La Villana Escapa

Bruno terminó durmiendo en una habitación, la cual es muy cómoda, para ser una posada la cama está suave y las sábanas también.

En la mañana él despertó temprano, mando a llamar al capitán para que se adelanten, al bajar al restaurante Eliana le da una mesa donde le sirven desayuno y el capitán llega.

-Duque, de haber sabido que se quedaría aquí, también habría venido.

-Es bonito.

-La comida es la mejor, ya conoció a la señora Eliana, ella es la encargada de la cocina.

-Que? Ella cocina?

-Si, y no solo eso, prepara los banquetes para algunos nobles, es una excelente cocinera.

Bruno estaba confundido, ella creció como una noble, como es que sabe cocinar.

-Ella no tiene pareja?

-No, que yo sepa no, muchos la cortejan, pero ella nunca les hace caso.

-Como que muchos **Estoy molesto**

Bruno solo ve como Eliana atiende las mesas, hay viajeros y caballeros que solo la miran, eso le molesta, como pueden verla así.

Eliana hoy atiende las mesas porque no hay mucha gente, Susan que es la joven que contrato desde que llego con los años aprendió a llevar la cocina y sabe hacer los platillos perfectamente.

Bruno está atento a todo lo que hace, cuando Arthur entra corriendo, saluda a los que están cerca de su mamá y él le pide panqueques para desayunar, el capitan se despide de Bruno y va a supervisar a los caballeros.

Arthur, solo ve que Bruno está solo y va con el a su mesa.

-Caballero buenos días, por qué se fue el capitan.

-Buenos días, tiene trabajo.

Arthur se sienta y Eliana llega con su desayuno.

-Aquí vas a desayunar? Al menos le preguntaste al caballero, estás acostumbrado a platicar con los capitanes, pero debes preguntar si puedes sentarte.

-Oh cierto, perdón, puedo?

Bruno solo reía, Eliana también, desde bebé Arthur está acostumbrado a estar en el restaurante, en la cocina, sale a jugar con los caballeros y los capitanes lo invitan a comer con ellos.

-Si, si puedes.

-Como se llama caballero?

-Soy Bruno Carter.

-Es del ducado Cárter, mi papá es de ahí, mi mamá le mando una carta para que venga a verme.

-Quieres conocerlo.

-Si, estoy muy emocionado.

Eliana solo los ve desde la cocina, los dos son muy parecidos, Aren está con ella y no podía creer cuando vio al duque, su señora está tranquila, espera que todo vaya bien.

Bruno y Arthur desayunan, Bruno no puede dejar de verlo, es un niño muy alegre, muy parecido a el.

-Arthur ve por tu capa, afuera hace frío y daremos un paseo.

-Bien.

Eliana llega con ellos, Arthur va por su capa y Bruno está nervioso.

-Que le has dicho de mi?

-Sabes que su papá es un caballero, que es como el, y que un día vendría a verlo, es todo.

-Que?

-Bueno, en realidad no te conozco, que más podría decirle, vamos más adelante está el río y ahí nadie va, estás listo.

-No.

-Dios!! no seas cobarde.

ambos salen del área de restaurante y van al río, ver la posada de día es diferente tiene muchos detalles, la flores a pesar que el invierno está cerca son bonitas.

-Eliana, esto es muy bonito, como fue que llegaste aquí.

-Cuando salí de la capital, decidí venir aquí, no había cupo en la otra posada y me dijeron que tal vez aquí, estaba muy descuidado, poco a poco mejoro.

-Fue mejor que quedarte conmigo.

-Bruno, no te hagas daño, no había sentimientos entre nosotros, aunque digas que tú los tenías eso no es amor.

Bruno, solo aprovecha para abrazarla, ella no pudo reaccionar y se queda quieta entre sus brazos, él apoya su cabeza en su hombro.

-Bruno que haces? Nos van a ver.

-Shhhh, tu dices que no había sentimientos entre nosotros, si bien me molestaba tu forma de ser, jamás fui grosero contigo o si, solo me molestaba que lo dijera en voz alta, me daba pena, ese día bailamos, jamás te rechace, al tomar el vino estábamos en el balcón platicando, yo te iba a preguntar si realmente todo lo que decías era verdad o que sinceramente me dijeras si era por conveniencia, era mejor saberlo, se que los compromisos son arreglados, pero era mejor saber si tus sentimientos eran sinceros o no.

-Que? Pero, pero... ** Él se sentía así? ¿Por la verdadera Eliana? ¿Que cambio? Por qué la novela decía que él jamás la amo?**

-Esa noche te veías diferente con tu vestido, no logré controlarme, el efecto de la droga era muy fuerte, mis instintos quedaron al descubierto, sobre todo por qué tú también estabas así, esa fue una noche que he recordado todo este tiempo, acaso fue desagradable, esa noche concebimos a nuestro hijo, dime, fue desagradable.

-** Maldito duque por qué me pregunta eso, yo no lo viví, pero si lo recuerdo 🤤** Este... Es lógico que lo disfrute, estaba drogada, si piensas que tuviste un mal desempeño, no fue así.

Bruno reía, no quería soltarla a pesar de que ella temblaba de nervios.

-Esa noche cuando desperté estabas tomando tus cosas, querías huir y eso me molestó, por eso te dije todo eso, ahora entiendo que todo eso causó la confusión, pense que tú lo habías planeado, en el fondo no me molesto, haría las cosas más sencillas, pero tú me dijiste que lo olvidará fue ahí donde mi ego me hizo hablar, ahora se que de haber actuado de otra manera tu jamás te habrías ido.

-Bueno en eso tienes razón, decidí irme porque di de hecho que lo hacías obligado.

-Por favor, Elena Harris perdóname sinceramente por no haber sabido expresar bien lo que sentía, perdóname por ser egocéntrico y haber perdido la oportunidad de ver nacer a mi hijo, en ese momento estaba tan enojado que de haberte encontrado, te hubiera obligado a casarte conmigo y acepto que te lo reprocharía siempre, ahora sé que mis errores fueron los que nos llevaron a esto.

-Bruno, no hagas eso, te disculpo, pero no quiero que pienses que tengo sentimientos por ti, acepto que eres un duque, eres atractivo, aún así yo tengo una vida aquí, podemos ser padres sin necesidad de estar casados, tu lo serás no tengas miedo, mira quien viene ahí.

Bruno voltea y el Arthur quien llega, Bruno sigue con una rodilla al piso, así se queda para estar a la altura de él.

-Mami, que pasa?

-Arthur, recuerdas que papá vendría a verte.

-Sí, mandaste la carta.

-Si, solo que el llegó antes, él es él duque Bruno Carter, el es tu padre.

-Él es mi papá?

Arthur voltea a ver a su padre, su mamá tiene razón, son parecidos, el mismo color de ojos, mismo cabello y color de piel.

-Puedo abrazarte?

Le decía Bruno al niño, el solo abría sus brazos para que su padre lo abrazara, ver a su padre lo hace muy feliz, por fin lo conoce y es como se lo imagino, es más que un caballero.