido?

—…

—Bien, nos vemos en la noche mi vida— Dice dejando un beso en mis labios y se va… Enserio estoy en un lio ¿Qué debo hacer?

¿Se encuentra bien Joven Leonardo?— Pregunta el señor Osmán que al parecer escucho todo.

—¿tú que crees?... Cancela las otras;reuniones de hoy…;Saldré un rato

—Sí señor.

Salí de la empresa y me subí a mi deportivo… Realmente no

sabía dónde ir, solo sabía que decir ir a tomar aire y buscar la manera de

salir de ese embrollo… Al final termine en la casa de mi hermano Michael quien que

se la pasa escribiendo y no tiene vida social, Parece un vampiro, de día duerme y en la noche mantiene escribiendo.

—Hola hermano, pero que sorpresa… ¿Tu prometida por fin

te boto?

— Ojala fuera eso… Pero no, realmente yo solo… No lo sé, quería algo de

aire fresco.

—Viniste el lugar correcto, sabiendo que acá huele a biblioteca jajaja – Biblioteca o no, es más tranquilo que la empresa… La

empresa— Digo recordando a mi novia fugitiva y sin darme cuenta sonrío al

recordar aquella noche.

—Parece que no solo pasó eso, suéltalo ¿Qué te tiene tan!feliz?

—A,  no nada

—Aja, nada— Dice haciendo una mueca

—Qué detesto—Lo sé,

pero soy tu único hermano hombre, así que aguántate.

—jajaja… Hoy vi a esa chica

— “esa chica” ¿Cuál? Habla claro de una buena vez

—“Esa chica” La primera, la de hace seis años

—Espera, tu novia fugitiva—Exacto.

—Ouuuu…. Jajaja que conveniente, volvió cuando tienes;dudas en tu compromiso… ¿Habrá boda o no?

—No tiene que ver con ella, ósea si pero no… Exista o no;ella… Amelia para mí no es—La futura madre de tus hijos y el amor de tu vida, ya lo sé. Pero entonces díselo.

—Eso intento, pero ¿Nuestra madre qué? Ella planeó este!matrimonio casi desde que nacimos. Ama a Amelia y quiere nietos.

—Si quiere ver una boda que se vuelva a casar, aún es hermosa y tiene muchos buenos hombres que parecen vino detrás…- Ella solo tiene ojos para mi padre y lo sabes- Lo sé, pero sé que él se fue hace mucho y ella tiene derecho a volverse a dar una oportunidad.

—A ti nadie te gana… Buscas soluciones tan rápido como yo;hago cuentas y negocios –Jajaja son gajes del oficio de tanto escribir novelas. Por cierto me volvió a ganar “Campanilla de invierno” En el Ranking de los más leídos en el mes… No me puedo enojar porque hasta yo leo sus novelas, pero que rabia, no dormí días para acabar la novela y aun así gano.

—Jajajaja tú y tu campanilla de invierno… ¿Tan buenas son sus novelas?

—Si las leyeras no podrías parar la leerlas hasta terminarlas, transmite muy fácilmente los sentimientos… Pero hay algo extraño que siempre me ha dado curiosidad.

—¿Qué cosa? –No puedo evitar preguntar

—En la mayoría de sus historias comienzan con la prometida huyendo de su boda o siendo traicionada y termina asando la noche con un desconocido… ¿Te suena familiar jajaja? Al parecer eres muy cliché.

—Déjate de tonterías, no debí contarte nunca lo que paso hace seis años.

 –No te pregunté nunca, tú mismo me lo soltaste, así que aguántate. ¿Cuándo será el día en el que conozca a la gran autora campanilla de invierno jajaja? Le preguntaré si se inspiró en ti jajaa.

—MICHAEL, no colmes mi paciencia… Digo saliendo del lugar enojado. ¿Cliché? ¿Cliché? ¿Acaso yo quería que las cosas terminaran así o qué? Yo quería hacerme responsable de mis actos, pero antes de eso ella huyo sin explicación alguna. Me trato como un servicio de motel gratis y se largó.

—“Campanilla de invierno” ¿Qué novelas escribirá?... Al final la curiosidad me gano (como casi siempre) y termine descargando la aplicación para leer esas novelas de las que tanto habla mi hermano.

Comencé a leer una novela llamada “giro inesperado”… Me atrapo de una vez, enserio es muy creativa… La novela inicia con una mujer huyendo el día de su boda sintiéndose miserable luego de enterarse que su prometido era un mujeriego… No sé porque, pero por un momento el leerla creí

ver a mi novia fugitiva, me recordó la primera vez que la mire destrozada bajo

la lluvia, sus triste ojos, sus suaves manos y sus cálidos labios. Poco a poco cuando me di cuenta termine la novela y ya era casi de día, no sentí sueño así que me dirijo a mi gimnasio personal ya que necesitaba despejar mi mente.

Una hora después fui por mi celular que ni recordaba donde lo había dejado y tenía bastantes llamadas perdidas de Amelia (Mierda, olvide ir anoche)… Devolví la llamada y el sonido del celular me hizo voltear.

Ahora Amelia se encontraba frente a mí con una bata sensual y corta de seda

color rojo carmesí  y sus labios a juego…

(Estoy en problemas)