Seguro Que Sería Solo Temporal?

Luisa Maldonado se hallaba detrás del atril de recepción comprobando la lista de reserva cuando se abrió la puerta del restaurante con una sonrisa de bienvenida en el rostro alzó la vista y vio a un hombre que le provocó un extraño vuelco en el corazón

la primera palabra que apareció en su mente fue vaquero y no supo porque no llevaba ni botas ni un sombrero iba vestido como la mayoría de los clientes de forma informal con los vaqueros prietos como el abrazo de un amante y una camisa celeste remangada hasta la mitad de los antebrazo

tenía una estatura impresionante calculó que rondaría el metro 95 o más era fibroso y musculoso tenía una mata de pelo lacio casi negro aunque con leve destello de un rojo profundo bajo la luz lo llevaba largo recogido en la nuca con una fina cinta de cuero era notable con rasgo marcado y bien definido mandíbulas cuadradas y ojos oscuros y penetrante la piel atesada por el sol casi broncilia se preguntó si tendría una parte de nativo estadounidenses quizás

pero no era lo que llamaría atractivo no en el sentido en lo que era Jeff

en qué puedo ayudarlo? preguntó con una sonrisa desenterrando los pensamientos perdidos en de su antiguo amante

no tengo reserva pero me gustaría una mesa para uno si dispone de ella

su voz era suave ronca tirando un Ceci y tentadora

sí desde luego repuso después decirme mentalmente que era hora de crecer por aquí

recogió un menú y lo condujo a una mesa para dos preparada en un rincón entre dos ventanales

él enarcó una ceja un gesto divertido cuando ella le apartó la silla

gracias

de nada le entregó el menú esta noche Tom será su camarero sintiéndose extrañamente jadeante añadió que disfrute de su cena

él volvió a sonreír

Luisa sintió los efectos de esa sonrisa durante todo el trayecto de vuelta hasta el atril de la entrada se dijo que era ridículo y desenterró los pensamientos de ese hombre alto al ver que una hilera de comensales inesperado la esperaba

ocuparse de ellos le devolvió la concentración después de sentar a un grupo de cuatro personas cerca de la mesa del rincón oyó al hombre alto que la llamaba con voz queda

señorita

esa sensación trémula se recaudó con una sonrisa profesional se detuvo junto a su mesa

necesita algo? respondió notando que tenía la cerveza a medio llenar él le dedicó esa sonrisa sugerente la sensación trémula se convirtió en una oleada de calor

está Vic en la cocina esta noche?

la pregunta la desconcertó un momento no sabía que había esperado pero no que preguntara por su jefe

sí respondió recobrando la ecuanimidad

quieres darle un mensaje de mi parte

sí desde luego qué otra cosa podía decirle

dígale que a Carlos le gustaría hablar con él volvió a sonreír revelando unos dientes fuertes y blancos

Carlos solo Carlos, inquirió Santo cielo tenía una sonrisa devastadora

solo Carlos corroboró y rió despacio él sabrá quién soy

Mmm de acuerdo se lo diré giró para dirigirse a la cocina menos mal que Jeff la había inmunizado contra los hombres porque alguien como Carlos se metería con suma facilidad bajo la piel de una mujer incauta

con la vista clavada en el fascinante movimiento de sus caderas mientras empujaba la puerta de la cocina pensó que era una mujer muy atractiva de estatura media era toda mujer desde los rizos sueltos de sus cabellos oscuros hasta los tobillos finos pasando por todas las partes intermedia y había notado que no llevaba anillo en la mano izquierda

aunque eso no significaba necesariamente que no estuviera casada se preguntaba si podría ser una de esas mujeres a las que no le gustaba lucir el anillo cuando una voz familiar interrumpió sus cavilaciones

Carlos viejo perro cuándo has llegado a la ciudad?-vic molino se detuvo junto a su mesa con una enorme sonrisa de bienvenida en la cara y la mano derecha extendida

Carlos se incorporó estrechó la mano y atrajo al hombre más bajo para darle un abrazo de camaradería

al retirarse indicó la silla vacía que tenía frente a la suya

tienes algún momento para charlar o está demasiado ocupado en la cocina

Vic sonrió

siempre tengo un minuto para ti Carlos

cómo diablos estás? enargó las cejas oscuras ha pasado tiempo desde la última visita

sí lo sé le devolvió La sonrisa he estado demasiado ocupado ganando dinero ahora antes de que llegue el invierno pretendo gastarlo un poco

eso está bien en ese momento se acercó un camarero a la le sonrió yo me yo me ocuparé de este cliente pero la propina seguirá siendo para ti

Thom sonrío

gracias Vic hizo además de girar para marcharse pero Vic lo detuvo de nuevo

una cosa Tom puedes traerme una cafetera recién hecha, miró a Carlos quieres otra cerveza

este movió la cabeza

no gracias cenaré con vino pero me gustaría una taza de café

enseguida señor Tom se marchó

Carlos miró alrededor del comedor el negocio parece activo como de costumbre

ha ido bien contestó Víctor con gratitud incluso con el bajón económico debido a la crisis funció el seño este año ni siquiera me he tomado unas vacaciones

pobrecito se mojó Carlos lisa te tiene a raya eh

jamás Víctor sonrío con ganas lisa me llama demasiado como para encontrarme algún defecto

Carlos experimentó una sensación mezcla de añoranza y vacío sin duda no era envidia de su amigo y la mujer con la que se había casado hace 5 años

de hecho prosiguió Víctor satisfecho en este momento lisa se siente demasiado feliz como para ver algún defecto en alguien observó el ceño en el rostro de Carlos nacido de una confusa curiosidad

bueno. y la culminación del chiste!

Víctor río feliz

está embarazada Carlos después de todo este tiempo de todas estas plegarias y las esperanzas vamos a tener un bebé

el rostro de Carlos se iluminó con una sonrisa

eso es maravilloso Víctor. para cuándo?

primavera está en el comienzo de su segundo trimestre

eso es magnífico para los dos sé lo mucho que habéis deseado un bebé, mientras felicitaba a su amigo volvió a la experimentar ese anguijonazo de anhelo vacío lo desterró mientras estrechaba la mano de Víctor

sí Víctor sonrió como un niño estábamos a punto de aceptar que ya nunca lo tendríamos

Carlos hace su copa de cerveza, bueno por la perseverancia se acabó la cerveza que quedaba en la copa al depositar en la mesa la encargada de recibir a los clientes se presentó con una jarra de café recién hecho

Tom estaba ocupado en otra mesa explicó así que lo he traído yo algo más Víctor

no gracias movió la cabeza cuando ella giró la detuvo por la muñeca aguarda un momento quiero presentarte a un viejo amigo

de acuerdo le sonrió a Carlos

él sintió una falta de aliento instantánea se puso de pie al tiempo que lo hacía Víctor

Carlos dijo este está adorable señorita es lisa Maldonado mi maitre y amiga de lisa y mía le sonrió a la joven

Luisa Maldonado somos amigos desde la universidad y ha sido amigo de lisa desde que nos casamos en sus ojos brilló un destello burlón sospecho que lo habrá elegido a él de haberlo conocido antes

exacto colaboró Carlos ofreciéndole su mano encantado de conocerte Luisa