La Reina De La Mafia

De repente

¡PUM!

Sasa y sus amigas golpearon la mesa de Azka y sus amigos con fuerza, lo que provocó que todos los estudiantes de la cafetería los miraran.

"¿QUÉ TE PASA?" gritó Salsa.

"¡Cállate, zorra!" gritó Cherry.

"¿Eh, qué dijiste, zorra? No te has mirado en el espejo, pareces una zorra con ese maquillaje", dijo Angela a Sasa y sus amigas.

"Sí, seguro que no tienen espejo", añadió Abila.

Mientras tanto, Azka seguía relajado comiendo su comida sin prestar atención a Sasa y sus amigas.

"¡Cuida tu lenguaje!" gritó Agnes.

"Ya nos arrebataste a nuestros chicos", dijo Sasa.

"Pffft ¿tus chicos? ¿Quiénes? ¿Ellos?" preguntó Abila conteniendo la risa mientras señalaba a Danu y sus amigos.

"Eh, ustedes, ¿son ellas sus novias?" preguntó Salsa a Danu y sus amigos.

"Qué asco, me daría vergüenza tener una novia como ellas", respondió Gavin.

"Qué asco me daría tener una novia como tú", dijo Ferel mirando con desprecio a Sasa y sus amigas.

"Eh, cariño, ¿por qué estás callado? Defiéndeme", dijo Sasa aferrándose a la mano de Arion.

"¿Qué te pasa? Suéltame", dijo Arion sacudiendo la mano de Sasa con fuerza.

"Todo esto es tu culpa, Arion se está alejando de mí", dijo Sasa a Azka y luego la abofeteó.

¡PLAK!

Una fuerte bofetada aterrizó en la mejilla de Azka.

Pero Azka siguió bebiendo tranquilamente su té helado sin azúcar.

"Vaya, esta chica es muy tranquila", pensó Gavin.

"Qué locura, la abofetean así y sigue callada", pensó Kenzo.

"Ay, pequeña, no te enojes", pensó Danu, porque sabía que si Azka se enojaba seguramente lastimaría a alguien, como lo había hecho con su padre.

"¿Eres sorda? ¡Si alguien te habla, responde!", gritó Sasa, luego tomó el té helado de Azka y lo derramó sobre su cabeza.

Inmediatamente los amigos de Azka y Danu se sorprendieron al ver que Azka, que había estado callada desde el principio, se había convertido en el objetivo de Sasa.

"¿Ya terminaste?" preguntó Azka poniéndose de pie y mirando fijamente con intensidad.

"¿Qué vas a hacer?" preguntó Sasa fingiendo valentía, aunque estaba asustada.

Sin responder a la pregunta de Sasa, Azka luego abofeteó la mejilla de Sasa hasta que cayó al suelo con la comisura de los labios ensangrentada.

"Eso es porque te atreviste a abofetearme", dijo Azka con frialdad.

Sasa se levantó e intentó abofetear a Azka, pero Azka detuvo su mano y la sacudió.

Azka luego tomó la bebida de Arion y la derramó sobre la cabeza de Sasa y apretó el vaso hasta que se rompió.

¡PYAR!

El vaso se rompió y cayó, haciendo que la mano de Azka sangrara sangre fresca que dejó gotear en el suelo de la cafetería.

Inmediatamente todos los que estaban en la cafetería se sorprendieron y también temieron la ira de Azka.

Azka luego abofeteó a Sasa y sus amigas de nuevo.

¡PLAK!

¡PLAK!

¡PLAK!

¡PLAK!

Haciendo que Sasa y sus amigas cayeran al suelo besando el suelo de la cafetería.

"Eso es porque te atreviste a llamar zorras a mis amigas y a perturbar mi paz", dijo Azka.

"¡VÁYANSE TODOS!" gritó Angela.

Inmediatamente Sasa y sus amigas huyeron de la cafetería porque se sintieron humilladas.

"Pequeña, te curaré la mano", ofreció Danu tomando la mano herida de Azka.

"No es necesario", dijo Azka sacudiendo la mano de Danu y luego saliendo de la cafetería.

Arion persiguió a Azka y la llevó a la enfermería y le curó la mano.

"Debes pensar antes de actuar, no te lastimes", dijo Arion vendando la mano de Azka.

Azka solo lo miró fijamente sin prestar atención a las palabras de Arion.

"Listo", dijo Arion cuando terminó de vendar la mano de Azka.

Azka estaba a punto de salir de la enfermería, pero Arion detuvo su mano.

Azka luego se dio la vuelta e involuntariamente sus ojos se encontraron.

Deg deg deg

El corazón de Arion latió más rápido.

"¿Qué?" preguntó Azka con voz inexpresiva.

"Peleaste hace un rato, ahora ven conmigo a la sala de orientación", dijo Arion tirando de la mano de Azka hacia la sala de orientación.

Al llegar a la sala de orientación

"Arion, ¿qué pasa?" preguntó la Sra. Sinta.

"Esto, señora, peleó en la cafetería", respondió Arion señalando a Azka que estaba de pie a su lado.

Azka luego se sentó en la silla sin esperar una orden.

"¿Quién te dijo que te sentaras?" preguntó la Sra. Sinta.

"Yo", respondió Azka brevemente.

Huft La Sra. Sinta suspiró con frustración porque ya estaba harta del comportamiento de Azka, que casi todos los días entraba y salía de la sala de orientación.

"Azka, tú eres bla.... bla.... bla....." sermoneó la Sra. Sinta, algo que Azka nunca escuchó.

Azka se puso los auriculares en secreto y miró fijamente a la Sra. Sinta.

"Azka, ¿no me estás escuchando?" preguntó la Sra. Sinta.

Pero Azka no respondió.

Arion, al ver que Azka estaba usando auriculares, se los quitó uno.

"Está usando auriculares, señora", dijo Arion quitándose uno de los auriculares de Azka.

"Azka, te castigo a limpiar la sala de la organización estudiantil después de la escuela", dijo la Sra. Sinta "Tú, Arion, la vigilarás", añadió la Sra. Sinta.

Azka salió inmediatamente de la sala de orientación.

"Con permiso, señora", se despidió Arion y luego fue tras Azka.