RENACÍ EN LA DUQUESA VILLANA

No entendía que pasaba había despertado hace unas horas y estaba mirando todo incluso se asomó a la ventana y vio un inmenso jardín.

También tenía 2 grandes proporciones que antes no eran tan grandes la curiosidad y el miedo la invadió y busco un espejo, tal vez aún estaba afectada por el veneno y puede que la hayan secuestrado.

Estaba entrando en una crisis de pánico, después de estar días en el hospital te despiertas como si nada y en un lugar que no conoces con un nuevo cuerpo, porque el cuerpo que veía en el reflejo del espejo no era ella.

Comenzó a respirar profundo los recuerdos de ese cuerpo ya habían regresado, pero la confundían, porque se mezclaban con sus memorias lo que le estaba causando una crisis de identidad grave.

Al diablo con las novelas que había leído donde las personas que trasmigraban se adaptaban a sus cuerpos rápido, ahora mismo no sabía quién era.

Estaba intentando controlar sus impulsos de gritar y decidió concentrarse en los recuerdos que tiene, tal vez esta era su nueva oportunidad, no lo sabía, pero debía ordenar su mente no podía ir por ahí con una crisis mental.

Algunas personas que sabía por sus recuerdos que eran sus doncellas habían entrado a llevarle comida y medicinas.

Ellas habían entrado porque escucharon algo caer y se encontraron a la señora en el piso con sus manos en la cabeza y arrimada contra un mueble por eso salieron y trajeron esas cosas.

Los recuerdos de Celia Basil la dueña del cuerpo estaban un poco confusos pensó que las doncellas la odiaban, pero tenían expresiones de terror y temblaban.

Con ella funcionaba la frase nada es lo que parece, porque a diferencia de su apariencia parece que su carácter no ha sido el de una blanca paloma.

Cuando salieron de su enorme cuarto se acercó otra vez al espejo debía acostumbrarse a su apariencia.

Así como en su anterior vida era una gran belleza que para su sorpresa era pelirroja y no había notado su cabello, porque era en lo último en lo que pensaría cuando ni siquiera sabía dónde estaba, también algo que la dejó un poco deslumbrada eran sus ojos de color morado con leves tonos azules que le resultaban extrañamente hermosos y que generaban un contraste con su rostro que le proporcionaban una cara sensual y coqueta, ya que no tenía rasgos suaves, sino más bien maduros, poseía unos hermosos labios grandes y rojos.

Otra cosa que le había llamado la atención eran sus nuevos atributos los cuales eran muy grandes de igual forma lo eran sus caderas y su trasero formando así un cuerpo que le despertaría lujuria a cualquiera, pero parece que aún seguía siendo virgen y eso que según sus recuerdos estaba casada.

Ahora que recordaba este cuerpo tenía un esposo muy rico y poderoso que le cumplía sus caprichos a pesar de que siempre lo despreciaba por la máscara que usaba.

Debido a sus recuerdos solo sabía pequeños fragmentos entre estos su boda, también momentos en los que trataba mal a su esposo y como en lugar de gritarle o reprender solo les ordenaba a las doncellas que lleven a la señora a la habitación.

No sabía que pasaba, porque su esposo usaba esa extraña mascara y el motivo por el que no se divorciaba de ella a pesar de todo, solo podía esperar a que las memorias regresen y saber la verdad desde su perspectiva.