AMOR Y MAFIA

Nayla abrió los ojos tras escuchar el murmuro de la gente a su alrededor, las paredes y los pitidos de las máquinas le alertaron que no estaba en su casa si no en un cuarto de hospital, se alertó e intento ponerse de pie de inmediato pero fue inútil, su mundo dio vueltas de nuevo y solo pudo quejarse.

-¿Se siente bien señora Colens?

-Do… ¿Dónde estoy?

-Hospital general de Salud y Género, Manhattan.

-¿Qué pasó? ¿Por qué estoy aquí?

-Bueno, no es grave no se alarme, es solo que tuvo una descompensación de feromonas, también de nutrientes, al parecer ha llevado una mala alimentación y….

-Eso, eso es imposible, jamás me había sucedido, yo soy súper Dominante, jamás me han faltado feromonas… incluso e estado sin comer durante varios días y nunca me he sentido como ahora, siento que mi mundo da vueltas…

-Bueno, supongo que no estaba embarazada en ese momento, ahora mismo el bebé está absorbiendo todos sus nutrientes y las feromonas que produc…..

-¿Qué? ¿Qué…. Dijo?

-Que su bebé absorbe todo señora, hablé con su responsable y me comentó que usted no tiene un alfa, si usted no tiene un alfa y ese bebé está creciendo con la falta de feromonas del padre, tomara todas las suyas para su correcto desarrollo, el bebé nacerá sin complicaciones al ser usted súper dominante puede proveerle de feromonas y el no sentir la ausencia del alfa, pero por desgracia para usted no será lo mismo, debe tener las feromonas de su pareja para estar estable, si no las tiene, se sentirá ansiosa, nerviosa, tendrá malestares seguidos, mareos, en fin…

Nayla aún trataba de procesar todo lo que el médico le decía, cada palabra en su cabeza, estaba aturdida y asustada, por primera vez en toda su vida sintió miedo, estaba embarazada, pero ¿Cómo? Ella no había tenido pareja en los últimos casi 5 meses, la última vez que tuvo relaciones fue con Julián y ella estaba segura de haber tomado los anticonceptivos.

-Debe haber un error doctor… yo no tengo pareja, yo… tuve pero fue hace casi 5 meses e incluso yo tomé anticonceptivos de emergencia… no, no es posible.

-No hay ningún error señora Colens, las pruebas de sangre confirmaron su embarazo, pero si aun le queda dudas hagamos un ultrasonido.

Nayla asintio mientras un camillero la preparaba, en aquella silla se ruedas donde ella solo iba pensando, nerviosa e inquieta.

-Doctor…. ¿Podría interrumpirse?

-Habla de, ¿No tenerlo?..

-Si…

-Mmm si, se puede pero, veamos primero que tal está todo .

El doctor llegó a la sala donde la Omega se recostó en la camilla, levantó la bata y miro su vientre, ¿Cómo no lo noto antes? Estaba duro, abultado, e incluso ya se veía la pequeña bolita que crecía, ella apretó las sábanas nerviosa pensando “aquí dentro crece una vida” y casi lloro al sentir ese miedo en su estómago.

El médico paso el gel por el vientre y Nayla brinco al sentir el frío, miro la pantalla con temor, sudaba, apretaba los puños, se mordía un labio, su corazón se detuvo cuando el médico dijo “si, aquí está” entonces Nayla miro la pantalla y lo vio, el perfecto bebé ya formado, parecía un frijolito con pies y manos, se movió un poco y Nayla brinco..

-Se… ¡se movió!

-Por supuesto señora Colens, está vivo… y fuerte por lo que miro… movió un poco el aparato y presiono un botón y entonces ella lo escucho.

BADUM BADUM BADUM..

El sonido del corazón del bebé, no habría palabras que explicarán la sensación tan maravillosa que es escuchar por primera vez el corazón de tu bebé en tu vientre, quienes somos madres lo entenderemos, esa sensación tuvo Nayla cuando escucho el corazón de su cachorro y lloro, por primera vez en toda su vida lloro a mares.

-Bien señora, el bebé está bien, buen tamaño, buen aspecto, buen latido, tiene 23 semanas se gestación y es un varón, si quiere interrumpir el embarazo vamos al consultorio y programemos el proces…..

-¡Nooo!, No… yo, voy a tenerlo, el nacerá, quiero a mi bebé… dígame ¿Qué debo hacer? ¿Qué cuidados debo tener a partir de ahora?

El médico sonrió y asintio mientras Nayla y el regresaban al consultorio, Nayla apretó su vientre y lo sobó un poco, dentro de ella estaba ese bebé, ese cachorro que era producto del amor que había entre ella y su alfa, entre ella y Julián, era un niño había dicho el médico, no pensó mucho el nombre cuando sonrió y dijo, “Te llamaras Julio”.

El medico dio instrucciones a Nayla y ella salió del hospital en compañía de Valeria su asistente beta

-Val… esto que pasó aquí hoy, nadie debe saberlo, ¿Quedó claro?

-¿De que habla señora? Que esta usted encinta, no se preocupe, por mi parte usted sabe que le soy totalmente fiel, pero si me permite, yo no soy Omega pero mi hermana lo es, se que es importante el alfa en su embarazo, señora ¿El papá de su bebé? ¿ No cree que debería saberlo?

-Mi bebé… es mío Valeria… el alfa no, nosotros no nos veremos de nuevo.

-Entiendo, entonces debemos seguir las indicaciones del médico ¿No es así? !A descansar!

-¿Qué? ¿De que hablas? Jajajaja no Valeria sabes bien que no puedo quedarme en casa….

-Ni modo, indicaciones médicas… 🤷

Nayla gruño al tiempo que la beta conducía, llegó a la casa donde Nayla estaba viviendo hacia unos meses, muy por el contrario a lo que todos pensarían ella no vivía bajo lujos ni nada por el estilo, vivía cómodamente pero de forma sencilla, el dinero que ganaba mayormente de su negocio de lavado de dinero, lo ocupaba en la asociación y la cultura que ingreso en la organización, no había metido las narices en el negocio de los ancianos socios de Simón, pero no le agradaba lo que últimamente hacían, seguían robando omegas, secuestrando gente y dedicándose a la prostituci0n de omegas clandestinamente.

Nayla agradeció a la chica y entro a su casa, era bonita pero se sentía fría, sola, vacía y triste a veces, es por eso que Nayla no quería estar allí y vivía la mayor parte del tiempo en la oficina desde la que trabajaba, sin contar que Nayla odiaba estar encerrada, entro a la cocina donde solo tomo un poco de leche y galletas, se recostó después en la cama y suspiro, entonces sintió esa pequeña patadita de ese ser que dentro de ella crecía, Nayla brinco y se puso tensa, todo eso era nuevo para ella.

-¿Tienes… hambre bebé? No tenemos comida en casa… ¿Será que pediremos a domicilio?

Se recostó mientras sobaba su vientre.

-¿Qué estará haciendo papá he? ¿El.. pensará en nosotros? Bueno… no sabe que existes así que… supongo que la pregunta sería ¿Pensará en mi? Jejejeje yo… si pienso en el, todos los días, cada maldito día de cada maldita semana jajajajaja… pfff lo amo tanto bebé, amo tanto a tu papá… pero tú, me quedas tú…

Nayla siguió hablando a su bebé mientras le ganaba el sueño.

...…….....

Nayla caminaba con tranquilidad sobre el campo, ella estaba calmada pero dentro sentía miedo, por inercia e instinto se cubría el vientre mientras caminaba, el agua sonaba fuerte en aquel claro rio, el reflejo de la luna enorme, redonda, blanca y brillante se reflejaba allí en el agua, por alguna razón eso le dio paz y tranquilidad, se sentó en la orilla mientras escuchaba el agua correr, a lo lejos la mujer hermosa, morena, de negro y largo cabello y verdes ojos, profundos como el campo santo la miraban, el chasquido de las hojas alertó a Nayla que brinco mientras por instinto llevo su mano a la sobaquera para darse cuenta que no llevaba ningún tipo de arma, se paralizó de miedo y se movió buscando de dónde venía el ruido.

A lo lejos la miro, la mujer que cantaba mientras caminaba a la orilla del río también.

-¿Qui… quien anda allí?, ¿Quién eres, que quieres?

-Tranquila… tranquila Nayla, no te haré daño, estás en mi hogar después de todo, bueno, nuestro hogar… (sonrisa)

Nayla escucho la voz y la calma llegó a ella casi de inmediato, se sintió segura y tranquila y camino hacia donde estaba de pie aquella mujer.

-Tu… tu eres..

-Asi es, soy tu luna, ¿Como estamos Nayla? Ahora, ¿Más tranquila?...

-Yo… jamás te había visto..

-Logico, me ha obligado a dormir por mucho tiempo, pero ahora que desperté hace unos meses estoy bien, me costó curarme sabes..

-¿Por qué estoy aquí?..

-No lo se, has sido tu quién me ha buscado Nayla… pero es normal, ahora que tendremos un cachorro buscarás más la protección de tu luna y tu lobo… es una lastima que no podamos escucharlo, ni verlo, ni sentirlo.

-Estoy confundida… ¿por qué, como fue? Yo tomé esas pastillas para… yo no pensé.

-La madre luna, siempre nos da segundas oportunidades Nayla, aunque no lo parezca, a todos, todos somos sus hijos Nayla... todos…. Incluido a ese bebé que llevas en tu vientre, la pregunta no es ¿Por qué se aferró ese bebé a su vida? La pregunta sería ¿Por qué la diosa luna te mando ese bebé a tu vida? Nayla, cuando encuentres esa respuesta, encontráras la paz, y encontrarás a nuestro lobo…

-¿Qué.. que dices, no entiendo? Hey… hey.....

Nayla abrió los ojos y miro lo claro de la luz de la mañana, sintió su cuerpo liviano y cómodo, suspiro mientras volvía a abrazar su vientre.

-¿Por que la diosa te mando para mí? ¿Por qué bebé?

Preguntaba con una sonrisa, después se levantó a buscar algo de comer, debía alimentar bien a su cachorro.