Malcriando A Mi Esposa

---------Daniel Martínez-------

Mientras me encontraba en la junta recibí un mensaje en el celular de mi informante, que siempre me mantenía al tanto lo que pasaba alrededor de Emma, ella había sido sacada de la familia Rodríguez y que todo esto había pasado porque Marcos había anunciado el rompimiento del compromiso.

No lo pensó mucho que solo salí apresuradamente para encontrarme con ella en su oficina, si me apresuro pueda que la alcancé. Me subí en uno de los elevadores y solamente pedía que ella estuviera todavía en la empresa, Emma ha estado sufriendo sola todo este tiempo. Su familia la utilizo a su antojo como una marioneta, mientras que, el imbécil de Marcos solo la trataba mal.

Cuando se abrió la puerta salí apresuradamente al verla, tomo sus hombros para ver si ella estaba bien.

Emma: (sorprendida) D-Daniel.

Daniel: (la miro preocupado)- ¿Estás bien?

Marcos: Sr. Martínez aún no… ¿Emma? Tú-

Emma: (seria y fría interrumpió)- no se preocupe, saldré de aquí de inmediato Sr. Marcos.

Cuando me voltee vi que Marcos me había seguido con los otros inversionistas, e incluso se atrevió a mencionar su nombre. Por su culpa, ella ha estado sufrido y ha perdido mucho, pero al escuchar que dijo “mi prometida” nada más quería golpearlo. Pero me contuve por Emma para no agrandar más la situación.

Daniel: (sarcástico)- ¡¿Prometida?!... ella no es su prometida Sr. Marcos, su prometida es la persona que está a lado suyo.

En el momento que Marcos la aparto de mi lado, estaba tan decidido a partirle su madre. No obstante, ella se adelantó abofeteándolo. Bueno… me sentí orgulloso que mi chica le diera su merecido, pronto sabrás que es meterse con ella.

Me interpongo entre ellos y le digo a Marcos - Con respecto al proyecto de lo por terminado, no hará negociaciones con los Ramírez.

Saqué a Emma de esa empresa, pero antes le dije a mi gente que se retiren.

Todo el transcurso del camino paso en silencio, solo conduje hasta mi mansión, aun así, en ella no había alguna reacción.

No me quedo de otra que bajarla del coche, mientras que, la cargaba como princesa hasta adentro de la casa.

Emma: (impactada)- D-Daniel ¿Qué estás haciendo? ¡Bájame!

Daniel: (la

cargaba mientras pasaba por la sala)- Hasta que al fin te indignas en hablar,

estaba un poco preocupado e incluso pensé que el ratón se te había comido la

lengua.

Emma: (molesta)- oye bájame.

Daniel: Espera un poco… ya casi llegamos.

Emma: (nerviosa y a la vez asustada)- Espera, adonde me estás llevándome.

Daniel: A mi dormitorio.

Emma: (sorprendida) ¡¿QUÉ?! Te volviste loco, bájame en este instante.

Daniel sostuvo con fuerza a Emma, al tiempo que, aguantaba los golpes y ciertos rasguños. Al ingresar al cuarto la sentó encima de su cama, pero ella solamente quería escapar.

Él tuvo que disponer a cerrar la puerta con seguro y tratar de tranquilizarla, pero como era tan terca y poco colaborativa. Él la arrincono en su sofá diciendo.

Daniel: tranquilízate, no te haré nada.

Emma: Como puedo confiar en ti, s-solo déjame ir.

Daniel: (se acercó un poco a su rostro y la miro a los ojos)- Digamos que te dejo ir… a donde iras.

Emma: (frunció el ceño)- Es lógico que a mi casa.

Daniel: - (alzo la ceja)- M mm… acasos te refieres en la casa que vives con Marcos.

Emma: (grito exaltado)-NO… (se quedó pensando) Yo.

Él le dio un golpecito en la frente para luego incorporarse a sentarse.

Daniel: Solamente quédate aquí… sé que no tienes a donde ir, a estas alturas todo el mundo sabe de tus problemas. Sí, sales serás perseguida por los paparazzi.

Emma: (seria)- No es necesario quedarme en tu casa, puedo quedarme en un hotel.

Daniel: Eres imprudente… -(molesto)- por cuanto tiempo crees que puedes pagar la tarifa de tu hospedaje, no tienes dinero y ni siquiera un trabajo estable con el que puedas sobrevivir afuera.

Emma: puedo quedarme en la casa de m-mis padres.

Daniel: (cabreado)- Basta tus padres-

Me quedó quieto y en silencio porque ella estaba aguantando sus lágrimas, me disculpe enseguida mientras la abrazaba y la consolaba.

Paso aproximadamente una hora, hasta que, sus lágrimas dejaron de fluir y poco a poco se quedó dormida por el agotamiento y la explosión repentina de emociones.

La llevé a recostarse en mi cama, entre tanto, cerraba la puerta cuidadosamente.

Comencé hablar con el personal para indicarles que deben tratarla con el mismo respeto como si se tratase de mí.

No pienso dejarla ir a dormir o vivir a ningún lado, si no es en mi casa.

Después ordené todo lo necesario para su instalación en esta casa.

 ---------- Emma Rodríguez----------

Mi cuerpo se sentía relajado, tenía tiempo que no descansaba de esta manera, al abrir mis ojos. Me llevé un susto de muerte cuando vi a mi alrededor, recuerdo que estaba hablando con Daniel y de pronto mis emociones se desmoronaron e incluso moje su camisa iba a irme, pero quede dormida encima de él.

AHHHHHH (grito interno) que vergüenza debo haber estado loca.

Un momento esta habitación es muy diferente, se podría decir que es femenina, pero él dijo que era su habitación.

La curiosidad me gano que comencé a mirar por los alrededores de su habitación, me acerqué a una puerta en ella tenía. Por un lado, estaba diferentes estilos de conjuntos de ropa de mujer con diferentes estilos de calzado y en el otro lado estaba maquillajes y accesorios.

Emma: Ji, ji, ji (risa contenida y en voz baja)- no esperaba que Daniel tuviera este pasatiempo.

Daniel: (por detrás llega y le dice susurrando a su oído)- ¿Qué pasatiempo?

Emma: Aghgggggh (grito del susto mientras sé voltio rápidamente para quien estaba atrás) Da-Daniel.

Daniel: (sarcástico)- Casi me dejas sordo… Cambiando de tema que opinas de la habitación.

Emma: Bueno, es agradable, tiene un toque acogedor.

Daniel: Y que hay de la ropa.

Emma: A simple vista son muy hermosa, pero… no crees que compraste mal la talla. Se ven pequeñas, pero tu cuerpo es grande, así que-

Daniel: (alza la ceja mientras se cruza de brazo)- Espera, pensabas que estas ropas eran mías.

Emma: (confundida)- no es así… ah, entonces es de tu novia o de tu hermana.

Daniel: Ja, ja, ja, claro que no tonta. No tengo novia (se acerca a ella mientras la pone frente del espejo y por detrás le coloca un collar diciendo, mientras la mira con una sonrisa)- todo lo que has visto hasta ahora te pertenece solo a ti... –(girándola hacia él)- incluido yo.

Emma: (sonrojada y nerviosa dio un paso atrás)- deja de hacer bromas.

Daniel: (serio)- No estoy bromeando Emma. ¿Quiero que seas mi novia?

Emma: (fría le respondió)- Daniel, gracias por lo que has hecho hasta ahora… Pero no quiero estar en una relación con nadie.

La declaración que Daniel acaba de hacerme, me hizo palpitar el corazón momentáneamente. Pero volviendo a mi realidad, sé que él debe estar bromeando con eso. Además, he tenido suficiente sufrimiento con Marcos, que no quiero estar envuelta de nuevo con el amor.

Creo que no estoy hecha para amar, ni ser amada.