Capítulo 13: El Sacrificio de Saúl.

Alembergh se percató de la presencia de los dos subordinados del mayor, pero al observar a Alembergh con los ojos cerrados, sintió un escalofrío de temor recorrer su espalda. Gritó el nombre de Alembergh en un intento desesperado por advertirle, pero el tiempo se agotó.

Alembergh, al escuchar su nombre, abrió los ojos de inmediato, pero ya era demasiado tarde. El disparo del arma resonó en la habitación, y todos contuvieron la respiración. Por suerte, la bala se incrustó en la pared, pasando peligrosamente cerca del soldado.

El soldado, consciente de lo cerca que había estado de la muerte, se volvió hacia Alembergh con un suspiro de alivio. Continuó cargando a su compañero, quien claramente no estaba en buena forma.

Alembergh miró al soldado con ojos llenos de reconocimiento y emoción. Sus labios formaron una sonrisa a pesar de la situación desesperada en la que se encontraban.

— Por fin te encontramos —dijo Alembergh, la alegría llenando su voz mientras casi derramaba lágrimas de felicidad al ver a sus amigos con vida.

Mario, aliviado por encontrar a su camarada, aunque algo molesto por el disparo cercano, se acercó y abrazó a Alembergh.

— ¿Qué te he dicho sobre disparar el arma con los ojos cerrados? —le reprendió Mario, aunque su tono estaba lleno de afecto y alivio—. Nunca cierres los ojos, porque el blanco se puede mover.

Mario despeinó a Alembergh con su mano derecha en un gesto amigable.

Saúl, con una expresión sombría y cansada, también abrazó a Alembergh. A pesar de su sonrisa forzada, se notaba el alivio en sus ojos.

— ¿Qué te pasó, Saúl? ¿Por qué tienes esa cara de muerto? —bromeó Alembergh, tratando de levantar el ánimo de su amigo mientras se preocupaba por su estado.

Saúl levantó la mirada y, aunque su sonrisa era débil debido al dolor, respondió:

— Creo que me he cruzado con algunos de esos infectados un poco demasiado cerca.

El sentimiento de alivio inicial desapareció abruptamente cuando escucharon el inconfundible sonido de innumerables pisadas acercándose rápidamente. Las pisadas resonaban como un ejército de bestias salvajes hambrientas que se aproximaban a ellos.

Un silencio tenso se apoderó del grupo mientras observaban con terror la entrada del pasillo, conscientes de que se enfrentaban a una amenaza que superaba cualquier cosa que hubieran experimentado hasta ese momento.

Mario y Saúl, con el sonido de los infectados acercándose a toda velocidad, se encontraron con una decisión que cambiaría sus vidas. Alembergh tomó el rifle de Mario, y este último le instó a huir y ponerse a salvo.

— Ve con ellos, Alembergh —le dijo Mario con seriedad—. Intenta escapar, haz lo que sea necesario para sobrevivir. Hazlo por tu padre.

Esas fueron las últimas palabras de Mario antes de empujar suavemente a Alembergh para que corriera. Sin esperar más, el grupo de sobrevivientes se dispersó por las habitaciones adyacentes, buscando refugio.

Cuando Alembergh se volvió para mirar atrás, vio a Mario y Saúl parados allí, decididos a enfrentar la amenaza que se avecinaba.

— Nosotros vamos detrás de ti —afirmó Mario mientras entregaba el rifle a Alembergh. Alembergh salió corriendo, su corazón latía con fuerza mientras dejaba atrás a sus amigos.

Mientras corría por los pasillos oscuros y aterradores del complejo militar, Alembergh se sentía abrumado por la preocupación por Mario y Saúl. Sabía que habían tomado una decisión valiente y sacrificada para protegerlo, y no podía evitar sentir una mezcla de gratitud y tristeza.

En la pasillo en la que quedaron atrás, Mario y Saúl se miraron. Saúl, ya debilitado por su herida y el dolor que sentía, sabía que no tenía muchas posibilidades de sobrevivir mucho tiempo. Con esfuerzo, se zafó de Mario, cayendo al suelo.

Desenfundó su pistola y apuntó a Mario, quien intentó acercarse para ayudar a su amigo. El rostro de Saúl reflejaba dolor y resignación, mientras luchaba por mantenerse en pie y cumplir con una promesa.

— Tienes que cumplir las órdenes del mayor, fue una promesa que hiciste —dijo Saúl con dificultad, su voz temblorosa por el dolor que lo consumía.

Mario estaba molesto y frustrado, pero también entendía la importancia de esa promesa. Saúl no quería ser una carga ni una amenaza para su amigo.

— No me importa, Saúl —respondió Mario, su voz llena de emoción—. Minutos más o minutos menos de vida, ¿cuál es la diferencia?

La pistola de Saúl cayó al suelo mientras Mario intentaba acercarse. Saúl se retorció de dolor, luchando por evitar gritar debido al sufrimiento que experimentaba.

Mario, determinado a ayudar a su amigo, se inclinó para recoger la pistola, pero en ese momento, escuchó un sonido metálico. La espoleta de una granada había caído al suelo.

— ¡Lárgate! —le gritó Saúl, su voz ronca y debilitada. Mario comprendió la gravedad de la situación y corrió hacia la salida, alejándose de su amigo y dejando atrás el lugar donde enfrentarían a los infectados juntos.

La granada yacía en el suelo, su tic-tac constante llenaba el pasillo. Saúl sabía lo que debía hacer.

El corazón de Mario latía descontroladamente mientras observaba a Saúl, quien sostenía la granada en sus manos. No hubo tiempo para despedirse ni para decir las palabras que quedaron atrapadas en sus gargantas. Mario sabía que tenía que correr, dejar atrás a su amigo.

Salió corriendo a toda prisa, sin mirar atrás, mientras el sonido de la granada y las palabras de Saúl resonaban en su mente. El pasillo parecía interminable, y su corazón latía con la angustia de lo que estaba dejando atrás.

Por otro lado, Alembergh, en medio del caos, golpeaba frenéticamente las puertas de las habitaciones en busca de refugio. Gritaba desesperadamente, pidiendo que le abrieran, pero nadie respondía. La sensación de desesperación y aislamiento lo invadía mientras continuaba buscando un lugar seguro.

La explosión se escuchó a lo lejos, y una fuerte sacudida estremeció el complejo militar. Alembergh, sintiendo el temblor bajo sus pies, miró hacia atrás en dirección al pasillo donde había dejado a Mario y Saúl. La incertidumbre lo invadió, pero sabía que no podía detenerse.

En el pasillo donde se encontraba Saúl, la situación era caótica. Saúl, con una sonrisa que mezclaba satisfacción y sufrimiento, logró ver a los infectados que subían las escaleras con rapidez. Se dio cuenta de que ya no había escapatoria para él ni para los infectados que lo rodeaban.

— Los veo en el infierno —murmuró Saúl con gran dificultad, sus palabras apenas audibles debido al dolor que lo asolaba.

Con su último aliento, Saúl activó la granada. Una explosión ensordecedora llenó el pasillo, y una gran cortina de humo se desplegó, ocultando a todos los infectados que se acercaban.

El techo se agrietó y parte de él se desprendió, cayendo sobre los infectados, cubriéndolos con escombros y polvo. El pasillo quedó en un caos total, y la estructura misma del complejo militar tembló por la fuerza de la explosión.

Capítulos
1 Capítulo 1: En las Profundidades del Misterio
2 Capítulo 2: El oscuro interrogatorio
3 Capítulo 3: El Enigma de las Venas Verdes
4 Capítulo 4: La Batalla por la Supervivencia
5 Capítulo 5: Juramento de Supervivencia
6 Capítulo 6: Entre las Sombras
7 Capítulo 7: Difíciles Decisiones en el Caos
8 Capítulo 8: La Huida Desesperada
9 capítulo 9: "La Lucha Desesperada en el Caos"
10 capítulo 10: La Desesperada Búsqueda de los Sobrevivientes
11 capítulo 11: "El Camino hacia la Esperanza"
12 Capítulo 12: Atrapados en la Oscuridad.
13 Capítulo 13: El Sacrificio de Saúl.
14 Capítulo 14: Enfrentando la Amenaza.
15 Capítulo 15: Entre el Fuego y las Sombras
16 Capítulo 16: La Lucha por la Supervivencia.
17 Capítulo 17: "El Peso de la Determinación"
18 Capítulo 18: La Llama Interior
19 Capítulo 19: "Bajo las Llamas de la Determinación"
20 Capítulo 20: "Despertar en el Abismo"
21 Capítulo 21: "Voces del Pasado"
22 Capítulo 22: "Entre Sombras y Misterios"
23 Capítulo 23: "Secretos Revelados"
24 Capítulo 24 "Revelaciones y Confrontación"
25 Capítulo 25: "Revelaciones y Desesperación".
26 Capítulo 26: "Secretos y Dudas"
27 Capítulo 27: "Enfrentando lo Inevitable"
28 Capítulo 28: "Secretos Revelados y Misterios Profundizados"
29 Capítulo 29: "El Misterio de Santiago"
30 Capítulo 30: "La Revelación en la Oscuridad".
31 Capítulo 31: "La Pesadilla Despierta"
32 Capítulo 32: Sombras de Condena.
33 Capítulo 33: Danza de Destinos Desgarrados.
Capítulos

Updated 33 Episodes

1
Capítulo 1: En las Profundidades del Misterio
2
Capítulo 2: El oscuro interrogatorio
3
Capítulo 3: El Enigma de las Venas Verdes
4
Capítulo 4: La Batalla por la Supervivencia
5
Capítulo 5: Juramento de Supervivencia
6
Capítulo 6: Entre las Sombras
7
Capítulo 7: Difíciles Decisiones en el Caos
8
Capítulo 8: La Huida Desesperada
9
capítulo 9: "La Lucha Desesperada en el Caos"
10
capítulo 10: La Desesperada Búsqueda de los Sobrevivientes
11
capítulo 11: "El Camino hacia la Esperanza"
12
Capítulo 12: Atrapados en la Oscuridad.
13
Capítulo 13: El Sacrificio de Saúl.
14
Capítulo 14: Enfrentando la Amenaza.
15
Capítulo 15: Entre el Fuego y las Sombras
16
Capítulo 16: La Lucha por la Supervivencia.
17
Capítulo 17: "El Peso de la Determinación"
18
Capítulo 18: La Llama Interior
19
Capítulo 19: "Bajo las Llamas de la Determinación"
20
Capítulo 20: "Despertar en el Abismo"
21
Capítulo 21: "Voces del Pasado"
22
Capítulo 22: "Entre Sombras y Misterios"
23
Capítulo 23: "Secretos Revelados"
24
Capítulo 24 "Revelaciones y Confrontación"
25
Capítulo 25: "Revelaciones y Desesperación".
26
Capítulo 26: "Secretos y Dudas"
27
Capítulo 27: "Enfrentando lo Inevitable"
28
Capítulo 28: "Secretos Revelados y Misterios Profundizados"
29
Capítulo 29: "El Misterio de Santiago"
30
Capítulo 30: "La Revelación en la Oscuridad".
31
Capítulo 31: "La Pesadilla Despierta"
32
Capítulo 32: Sombras de Condena.
33
Capítulo 33: Danza de Destinos Desgarrados.

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