Toda mi vida fue un cuento de hadas hasta esa noche, desde esa Noche mi vida cambio.
NovelToon tiene autorización de Margarita Farías corral para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
capitulo 7
Anaís
Estaba por salir de esa habitación pero me empecé a sentir diferente mi cuerpo se encontraba tan , aquel tipo de me acercó y una hoguera estaba dentro de mí cuerpo con tan solo el roce de sus manos mi cuerpo cedió antes sus caricias por más que quise reprimir este deseo no pude era algo mucho más fuerte por más que mi mente se negaba, pero mi cuerpo quería más de él, quería sentir más que caricias, quería verlo y sentirlo en mí, mi deseo fue mucho más fuerte tanto que mi razón se nublo por la pasión está no era yo, jamás había hecho algo como eso, jamás me había dejado llevar por el deseo pero está vez me arrastraba, mi raciocinio me abandono lo tomé de la camisa, lo fui besando, le fui quitando la camisa el también me ayudó a despojarme de toda mi vestimenta estaba tan dispuesta, tan extasiada, el calor de sus manos eran lo único que calmaba este ardor pero mi cuerpo era cada vez más exigente quería mucho más, no medí las consecuencias de mis actos, por mis venas corría lava ardiente y el era el único que podía apaciguar mis ansias, el se fue apoderando de mi, me tomo y yo no opuse la mínima resistencia antes yo me le entregué en bandeja de plata, me hizo suya y tal vez este mal decirlo pero después de ese dolor fue lo más maravilloso, por todo mi ser corrió un sin fín de sensaciones que me hacían sentir muy feliz, tan extasiada se podría decir que toque el cielo, el fue tan considerado, tan tierno no se cuántas veces lo hicimos hasta que por fin el cansancio nos venció. Por la mañana mi cuerpo dolía al igual que mi cabeza, no recordaba donde estaba fijé mi mirada en todo el lugar los recuerdos comenzaron a golpearme tan fuerte, volví a recorrer el lugar con mi mirada toda mi ropa estaba esparcida por el lugar, mire hacia un lado y ahí sobre la cama estaba él, baje mi mirada y mi cuerpo estaba totalmente desnudo había unos pequeños moretones por mis pechos, me levanta a toda prisa pero caí mis pies no me respondieron era mucho pero mucho el dolor juro que no estoy exagerado, subí mi cabeza para ver si el no se había despertado y no pude evitar ver si rostro el era hermoso, pero a la vez tan varonil y otro golpe de recuerdos cayó el era el tipo con el que casi choco, lastima que sea como todos los hombre que nada más buscan su placer sin importar a quien estén hiriendo, el seguía dormido al parecer tenía el sueño muy pesado, tome mi ropa me cambié, salí con los zapatos en la mano pues no quería hacer ruido, casi corrí hasta el elevador cuando ya estuve dentro de él revise mi teléfono mi abuelo Rafa había llamado varias veces, cuando estuve fuera del hotel tome un taxi hablé con mi abuelo diciéndole que me encontraba bien que me había quedado en casa, que lo decidí de último momento, después de eso colgué llegué a mi hogar me encerré en mi habitación solo esperaba que ninguna empleada fuera hablar con mi abuelo o mis padres me duché y cambie tenía que salir a una farmacia se que lo que pasó podría traer consecuencias y yo aún estoy muy joven, compré la píldora del día después y regrese a casa como si nada hubiera pasado al menos eso creí.