Elizabeth Mc Carthy es una mujer de tan solo 18 años, llegó a New York sola, procedente de Irlanda.
Es pelirroja, de fuerte carácter y con mucha decisión.
Es el año de 1840, las caravanas de aventureros comenzaban a salir en busca de fortuna, hacia el lejano Oeste.
Las circunstancias obligaron a Elizabeth Mc Carthy, a embarcarse en ésta aventura. A través de ella va a pasar por tantas vicisitudes y acontecimientos que la van a obligar a echar mano de toda su fortaleza de espíritu y carácter para poder lograr su sueño.
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12-LA TRAGEDIA DE CLARK.
Al día siguiente, las dos hermanas ayudaron a Clark con la limpieza de su carreta, no llevaba muchas cosas, ya que el muchacho no tuvo un hogar fijo, compró muchas semillas para sembrar, de diferentes frutos y hortalizas. A Petra le llamó la atención una cadena, que contenía un dibujo de una mujer muy hermosa. Es el único recuerdo que tengo de mi Madre, dijo Clark, al notar la curiosidad de la muchacha.
Era muy bella. Qué pasó con ella?.
Fue cuando llegamos a Nueva Orleans de Escocia, el ambiente en el Puerto de Nueva Orleans es muy violento, como ahí llegan las cadenas de esclavos, hay muchos hombres que se dedican a comprar esas cadenas, para luego llevarlos a las fincas a trabajar. Los maltratan con lujo de violencia, y ese comportamiento violento, lo aplican con todos.
Cuando bajamos del Barco, buscamos mi Madre y yo, un cuarto para tener donde vivir. Encontramos uno muy cerca de la explanada dónde se realiza la puja por los esclavos. Como vimos que el lugar no era seguro, y menos con la belleza de mi Madre. Había mucho granuja y constantemente molestaban a mi Mamá. Una mujer nos dijo que si Mamá sabía cocinar, en las fincas llegaban a solicitar mujeres para trabajar en la cocina de las mansiones. Entonces dejamos ese lugar terrible y en la primera Finca que llegamos, fue contratada. Ahí trabajaba un fulano, era el capataz y muy mala persona. Se prendó de la belleza de mi Madre y comenzó a frecuentar la cocina con cualquier pretexto, solo para estar molestando a Mamá. Yo tenía 14 años y una ocasión ese tipo no soportó el rechazo de mi Madre y la quiso tomar a la fuerza, mi madre se defendió y tomó lo primero que encontró, fue un cuchillo para destazar carne y se lo clavo justo en el corazón. El fulano murió al instante. Mamá me dijo que me fuera. Que huyera a dónde fuera, pero fuera de la finca. Huí y ella fué detenida y encarcelada en Nueva Orleans. Posteriormente la juzgaron y la condenaron a morir en la horca. La sentencia se cumplió. Vi la ejecución de mi Madre. Una señora me ayudó a sobrevivir y me llevó con ella a su casa, Joan Webster se llama. Pero yo no era feliz, pasaba constantemente por el lugar de la ejecución y me llenaba de tristeza y dolo. Así que un día decidí alejarme de ese lugar maldito. Me despedí de Joana y fuí de un lugar de aquí a otro, de allá para acá.Trabajé en lo que pude. Junté poco a poco algo de dinero y supe de Saint Louis. Tuve que comprarme un arma y aprendí yo solo a usarla. Lo tenía que hacer ya que, como ustedes bien saben, por allá es prácticamente la ley de la selva. Con muchos esfuerzos logré llegar a Saint Louis. Encontré trabajo en un almacén haciendo de todo, la dueña es la Señora Maxim y me dio un sitio para dormir en el granero.
La conocí, dijo Petra. Es una buena persona.
Ahí estuve diez años. Hasta que un día le dije que me iba a unir a la caravana, para viajar al Oeste y ella me animó a hacerlo. Me ayudó a comprar la carreta y los caballos, por los años que trabajé para ella, compré las pocas cosas que traigo y este Winchester de palanca de repetición y aquí estoy.
Siento mucho lo de tu Madre, Clark.
Pero así es la vida en aquellos lugares, dónde llegan fulanos buscando fortuna, muchos son criminales indeseables que huyeron de la justicia de su País y llegaron acá a seguir siendo unos indeseables granujas, dijo Elizabeth.
Mucho tiempo pensé en la venganza, pero el tipo ese murió a manos de mi propia Madre, y pues ya no hay de quién vengarse. Así que me olvidé de esa loca idea, de no haber sido así, yo hubiera terminado como esos granujas y decidi llevar una vida sin tener nada de lo que después tuviera que arrepentirme.
Hiciste bien Clark, dijo Petra. Ahora aquí estamos, las he conocido y espero que me acepten como su amigo.
Claro que si Clark, bienvenido a nuestra vida. Dijo Petra.